Nuestra Historia [UzuZen] [ABANDONADO]

capítulo 14

Agatsuma Zenitsu.

El veterinario me ha dicho que el gorrión por pura suerte está vivo, está bien alimentado lo cual le pareció extraño en un principio hasta que recordé que había cuervos protegiéndolo y no dudo que lo hayan alimentado el tiempo que estuvo herido, al parecer su ala quedó muy mal y nunca más podrá volar, eso es triste.

—Zenitsu, ¿piensas hacerte cargo de ese gorrión? —pregunta mi abuelo.

—N-No sé, pensaba cuidarlo hasta que mejorara y liberarlo pero...

—Eso no será posible.

Me levanto de la silla para ir al baño pero apenas han sido un par de pasos cuando el gorrión se vuelve loco piando y trata de volar hacia mí, el abuelo lo sujeta pero picotea su mano hasta que lo devuelve sobre la mesa, regreso tomando al gorrión, acaricio su pequeña cabeza con mi dedo y lo miro confundido.

—¿Qué pasa?

—Tú lo salvaste, cree que lo abandonarás.

—Pero no creo poder cuidar de él, apenas sé cuidar de mí.

—Bueno como has visto tampoco confía en mí.

—No puedo llevarlo conmigo a todos lados, tendrá que acostumbrarse a no verme mientras estoy fuera del departamento.

—Hagamos que lo entienda, déjalo conmigo un momento y ve al baño.

El abuelo toma un pan de la mesa y comienza a deshacerlo poco a poco para tener la atención del gorrión que pronto pareció querer ir hacia la comida pero no quiere dejarme estando en un pequeño debate con sus desiciones, lo dejo en la mesa cerca de las migajas de pan pero no se mueve para avanzar y solo me obseva.

—Tienes que confiar en él, no te hará daño, nadie más te hará daño.

Mira al abuelo que todavía intenta atraerlo con el rastro de migajas hasta su manos, el gorrión por fin parece entenderlo y se acerca lentamente con saltitos hasta estar en la mano del abuelo, ambos sonreímos al instante victoriosos de que el ave aprendió algo tan pronto.

—¿No crees que deberíamos ponerle un nombre?

—¿Entonces nos quedaremos con él? Supongo que no podemos dejarlo en la calle a su suerte —me cruzo de brazos y miro el ave que también está viéndome. "Chu" es lo que dice cuando me ve como si estuviera feliz y también da saltos.

—Chu... Solo llamemoslo Chu.

—Chuntaro.

—Bueno ahora es tuyo así que puedes llamarlo como quieras. Chuntaro es un lindo nombre.

—Si... —muerdo mi lengua internamente, el nombre no es algo que pensé simplemente salió de mi boca, ese Zenitsu pareció haberlo dicho —me iré a duchar.

—No tardes, te prepararé algo de té para que te relajes y puedas dormir pronto.

—Si, gracias —de nuevo me dirijo hacia el baño, el gorrión se mantiene en silencio pero apenas cruzo la puerta de nuevo lo escucho piar desesperado.

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—Así que ahora eres dueño de un gorrión, es genial, Zenitsu-san —dice Nezuko-chan acariciando delicadamente el ave que tiene entre sus manos.