空っぽな心
Seis de la mañana, veinte de diciembre, apenas ocho grados, Seoul, Corea del sur. Aqui estaba, yo, HyeRin, sola. Camino a la universidad, mi mochila recargada de libros, llevaba dos trenzas desde raiz, unos jeans negros y un hoodie rojos, mis zapatillas, un brillo labial, mis documentos y ya; llevaba un cafe en mi mano mientras caminaba a la estación de trenes, la misma sensación vacia y de inseguridad estampada en todo mi ser, mas ahora que, mis hermanos viajaron por navidad a brazil, con sus novias, opte por quedarme aqui, con la maravillosa excusa de que tenia que estudiar. Hablemos de lo que sucedio aquélla vez, retrocedamos un año, porfavor.
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Al dia siguiente a la bonita graduacion, nos tocaba ir con mi familia a la junta con mis primos, Haruki estaba ahi, esperaba ver a Jungkook, pero le expliqué que el tenia que hacer algunas cosas por lo que no podia asistir, pasamos todo el dia alegre, poniendonos al dia de todo lo que habia pasado, cada cierto tiempo entraba a dejarle uno que otro mensajito a Jungkook, no tenia ningun mensaje de el, nada. Dos dias pasaron y no sabía absolutamente nada de el, como última opcion, fui hasta su casa, habia intentado conectarme con su familia y nada, nada de nada, al llegar ahi, apesar de tocar, gritar, golpear la puerta, nadie salio, quien salio fue la vecina, una señora de edad, quien amablemente me dijo que el mismo dia de la graduación todos se habian ido. Desde ahi, algo en mi corazón se quebro, me sentia vacia, triste, sola, millones de emociones, ni siquiera sabia que dia era, pasaba sentada en mi escritorio, escribiendole cartas a jungkook, ilogico, no tenia como entregarlas. Pasaron cuatro semanas, en mi total desesperación, le pedi a uno de mis hermanos que buscara el registro de salidas de su familia, y lo unico que pudo decirme es, " Hyerin, no esta en Corea..." cada dia una teoría distinta crecía en mi mente, un accidente, estaban escapando, una operación, quizo olvidarse de mi, no lo se, invente mil teorías de donde y que paso con el. La forma que extrañaba sus palabras, su voz, acariciarlo, extrañaba a Jeon Jungkook por completo, los días eran o demasiados rápidos o demasiado lentos para mi, perdí la noción del tiempo, y también perdí toda esa estabilidad que tenia. Cai en depresión, llegaron a internarme por semanas en un hospital psiquiátrico, recién en octubre pude salir, tengo una lista con mis antidepresivos, y asisto a terapia tres veces por mes, y por muy estupido que sea, sigo cada noche escribiendo cartas para Jungkook. En cada carta le digo mi aprecio a el, lo que hice, como estoy, que comí, que no comí, cosas que me gustaría decirle, todo con esperanza de volver a encontrar a mi primer amor. Asi pro segui hasta diciembre, estoy terminando primer año en la carrera de medicina, pero realmente no es lo mio, dejare esto a fin de mes, ya estoy decidida.
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Volviendo a donde estaba, voy camino a la universidad, esta vez a renunciar a medicina, a la carrera, y me matriculare en gastronomía. Mi corazón aun late cuando veo una pareja, recordando a mi amor, mi vida entera. Ese espacio que ganaste en mi corazón aun espera que vuelva, cada noche escribo cartas e imprimo una foto juntos, de las miles que teníamos.
Me baje en la estación central, camine unas cuadras hasta llegar a la universidad, luego casi dos horas de papeleo pude matricularme en gastronomía y pastelería, nuevo rumbo. Las clases comenzarían en dos semanas, por mi bien, alcanzaba a comprar los instrumentos de cocina. Mande un mensaje al grupo que tenia junto a mis dos hermanos, informando que ya estaba matriculada en gastronomía, luego de eso, tome un taxi hasta el centro de la ciudad, entre hasta una cafetería, "My boo" era el nombre de aquella, donde yo trabajaba actualmente. Deje mis cosas en el casillero, salude a Yoonbin en la caja registradora y fui hasta los camerinos, donde me puse mi uniforme, una falda negra, una camisa de color rosa claro junto a un delantal de cocina de color blanco, todo era colores pasteles en esta cafetería, y se destacaba por los diseños adorables en tortas, cafés, pasteles y galletitas, si, era mi especialidad. Me lave bien las manos y comencé a preparar algunos cafés con algunos rostros de animalitos, camine con una bandeja y dos cafés, una torta para dos personas, hasta la mesa numero ocho, donde amablemente y con una sonrisa les deje su pedido ahi, mientras anotaba lo demás que pedirían, un a de las chicas comenzó a hablar de algunos artistas, no preste atención suficiente, hasta que nombro a Jungkook. Mi corazón pareció dar un brinco y deje de escribir, me tomo unos segundos volver a la realidad, era imposible, habían muchísimos mas jungkook's en corea, si, si, si. O eso quería creer. El resto de mi turno me dedique a trabajar, pero a eso de las ocho, la cafetería se lleno, las mesas estaban llenas de estudiantes y adolescentes, al parecer alguien famoso vendría y ellas sabían, y disimuladamente lo esperaban, bueno, son inteligentes. Llego Namri, un chico unos años mayor que yo, y me ayudo con los pedidos de todas esas chicas, hasta que en un momento las puertas de vidrio se abrieron, dejando ver quien todas esperaban, Jeon Jungkook. Mis manos temblaron, se me corto la respiración, y parecía que todo estuviera en cámara lenta, tenia el cabello hasta las comisuras de los labios, estaba mas musculoso, y venia junto a otro chico, mas mayor, supongo que es su jefe, o algo así, se veia sano, alegre, bonito, y vivo. Y eso bastaba para mi. Me tomo unos segundos analizar la situación, Jungkook fue a comenzar su carrera como idol en estados unidos, y generalmente les hacen perder todo tipo de contacto y mantener todo en secreto para su futura reputación, si, demasiada información para mi cerebro, quería llorar, el tenerlo frente a mi, luego de tanto, mi niño. Me lave la cara, respire profundo, y con los nervios presentes camine para seguir con las ordenes, hasta que llegue a pedir la de el, comenzó a pedir lo que quería con la vista en el menu, su voz me hizo sentir maripositas nuevamente... mientras anotaba todo, mis manos temblaban un poco, dejo de decir su pedido y lo observe como para preguntar porque no seguía ordenando, entonces caí encuenta que estaba observandome. Con los labios semi abiertos, sorprendido, y con un brillito en los ojos, sonreí apenada, las ganas de abrazarlo me mataban por dentro, tome el pedido del que al parecer es su manager, y fui a prepararla con ayuda de los demás que habían llegado, se lo entregué con una sonrisita tímida, hice una reverencia amistosa y ahi termine mi turno, me quite el uniforme y volví a mi ropa, salí entre los clientes con los ojos llorosos, me faltaba el aire. Me senté en la parada de buses a unos metros de la cafetería, solte un suspiro seguido de algunas lagrimas, una sonrisa También escapo, después de todo, el estaba bien, y con eso me sentía feliz, luego me daría el tiempo de buscarlo en redes sociales, luego de los primeros meses jamas Volvi a buscarlo en internet, ahora lo haría. Antes de eso, tome un tiempo para mi, estaba feliz y triste por su vuelta a corea, camine hasta mi otro trabajo, un invernadero, donde solo tenia que regar las plantas, y echarles un polvo para matar los insectos, en una o dos horas estaba lista, ahora solo me quedaba ir a alimentar los animales de la señora Watson, me daba algunos billetes por alimentar a sus tres gatito, cuatro perros y cuatro pajaritos, solo porque ella esta de viaje.
Volví a casa mas cansada que nunca, tome una ducha, donde llore casi media hora, porque extrañe mucho a jungkook, si. Me puse pijama, y ordene la casa, ahi pude investigar a Jungkook, había debutado como solista, su canción principal hablaba sobre la juventud y ser libre, poético, me encantaba. Escuche la canción como mil veces con tal de escuchar su Angelical voz. A los minutos mas tardes me encontraba sirviendo la cena, moria de hambre, no tuve tiempo para almorzar. Luego de eso, por fin dormiría, hasta tarde, mañana no habían clases, pero eso fue interrumpido por el timbre insistente en mi puerta, me asuste porque jamas alguien tocaba asi, menos a las 12:40 de la noche, observé por el orificio adaptado para ver quien golpeaba pero no podía distinguir quien era, no me quedo mas opción que abrir, una vez lo hice, la persona ahí entro y cerro detrás de el, se quito en un segundo la mascarilla y la gorra, y me abrazo con fuerza, era Jungkook.
Mi estomago dio un vuelco, mi corazón se acelero y las maripositas volvieron, mis ojos llenos de lagrimas me permitieron abrazarlo tan fuerte como pude, pude sentir un sollozo de su parte, y me aferre a el tan fuerte como pude, un años lejos de el, quien me levanto mil veces, un año lejos de mi compañero y amor de mi vida, Jeon Jungkook denuevo estaba entre mis brazos, y no lo dejaría ir.🖤
PERDONEN SINCERAMENTE LA TARDANZA, NO TENGO TIEMPO PARA NADA, CUIDENSE MUCHO, JURO ACTUALIZAR MAS SEGUIDO, díganme si les gusta el rumbo de la historia. Los amo):