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Ya era tarde y Beomgyu seguía durmiendo, estaba tan cansado que ni despertaba. Su compañero terminó de vestirse y se acercó al contrario para intentar despertarlo.

—Hey, despierta —Lo destapó entero y Beom intentaba taparse con cara de enfadado haciendo reír al mayor— basta, tenemos que irnos.

—Mhm... déjame.

El mayor tomó la mano del rubio y la acarició, se acercó a su rostro haciendo que Beomgyu se alejase rápidamente, este lo miró con el ceño fruncido.

—Estoy recién despertando, mi aliento es un asco

—Ahora te preocupas por eso. Ya, solo era para que despertaras, no te emociones —Comenzó a reír exageradamente—

El menor volteó sus ojos y se paró de la cama para darse una ducha de agua fría, odiaba eso, pero prefería estar limpio para cualquier cosa. Se metió a la ducha y cerró sus ojos levemente para relajarse, no habían sido los días más bonitos de este apocalipsis, pero con Yeonjun a su lado no era tan terrible que digamos, no se sentía solo ya que siempre tuvo su compañía.

Mientras pensaba muchas cosas se escuchó a lo lejos un disparo sacándolo de sus pensamientos. Asustado salió de la ducha poniéndose la toalla en su cintura, salió de la habitación para luego bajar rápido la escalera con un poco de cuidado ya que se podía resbalar.

—Yeonjun? —Al no obtener respuestas de su compañero el menor se comenzó a asustar— ¡Yeonjun!

Corrió hasta la cocina, comedor y living pero no había nadie, asustado salió hacia afuera ensuciandose los pies con barro, tampoco estaba su amigo, prácticamente lo busco por todos lados, pero nada. Sus ojos comenzaron a cristalizarse, mordió su labio inferior mientras pensaba en mil cosas ¿por qué? ¿qué fue eso?

—Yeonjun! —Gritó por última vez en un hilo de voz—

—Qué pasa?

Beomgyu se volteó rápidamente al escuchar la voz de su compañero, quien bajaba por una escalera ¿estaba en el techo? pero qué imbécil. Apenas bajó corrió hasta el menor mirándolo fijamente.

—Qué pasa, cariño? ¿Estás bien? —Preguntó preocupado para luego acercarse aún más al menor, le dió un cálido abrazo ya que sus ojos brillaban como si fuese a romper en llanto— ¿Viste algo en la ducha? Ya sé, una araña.

—No —Susurró el menor— escuché un disparo, te busque por todos lados y no te encontré, entonces me asusté.

El mayor se separó un poco para mirarlo fijamente sin dejar de abrazarlo.

—¿Eh? fui yo, estaba intentando romper una cosa, como no podía con las manos lo hice con el arma —El menor miró hacia el suelo un poco avergonzado— No te asustes ¿sí? estamos bien, anda a la ducha y termina de bañarte, tienes todas esas patas sucias.

El rubio asintió y caminó hasta la casa para entrar, subió las escaleras para seguir bañándose. Cuando terminó salió y busco su ropa.

Siempre usaban ropa oscura, botas no tan pesadas y pantalones anchos color negro, parecían unos verdaderos militares con esa ropa, pero para ellos se les hacía bastante cómoda. Por último se puso una polera también negra, era tan grande que hasta le tapaba el trasero. Luego se lavó los dientes rápidamente.

Bajó las escaleras y salió afuera para ver qué hacía Yeonjun, seguía en el techo. Beomgyu lo miró mientras se acercaba a la escalera para luego subirla.

—Qué haces aquí? —Preguntó el menor mientras se sentaba a su lado— ¿Estás viendo si hay gente?

—No, estoy viendo si podemos pasar por el puente que está allá —apuntó— para que vayamos a la ciudad.

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⏰ Última actualización: Nov 16, 2020 ⏰

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𝑍𝑜𝑚𝑏𝑖𝑒 𝑎𝑝𝑜𝑐𝑎𝑙𝑦𝑝𝑠𝑒. [𝑌𝑒𝑜𝑛𝑔𝑦𝑢]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora