3. Bᴇᴀᴛᴜs ɪʟʟᴇ.

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–¿Qué pensabas reformando mi habitación a  una sala de emergencias?

Fuera de la habitación, se escuchaba una voz grave y áspera. Al parecer, la protagonista se aguantó el sueño un poco más para poder enterarse de aquella conversación.

–No hace falta ponerse así, podrás dormir de mientras en el sofá. Tampoco está tan mal.

Esta voz ya le era más reconocida, pues habló su curandera, Claudette. Notaba como la anterior mencionada hablaba con cierto nerviosismo en su tono de voz. Tampoco entendía el motivo de aquella discusión, así que, algo inquieta, salió de la habitación, asomando primero su cabeza.

Ellie tenía el cabello despeinado y un moratón en la parte superior de la ceja, debido a la caída en la hoguera. Sus manos se apoyaban en el marco de la puerta, mientras observaba discutir a los presentes.

–¿El sofá?– el chico de la voz grave, era considerablemente alto en comparación con el resto. Su complexión era fuerte, pues iba en tirantes y su cuerpo era más visible. También tenía algún que otro moratón, probablemente de alguna pelea.

–Ni de coña, duerme tú en el sofá– aún pareciendo un hombre, su comportamiento se asemejaba al de un niño enfadado...

–Calma, solo es un par de noches hasta que reformemos el ático– aquí vino una nueva voz. Un chico joven alzó la palabra, este llevaba gafas y no tenía nada que ver con el anterior, pues llevaba una camisa de traje blanca, con una corbata a rayas y unos vaqueros oscuros, sujetos por un cinturón de hebilla– Además, no dejamos dormir a la...–

El chico paró de formular lo que iba a decir, pues se había dado cuenta de que la nueva chica estaba observando. De manera tímida, saludó con la mano, moviendo esta de un lado a otro un par de veces.

–Que os den– el chico enfadado decidió abandonar la sala cuando vio a Ellie. No había hecho nada para poder caer mal a nadie, pero notó una ligera presión en el pecho, ¿ya la había cagado?

–No te preocupes, David es así, te acostumbrarás a ello– El chico con gafas se acercó lentamente a la protagonista, poniéndole la mano en el hombro con suavidad.– Mi nombre es Dwight, puedes preguntarme cualquier duda, intentaré ayudarte siempre que pueda.–

Ellie se sentía muy confusa, así que no tuvo una reacción aparente.

–Oh...

Dwight parecía algo incómodo respecto hacia su comportamiento, así que decidió apartarse de su lado y volver de donde vino.

–Tengo que irme a seguir con la habitación de David, Félix me está esperando.

Con cierto nerviosismo, se fue por unas escaleras hacia el piso de arriba, dejando en la sala a Claudette, la cantante con pelo claro y una chica peculiar, que vestía con un gorro de lana y ropas ligeras. La última mencionada, no dejaba de analizar a la chica, su constante mirada pesaba en la protagonista.

–Yo soy Kate Denson, pero me puedes llamar Kate–, la voz de esta mujer era muy agradable, se notaba en su tono de voz que dominaba cada una de las palabras que decía, convirtiendo estas en melodía, incluso sin necesidad de cantar.– Si quieres, puedo llevarte por la cabaña para que conozcas al resto de supervivientes.

Las garras de la muerte. [Dead By Daylight]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora