Capítulo 20.

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LUCÍA POV.

Estaba en casa de los gemelos cuando nos ha llamado Nora desde el coche diciendo que estaba camino a Barcelona. Después de hablar un rato con ella y con Sergio, nos ha suplicado que nos pasemos por su casa a ver a Anakin porque no se fía de Samuel.

A pesar de que la notaba muy feliz por estar con su hermano que se que le quiere muchísimo, la noté apagada, sin ese toque de locura que tanto la caracteriza. Y aunque ella lo niegue, yo sé lo que es. Lo sabría cualquiera que la viera a su lado. Como sonríe como una estúpida cuando Rubén la mira o la abraza. Y como es una cabezota no quiere aceptarlo.

Hablando de Rubén, estamos ahora con él, con los gemelos, con Samuel y con Guille, esperando a que lleguen Mangel y mi chico. La verdad es que siempre que le había visto en videos, Cheeto me había parecido muy atractivo pero encima es un tío increíble. Tengo mucha suerte.

—Eh chaval. —llama Guille a Samuel. —Llevas otro chupetón en el cuello. ¿Te la sigues tirando? ¿Enserio?

Él contesta riéndose.

—Me parece muy fuerte que no se lo digas ni a tu mejor amigo. —le dice haciéndose el ofendido.

—¿Qué no te diga qué? —pregunto confundida.

—Que no me diga quién es la chica.

—¿Queréis saberlo? —nos pregunta Samuel apoyando sus codos en sus rodillas.

—¡Sí! —espeta Rubén que está sentado a su lado y se coloca de la misma forma que él, hacia delante.

—De acuerdo, de acuerdo. —dice con una sonrisa socarrona atravesándole la cara. —Es Nora.

Primero flipo. No me lo esperaba, aunque es bastante lógico. Los dos son como dioses griegos y llevan semanas viviendo juntos. Luego me fijo en la reacción de los demás. Y entonces me doy cuenta. Mientras que el resto de tíos se ponen a aplaudir, a reír y a gritar, sobretodo Diego y Rob, que son unos exagerados, Rubén coge aire, baja la cabeza y cierra los ojos con fuerza. Pocos segundos después, recupera la compostura y  se pone a hacer el burro como los demás.

Pero yo le he visto. Yo he visto la reacción que ha tenido al saber que Nora se está acostando con otro.

 —¿Pero es serio? —le pregunta Rubén, más interesado de lo normal.

—No, si ella me lo dejo muy claro. Solo quiere sexo conmigo. Pero bueno, a mí me parece genial. Creo que le gusta otro. —vuelve a reírse como un estúpido.

Al cabo de un rato, Rubén se levanta a buscar algo, aunque no sé a qué, y yo me levanto también con la excusa de ir al baño.

Paso por su lado y el me saca la lengua amigablemente. Me acerco a él un poco más y le susurro.

—Lo he visto. He visto cómo has reaccionado. Y hay dos opciones. O eres gay y te gusta Samuel. O sientes algo por Nora. Y yo apostaría por la segunda.

Tu tan de Ron y yo tan de Vodka. [Rubius]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora