Donde Park Ji Min trabaja en la cafetería familiar ya que siempre le han inculcado el arte de hacer café.
o
Donde Min Yoon Gi se dirige todas las mañanas a "The Coffee House" frente al mar para inspirarse.
⤐ boy×boy
⤐no copias ni adaptaciones
⤐pos...
A Yoongi se le erizó la piel tan solo sintiendo la del menor sobre la suya, su adormilado corazón latía como si de una taquicardia se tratara, y con su alma estallando, le correspondió el abrazo.
—Mimi, te extrañé. —Admitió con un leve sonrojo en sus mejillas.
—Yo más. —Dice aún sin aflojar su agarre.
—Bien, Jimin. —Musita el mayor con dificultad.
—¿Si? —Responde el pelirubio con una sonrisa, sin siquiera pensar en dejar de aferrarse al pelinegro.
—Me asf-i-ixio.
—¡Yoonie, lo siento! —Dice finalmente soltando a Min, luego de casi hacer malabares para no terminar rompiendo la cafetera.
El menor con la espalda tiesa de sostener el peso del artilugio caminó tambaleándose hacia la barra de la cocina y depositó la máquina, la cual cayó como peso muerto.
—¡Fiu! —Exclamó Jimin mientras apoyaba uno de sus codos en la nombrada, y con su mano libre secaba el sudor invisible de su frente.
—¿Preparaste tus cuerdas vocales Park? —Sonó entusiasta Min mientras cerraba la puerta con cuidado.
—Eso espero, estoy nervioso.
—Sé que lo harás genial. —Dijo con seguridad.
—¿Donde hay un enchufe? —Miró hacia todas partes con el cable de la cafetera en sus pequeñas y cálidas manos que habían abrazado al mayor. —Te voy a hacer un café.
—Me parece genial, hay uno ahí. —Apuntó hacia el enchufe donde se encontraba el microondas. —Lo puedes usar.
—¡Gracias! —Y caminando como un tierno pingüino, se dirigió hacia el microondas.
Conectó la cafetera y presionó el botón que calentaba el agua, mientras esperaba, llenó una taza con agua corriente y la cargó en el compartimento.
—Nunca te había visto hacer un café. —Y de la nada, se encontraba sentado en una de las cuatro banquetas desparramadas por su pequeño pero acogedor apartamento.
—No es tan difícil realmente. —Sacó como si fuera magia, unos cuantos granos de café del bolsillo de su gabardina y los puso en el lugar correspondiente.
—Me perdí cuando la enchufaste.
Y la cocina se llenó de risas matutinas.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
—Yoongi, con respecto a lo de ese día... —Puso la taza debajo del chorro y accionó la cafetera,
—Y-yo, lo siento, en serio.
—No te disculpes, fue... hermoso. —Justo ahí, cuando lo miró a los ojos, solo en ese momento, Min se perdió totalmente.
—¿T-te gus-t-tó? —Tartamudeaba hasta con los codos, pues no podía creerse nada de esto.
