Érase una vez

20 1 0
                                    

La realidad es todo lo que existe, es todo lo que sea perceptible, accesible o entendible, en pocas palabras es lo verdadero, lo que se puede ver o sentir, algo que se pueda confirmar.
Aunque es cierto que existe una realidad general, una realidad impuesta para todos, lo cierto es que la realidad es distinta para cada individuo, cada uno tiene una forma distinta de vivir su vida y eso aplica directamente en su realidad.

La realidad, mi realidad, cambio drásticamente al perder a mi madre, todo mi mundo se volvió lúgubre y sin sentido alguno.
Mi mundo cambió, aún recuerdo las historias que me solía contar mi madre, esas historias llenas de fantasía y mundos fantásticos, llenos de magia y poderes diferentes, pero mi favorito y el que me atrapó desde la primera vez que lo escuché fue el de Shizen.

--- Mamá, ¿porque todos quieren ir a ese gremio?, ¿y porque nadie quiere a Kotaro?. ---

Ana, una niña de 6 años le pregunta a su madre, su madre voltea a verla con una amorosa sonrisa y le responde

--- Mmm... veamos, tal vez es porque Kotaro no sigue las reglas, el las crea, el forja su propio destino, ¿no crees que eso es algo maravilloso Ana?.---

Ana coloca su dedo índice en su mentón y se pone a pensar

--- ¡Si!, ¡es algo increíble!, pero... --- Deja de ver el libro para ver a su mamá con confusión.
--- ¿Porque si Kotaro es tan increíble nadie lo quiere?, el salvó a la princesa Lea y a Alaica, ¿entonces porque lo odian?. ---

Su mamá aleja la mirada del libro para ver a Ana con una mirada nostálgica.

--- Precisamente porque el lograba lo que nadie más podía. --- Deja de ver a Ana para ver el libro y centrarse en el dibujo de un hombre sosteniendo una piedra de tono blanquesino, pero con un ligero brillo, Ana imita su acción.

--- El era el único que se atrevía a hacer lo imposible, y hacerlo posible, el luchaba contra todo y todos por lograr sus metas y objetivos, el jamás se rendía, eso... ---

Ana ve como en el libro que su madre sostenía cae una gota, confusa voltea a verla y ve como lágrimas cristalinas salían de sus hermosos ojos .

--- Mamá?, ¿te encuentras mal?. --- Ana se levanta de su regazo y toma su rostro con ambas manos delicadamente. --- ¿Te duele tu pancita?, podemos dejar el cuento por hoy, no te preocupes, no llores mami ---

Ana limpia las lágrimas de su madre delicadamente, su mamá la abraza y sonríe. --- No te preocupes, me encuentro bien, ¿en que me quede?. --- le responde su madre con una mirada triste.

Ana la ve seriamente, pero lo deja pasar, se sienta de nuevo en sus piernas, su mamá pasa sus brazos debajo de sus brazos y de nuevo toma el libro.

--- Nos quedamos en que Kotaro dejo su aldea natal "Aki" al salvar a la princesa Lea y a su dama Laica. ¡Para así poder realizar la prueba y entrar al gremio Shizen!. --- Ana responde emocionada extendiendo sus brazos efusivamente hacia el cielo, su madre sonríe.

--- Cierto, sigamos --- Su madre le responde, devuelve su vista al libro y lo abre en la página que continuaba. --- Kotaro camino sin descanso cinco días y cinco noches, soportando intensas lluvias, calurosos días y frías noches, pero todo ese esfuerzo se vio recompensado al llegar al fin , a la capital de Senta. ---

Ana cierra los ojos con una sonrisa, solo veía oscuridad, pero oía la voz de su madre como si de un eco se tratará, cuando los abre una intensa luz ilumina todo su alrededor y una ráfaga de viento la envuelve, una vez todo termina ve a muchas personas con vestimentas extrañas  caminar a su alrededor sin prestarle atención, ve atentamente a un chico con una capa que cubría su cabeza y se acerca a el rápidamente.

Nuevo ElementoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora