La guerrera escarlata defensora de la princesa pecosa (Katsudeku)

Capítulo 6. Preocupación y golpes.

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YYY

Capítulo 6. Preocupación y golpes. 

Para Karako aquello fue tan devastador que lo primero que hizo apenas su hermano la dejó en su habitación fue sacarlo a empujones y también a Izumi. Se encerró delante de sus narices, lo último lo que escucharon fue la música súper fuerte que conociéndola, intentaba acallar su llanto desgarrador el cual aun a pesar de sus intentos, se alcanzaba a escuchar ligeramente.
Esto hizo hervir la sangre de Kacchan en las de un sentido, que apretó sus puños fuertemente. Por lo que, lo único que hizo fue lanzar su mochila a su habitación, sacar sus llaves y se fue, dejando a la peli verde delante de la puerta firmemente cerrada de su mejor amiga.

─ ¿Kacchan?

Fue lo que atinó a preguntar cuando lo vio irse de ahí, totalmente ofuscado.

─Sino te abre y no he regresado en una hora, dile a la vieja que te lleve a casa.

Eso obtuvo como respuesta y lo siguiente que supo, era que estaba ahí sola hasta que apareció Mitsuki-san por fin por la puerta con una pregunta obvia de “¿Qué pasó aquí?” Cuando escuchó los llantos de su hija y esta se negó a abrirles. Izumi no sabía que decirle a la mayor, no quería mentir pero tampoco decirle las cosas tal cual. La mayor no era tonta y si su hijo se fue furioso de ahí, al tiempo que Karako lloraba; entonces alguien había hecho sufrir a su pequeña y solamente conocía a un único hombre capaz de desarmarla de esa manera.
Por eso, le ofreció de cenar a Izumi o algún té y esta aceptó aun preocupada. Se fueron las dos a la cocina a esperar que el primogénito no hubiera hecho una locura muy grande.

YYY

─ ¡¡Si le vuelves a dirigir la palabra a mi hermana, te matare!!

Fue lo que le gritaba Bakugo a Kirishima quien estaba sometido en el piso por su amigo rubio que no dejaba de golpearlo con mucha furia. Lo encontró en la calle, venia de ir a dejar a Mina a su casa, cuando de la nada apareció Katsuki; lo último que recordaba antes de tenerlo encima fue que le dijo un “¡Hola bro!”, que fue respondido con un golpe que lo mandó de culo en el suelo donde el rubio cenizo no le había dado tregua.

─ ¡Yo no le hice nada a Blasty, bro! ¡Sería incapaz!

─ ¡No le vuelvas a decir así, para ti ella es Karako! ¡Tienes prohibido entrar a mi puta casa hasta nuevo aviso! Estúpido con mal gusto.

Fue lo último que le dijo, antes de irse de ahí dejando a Kirishima herido y confundido en el piso.

YYY

─ ¡Kacchan por fin volviste!

Fue lo siguiente que supo Katsuki cuando la pecosa, usualmente tímida fue corriendo a abrazarlo; tomándolo desprevenido.

─ Estaba tan preocupada… ¡¿Qué te pasó?!

Ella le tomó la mano viendo su muñeca llena de sangre, al igual que su uniforme.

─ ¿Por qué diablos sigues en mi casa?

─ Bueno tú mamá llamó a la mía porque me invitó a quedarme a cenar con ustedes.

Dijo soltándolo, si bien él no había sido tan brusco como en otras ocasiones se notaba cansado y no solamente físicamente era como si estuviese deprimido, por algo. Él notó que la había cagado, de nuevo.

─ Bien que al menos la vieja bruja te dio de cenar, pero dime ¿la mocosa odiosa ya salió?

Izumi volvió a lucir muy mal. Se le notaba muy descompuesta.

─ No, Blasty no ha querido salir y no ha abierto la puerta.

El rubio cenizo podía comprender a Izumi, ellas dos estaban juntas desde mocosas y se querían muchísimo una a la otra.

─Hagamos esto, si para mañana sigue sin salir, iré por ti a tu casa y me ayudaras con unas cosas ¿entendido?

Entonces la pecosita, quien estaba confundida aun por todo asintió fuertemente.

─ Está bien, Kacchan.

─Bien, si terminó yendo, te llamare una hora antes de ir por ti, para darte tiempo ¡pero si cuando voy por ti no estas lista me largare sin ti! ¿Te quedó claro?

Ella solamente asintió de nuevo muy enérgica.

─ ¡Si, Kacchan!

─Bien, entonces vamos que ya es jodidamente tarde; iré a dejarte a tu casa.

─N-no ha-hace falta…

─ ¡más te vale no replicar o no volveré a ofrecerme a estas mierdas de nuevo! Vamos que no tengo tu jodido tiempo, maldición.

Ella tal vez si fuera otra chica no se hubiera ilusionado como una boba pero era una niña enamorada, que comprendió que el chico que le gustaba era tosco y muy cruel si se lo proponía; pero era buen chico a su modo y siempre estaba para las personas que quería, ella incluida.
Aun así, lo único que quería en ese momento era que su mejor amiga estuviera mejor y fuese la poderosa Blasty de nuevo. Escucharla llorar la había dejado muy mal.

YYY

¿A dónde irán Izumi y Katsuki? Lo comenzaremos a saber en el próximo capítulo 7. Vamos a preparar todo