" 01 - Allégro "

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2020

Estaba preparándome para la escuela junto con Mangel, el siempre estaba en mi casa pues esta casi siempre estaba sola pero hoy quería estar aquí antes de irme. Yo preparaba un pequeño desayuno mientras que Mangel se terminaba de arreglar y digo pequeño porque sabía que la señora Marisa nos daría aún más de comer para la escuela.

La señora Marisa y su familia me han dado más de lo que alguna vez podría pagarles, desde que mi madre se fue ella a cuidado de mi día con día y no permitió que me quitaran mi casa y todo lo que mi madre me había dejado.
Me perdí en mis pensamientos hasta que Mangel vino hacía mi diciéndome sobre el desayuno sobrecocido.

-¿Te perdiste otra vez? —Me decía cada que pasaba eso, que no era muy regular pero si de vez en cuándo.

-Estaba pensando en tu mamá y en la mía. ¿Crees que hubieran sido buenas amigas si se conocían antes de nosotros?

-Hablas de que si se hubieran conocido cómo nosotros? —Sacaba los platos y vasos para apresurarnos a comer mientras que yo servía.

-Mi mamá casi nunca me hablaba de sus amigas, de hecho creo que sólo tuvo una. Pero imagínate que hubieran sido amigas desde niñas y que sus hijos sean mejores amigos.

-Cuando tengas hijos podremos contarles esa historia de nosotros. —Me sonrió y me dio unas palmadas en la espalda. Mangel siempre me aliviaba con su presencia cuando yo parecía querer ahogarme de sólo pensar en ella.— Por cierto, esa ropa de dónde la sacaste? no la había visto.

-Me la compré con mi último sueldo en un bazar, decía algo cómo "chingue su madre todo a 10 varos." y pues encontré ropa bonita, aunque me preocupa no poderle darle dinero a tu mamá, después de la escuela estaré buscando trabajos.

-Te exiges más que yo y eso que vives solo. Te ayudaré a buscar algo, sólo porque también me lo están pidiendo.

-Tu familia me ha cuidado bastante tiempo, está bien que les regrese un poco. —Terminé mi desayuno y tomé mis cosas, se nos iría más el tiempo si nos quedabamos más tiempo hablando y Mangel me siguió, seguro que su madre nos regañaría muy fuerte si se entera que no llegamos a la primera hora del primer día de clases.

 —Terminé mi desayuno y tomé mis cosas, se nos iría más el tiempo si nos quedabamos más tiempo hablando y Mangel me siguió, seguro que su madre nos regañaría muy fuerte si se entera que no llegamos a la primera hora del primer día de clases

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-¿Por qué tenemos que ir a una escuela que nos queda super lejos? —Me dijo Mangel en un berrinche.

-Porqué no quedaste seleccionado en el examen y tuvieron que meterte a una escuela de paga y yo solicité beca para que no te quedarás solo. —Lo empujé y él me abrazo colgándose de mí.

-Eres muy buen amigo. —Me dijo simulando llorar y yo sólo me reí y busqué nuestra aula. Cuando por fin llegamos el olor a privilegios me entró completo a la nariz. Bueno, en realidad no, sólo que olía a perfumes caros y los Iphone parecía que los habían regalado. Inmediatamente me sentí un poco incómodo, sobretodo por los hombres más grandes y músculosos que yo, al lado de ellos seguro que era un sacadientes, me empecé a sentir mal.

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⏰ Última actualización: Jan 31, 2023 ⏰

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