Parte única

510 42 21
                                    

Se suponia que los bailes de graduación eran para divertirse, pasarla bien con todos los compañeros de clase y tener una noche inolvidable.

Es lo que todos quieren creen hacernos creer y tener altas espectativas.

Es lo que Ash queria creer sino fuera esta su peor noche que ha tenido en toda su corta vida quien hace unos momentos habia salido corriendo del salón de baile poco después de ser coronara como "La Reina del Baile". Podria parecer estupido ver a una adolescente llorando en los pasillos de la escuela solo por eso, si nos ponemos un minuto en su lugar y sentir el momento que estaba teniendo se puede enteder su situación.

Claro que muchas chicas matarian si quisieran por ser la reina de la noche, en tener toda la atención de una forma tan reluciente y soñado, y en terminar su noche bailando de aquel amor platonico del cual ha estado enamorada durante todo el año escolar.

Todo eso resulta ser un montón de tonterias que muchas ficciones dirigidas a adolescentes en estado hormonal les quieren hacer creer a largo plazo, a todos no les gusta ser el centro de atención y el estar rodeado de tantas miradas a la par esperando lo que puede pasar.

Ni tampoco sertirse obligados a pasar horas en una peluqueria con tanto fijador para mantener un peinado perfecto, el que te ponen incontables capas de maquillaje en la cara a cubir esas imperfecciones para lucir agradable bajo una buena iluminación ante la fotografía perfecta, mantener su único ojo abierno por algunos minutos para que te pasen mascaras de pestañas siendo una de las cosas más molestas y de las que se tienen que tener una paciencia de un sabio para soportarlo, el pasar los últimos meses del año consiguiendo el vestido perfecto al talle ideal mientras intenta mantener su peso, y como broche de oro usar zapatos de tacón alto ya que se supone que estás en camino de ser una mujer, por lo tanto habia que aprender a usar esos zapatos con tacón alto y fino acompañado de pequeñas piedras alrededor.

Y por supuesto casi se olvida de mencionar lo crucial, la pareja del baile del cual morías en las últimas semanas para hacerse aquella pregunta de que si iba a ir al baile de graduación como acompañante, o a lo segundo esperar a que el chico ideal fuese quien te pregunte si aceptaras ir y no un completo imbecil quien finge interes en ti.

Ahora imaginense lo que es estar rodeada de tantas personas, en lo sofocante que estar parada en un escenario para sentir como toda esa mierda de producción para lucir como una autentica reina de la noche se termina arruinando por un tacón roto en uno de sus zapatos y cayendo de cara mientras bajas por las escaleras, al levantarse lo primero que escuchas es unas cuantas risas, expresiones faciales mostrando sonrisas abiertas y varios dedos apuntando de frente.

Fue lo que habia pasado Ash, era tanta la verguenza que estaba pasando en ver como tantas especies tanto alienigenas de diversas especies como humanas le estaban riendo en su propia cara. Era tanta la tristeza e ira que se estaba acumulando en si misma que acabo en un desastre al atacar con sus poderes en algunas direcciones al azar provocando que algunos se asusten y se escondieran detrás de las mesas o algunos que otros compañeros.

Su acompañante y quien a su vez es su único amigo que tiene fue a seguir a la peli-rosada después de todo este incidente. Logro encontrarla sentada en una esquina de los pasillos y lo primero que notaba era aquel vestido rosa pastel rasgado en la parte de abajo, el par de zapatos tirados a un lado, y su peinado muy despeinado.

Estaba hecha un desastre.

—¿Ash?— la mencionada escucho la reconocible voz de aquel vetrexiano del cual le negaba verle al estar cubriendo su cara con sus brazos cruzados.

—¡Quiero estar sola!— Little Cato logro ver su rostro manchado del maquillaje y delineador corrido con sus propias lagrimas saliendo de su único ojo, y sus mejillas algo coloradas.

El menor en un intento de consuelo se sienta a su lado, acerco un poco su mano hacia el hombro de su acompañante, del cual de a poco estaba dejando de llorar al sentirlo.

—Mejor salgamos de aquí.

—¿Aún quieres acompañarme?— pregunto confundida.

—Vamos, ninguno de nosotros quiere quedarse.

—Solo quiero irme a mi casa, y que esto solo sea una pesadilla.

—Si, y luego ¿Comó se lo dirás a tu papá? ¿O incluso a tu hermano Fox? Creeran que fue mi culpa.

—Pero todo es mi culpa por ir a este baile en primer lugar.— siguio abrazandose a si misma manteniendo sus piernas juntas y un pequeño movimiento de su cabello suelo cubriendose a un más. —Supongo que pensé que tendría otras expectativas, que las cumpliria, y de que me iba a divertir pero nada de eso fue así hasta que se les ocurrieron votar por mi como "Reina del Baile" ¡Yo nunca quise eso!

—¿Y si solo salimos a caminar un rato?— aún el peli-naranja le mantenia su propuesta de salir —De todas formas no me gustaba mucho este baile por la música que ponian. — la chica lo vio ponerse de pie y parecia que le estaba convenciendo de levantarse, por lo que hizo caso y con ayuda del vetrexiano la ayudo.

Enseguida se fueron de aquel baile de graduación, y más para ser exactos de la escuela.

La noche se encontraba tranquila, despejada, y por supuesto algo fresca para el horario en el que se encontraban.

Ash tenia la suerte de que sino fuera por Little Cato ahora mismo estaria regresando a su casa y seguiria llorando, claro todavia se encontraba triste por todo lo que pasó, y quien sabe si los demás compañeros estarian hablando de su incidente al día de mañana diciendo cosas que se supone que no fueron así o exagerando detalles del mismo.

Ya saben, rumores.

Ahora por lo menos estaba un poco más tranquila pero ya no queria divertirse.

—Gracias por acompañarme. — dijo agradecida.

—No hay de que. — posteriormente paso su mano detrás de su cabeza mientras mantenia la caminata —¿Comó te sientes ahora?— después volvio a bajarla y meter sus manos en los bolsillos de su pantalón.

—Un poco menos agobiada.

—Por algo te convenci de irnos.

—Pudiste también haberte ido a tu casa.

—¿Para qué? ¿Para dejarte sola y triste?

—Tal vez ni siquiera asista a la entrega de diplomas, solo estarán hablando mal de mi como siempre lo han hecho.

—Ash, — la detuvo por un momento. — no les hagas caso a esos idiotas. Ni siquiera te conocen bien.

—Apuesto que solo me hicieron que me postulará como reina para que me vieran en ridiculo como lo vieron está noche ¡Incluyendote!

—¿Y entonces porque viniste de todos modos sino querias ir?

—Porque cuando mi papá y Fox se enteraron no dejaron de insistirme de que fuera, estuvieron el último par de semanas preparandome para esta noche, incluso le convencieron a Quinn de maquillarme y peinarme durante varias horas. Y ni hablar de la cantidad de fotos que me tomaron antes de irme.

—¿Y fue por eso que era demasiado para tí?— vio que Ash estaba queriendo volver a llorar.

—Lo que fue demasiado fue toda esa atención, me guardaba esos arrepentimientos hasta que solo explote de la irá con todas esas burlas. —cubria sus manos hacia sus brazos al sentir el fresco ambiente en que se encontraba.

—Aguarda. —se quito el saco de vestir que llevaba puesto para cubirla del frío.

—¿No tendrás frío?

—Nah, olvidas que estoy lleno de pelo. Soy vetrexiano Ash.

Ash sabia que está noche fue la peor de su vida y de por si no esperaba que lo fuera, pero ese rato que estaba pasando con Little Cato y lograr salir a pasear un rato poco a poco le recuperaba de esa tediosa fiesta de graduación. Tal vez no se salvará de los tantos chismes que tendría que lidiar al otro día, lo tenia a su lado hasta en las peores situaciones y ya no se sentiría tan sola como lo creia.

No quiso dejar que terminará sentada en un pasillo llorando el resto de la noche con su vestido de graduación.

🥀; Prom Dress || GravencatoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora