Comienza el viaje de Natsu, Happy, Lucy, Kurai y los espíritus celestiales para poder volverse mucho más fuerte y así defender a sus seres queridos.
Lucy Heartfilia, maga celestial, dragon slayer del sol y maga de Sun Flower.
Natsu Dragneel. dragon...
- No se cómo hemos acabado así - contestó Erza echando su cabeza hacía atrás escuchandose el chapoteo del agua.
- Ara ara, esto fue la solución más pacífica - comentó Mirajane cuyo cabello estaba sujeto en una coleta alta.
- y la verdad, a mi me gusta - afirmó la menor de las Strauss estirándose en su lugar de manera divertida.
- Bueno, creo que está bien relajarse un poco - contestó la blonda.
- Gatita ¿Que es esa cicatriz? - cuestionó la peli verde mirando de reojo al costado de la chica donde se notaba una cicatriz de la longitud de la palma de una mano de una persona.
Brandish había pedido que fueran a un balneario para poder relajarse y tener una especie de momento de chicas. O ¿era fiesta de pijamas? Ni la misma peli verde lo sabía.
Así que así acabamos en unas aguas termales con Erza, Mirajane, Lissana, Lucy y Brandish la cual estaba muy cerca de la rubia mostrando lo cercanas que eran.
La peli verde tocó la cicatriz de la maga celestial haciendo que esta diera un respingon, esta tan centrada en sus pensamientos que no se percató.
- ¿eh? - dijo algo confusa la dragon slayer girando a ver a la peli verde.
Ella recordo que esa cicatriz un poco pequeña se la hizo en la lucha contra Tártaros, exactamente cuando no se acordaba, el estrés y adrenalina le hizo olvidar las heridas y aunque Wendy le mencionó que estaba tan herida que le dejó una cicatriz casi permanente. Lucy no le dio mucha importancia así que no le parecía algo mencionable.
- No es gran cosa Brandish, solo una vieja herida de una batalla - contestó cómo si no fuera algo normal.
Brandish hizo un gesto de desagrado ante lo dicho por la blonda, se alivió en parte de saber que no se lo hizo su familia, pero ahora deseaba acabar con quien fuera que le había hecho eso a su gatita.
- Si pero tu contrincante acabó peor que tú seguramente - afirmó soltando una risita Mirajane.
- Mira-nee ¡Tu también hiciste lo mismo con Sheila! - gritó exaltada la menor de las Strauss la cual infló sus mejillas - ¡¡Aún me acuerdo de cómo usaste el poder de Sheila contra ella y
- ara ara, Lissana, no creo que sea para tanto- afirmó con una leve sonrisa en sus labios la mayor de la familia Strauss.
- Por dios Mira, no tienes por qué ser tan humilde - dijo la peli roja pasando sus brazos al rededor del cuello de la maga de take over demoníaco para después acercar el rostro de la albina contra sus pechos, sin ningún tipo de vergüenza - Debes admitir que eres fuerte.
- ja ja, supongo - dijo con una pequeña gota de sudor cayendo por su cien Mirajane.
- ¿Sois lesbianas? - preguntó de la nada Brandish entre cerrando sus ojos.
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