CAPÍTULO 8

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Era un nuevo día, ya había conseguido pasar a la siguiente ronda. Solo tenía una semana para prepararme y saber cuál sería el veredicto de los jueces. Me encuentro muy ocupada recientemente y es debido al negocio del vecino. De verdad, espero con ansias que regrese y así poder enfocarme en mi práctica. 

Según me había comentado uno de los clientes, el señor Díaz iba a volver el jueves. Si era así, solo podría estar en calma un día. 

Aún mi hermano no viene a casa, la discusión que tuvimos fue fuerte. Sin embargo, nunca imaginé que ni siquiera llamaría a mis padres o al menos averiguar un poco como se encontraban luego del asalto. Me sorprendió ese acto de su parte, sabiendo que es el favorito de la familia. Aunque , aseguro que se le terminará la rabieta en tan solo unas semanas más y volverá como si nada. 

Mi vida ha sido muy agitada desde la vez que se me acercó el chico del staff. Me preguntó como le habrá ido con sus demás aspirantes. Debería mandarle un mensaje. Al final, opté por escribirle.

- Buenos días, soy Cam, la que reclutó en el concierto de MINT. Me preguntaba cómo le fue con las demás chicas, ya que la primera y última vez que nos vimos se veía preocupado por esto. Que tenga un buen inicio de semana. 

En tan solo unos segundos, recibí una respuesta.

- Hola Cam. La mala suerte no se alejará de mí. No obstante, eres la primera, ni yo me lo creo. Eres mi primera recluta que consigue ir a la segunda ronda. Eres increíble. Estaba seguro que lo lograrías, posees todo para ser una idol. 

- No es para tanto. Además pasé a las justas. Estaba al borde de ser eliminada. Seungyeon se le notaba que no quería que siguiera. Tal vez, ella sea muy rigurosa a la hora de elegir.

- No te preocupes. Ella siempre es así con todas. Solo tolera, a las personas que postulan para canto, y si no llegas a la nota correctamente, estás vetada para ella. Es muy exigente. Empero, sé que escogiste rap y baile, así que Choi no podrá dar mucho su opinión sobre ti. Lo cual te va genial.

- Antes de que vaya a trabajar, algún consejo.

- Solo sé tu misma. Esfuérzate y da todo de ti en el último perfomance. 

- Muchas gracias. Suerte. Adiós.

- Hasta la vista.

Y allí terminó la conversación. 

Me sentía todavía más presionada, luego de lo que me dijo el chico del staff. Se sentía contento, al saber que había sido la primera en conseguirlo. Debía romper el escenario, si quería que se sintiera orgulloso de mí. Es el único que confío en mi capacidad. 

3 DÍAS MÁS TARDE

Se termina hoy esta pesadilla, después del arduo trabajo. Llegará el señor Díaz. Me llamó esta mañana, y me avisó que llegaría a las 3pm, justo la hora en la que cierro la tienda. No había tenido tiempo para ensayar. Todo el tiempo estaba en el negocio, había demasiada gente y así siguió por los próximo días. Encima, ni me ayudaban. 

- Buenas tardes, señorita-me sonrió- Llevaré dos jugos y un helado.

- Claro, se lo empacó- le di su bolsa, me pagó y se fue.

- Me preguntó cuándo vendrá, me dijo que a las tres y no lo he visto por aquí.

- Acaso, estás hablando de mí.

Había reconocido esa voz, en donde fuera. Era mi hermano.

- ¿Qué haces aquí? Ya te dignaste a aparecerte. Sabes como han estado mis papás.

- Está bien. Lo lamento. Solo que tus palabras, enserio, me hirieron. Ni por la cabeza se me pasó que me odiabas tanto para hablarme de esa manera.

- Ay, pues disculpas. No sabía que tus sentimientos eran tan frágiles- lo mencioné en un tono sarcástico- Lo mejor es que vayas a casa y charles con ellos, te extrañaron mucho. Anda rápido.

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