Teen Wolf: ONE - SHOTS IV

11. Steter

Peter y Stiles comenzaron a salir mientras él menor estaba en la universidad. Cuando su relación se volvió más formal el hombre lobo se mudó más cerca de él y años más tarde se fueron a vivir juntos.

Una vez, cuando su recién habían formalizado su relación viajaron juntos a Beacon Hill para contarle al Sheriff las buenas noticias.

Lamentablemente nada salió como esperaban. Toda la manada estaba esperando a Stiles y se sorprendieron cuando llegó junto a Peter.

Las preguntas no se hicieron esperar y ambos confesaron frente a todos que estaban en una relación.

Varios integrantes de la manada se opusieron. Expresaron sus opiniones con fervor y comentarios hirientes hacia Peter.

Stiles no lo dejó pasar y les pidió que se retiraran. Si no podían ver lo feliz que era junto a él mayor no eran sus verdaderos amigos.

El Sheriff intentó entenderlo pero aún en su mente daban vueltas los terribles actos que Peter había hecho después de salir del coma.

Mientras las lágrimas caían, Stiles se despidió de su padre mientras tomaba la mano de Peter.

Jamás volvieron.

Se instalaron juntos en un pueblo pequeño, cercano a un bosque y comenzaron su nueva vida.

A pesar de que nunca se arrepintió, Stiles siempre pensaba en su padre. A veces se enojaba pero otras veces lo entendía.

— ¿Crees que debería llamarlo? — preguntó Stiles acercándose a Peter buscando consuelo.

— Solo si vos queres.

— Quiero hacerlo pero no quiero que se comporte como hace unos años, no quiero que nos haga daño. Ni a nosotros, ni a los niños.

— Vos queres hacerlo. Inténtalo. Voy a estar con vos suceda lo que suceda. — Stiles sonrió. Sabía que Peter estaría a su lado pasará lo que pasará. La relación que habían construido con los años era sólida porque ambos confiaban el uno en el otro.

— Hable.— sonó la voz del Sheriff a través del teléfono.

— Hola papá, soy Stiles.

— ¡Hijo! ¡Hola hijo! ¿Dónde estás? 

— Estoy en mi casa.

— ¿Te compraste una casa?

— Si. Peter y yo la compramos.

— ¿Sigues con él?

— Si, nos casamos hace algunos años.

— Lo siento Stiles. Tendría que haberte apoyado. No tendría que haberme dejado llevar por todo lo que había hecho mientras estaba mal.

No hay un día que no me arrepienta de eso.— Peter abrazó a Stiles dejando que el menor se apoyara contra él.

— Yo te llamaba porque Peter y yo somos padres. Adoptamos a dos hermanos y creo que es correcto que te conozcan.

— ¡Oh! ¿En serio? ¿Peter también está de acuerdo?

— Si, ambos lo estamos.

— Me encantaría conocerlos. Yo pediré vacaciones e iré a donde ustedes estén.

— ¡Eso sería genial papá! Solo quiero pedirte que no le digas a nadie dónde estamos o sobre nosotros.

— ¿Es peligroso para los niños?

— Si lo mantenemos en secreto no será peligroso ni para vos, ni para nosotros.

— Está bien. Te avisaré a este número cuando este llegando.

— Te vamos a estar esperando. Adiós papá.

— Adiós hijo.

Hola
Espero que les guste.
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