¿El incidente? La corrompió
¿Las mentiras? Le hicieron actuar
¿Los secretos? Le pusieron un blanco
¿Su familia? La odia
¿Su única amiga? La traicionó
¿Sus pensamientos? Sombríos
¿Su corazón? Una piedra
¿La verdad?.... La ignora
-¡¡Vamonos Cassandra!!- llamó una familiar voz- Si no bajas ahora ta vas a quedar-
-Ya voy mamá- respondió una jóven de corto cabello café y hermosos ojos del mismo color.
Cassandra terminó de cerrar su mochila y se la hechó al hombro.
-Rápido- le apresuró con una cálida sonrisa aquella persona a la que llamó madre.
La joven bajó las gradas a paso veloz y de un salto calló al piso de la primera planta. Empezó a caminar hacia la puerta tranquilamente; ya se esperaba lo que pasaría apenas saliera del umbral.
-¡Bu!- le intentó asustar por detrás una voz amable una vez Cassandra salio de la casa.
-Hola Lilith- respondió sin inmutarse (ya se lo esperaba) y se dió la vuelta para mirar a su prima- Ya sabes que nunca me has podido asustar
-Al menos podías fingir que te asusté Cass- replicó haciendo un puchero
-Nop- rió levemente la de ojos cafés.
Lilith se limitó a resoplar con un destello de diversión en sus peculiares ojos grises y le entregó un arco junto a varias flechas
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-Gracias- sonrió Cassandra- ¿Segura que no quieres venir? Nos divertiremos más si vienes- intentó persuadirle a que les acompañara en el viaje.
-Lo siento pero tengo que estudiar. Ya sabes como es la U- suspiró desanimada, acomodándose un mechón de pelo negro detrás de la oreja y le entregó unos boletos- Tómen, antes de que los olviden
-Gracias Lilith, por todo- agradeció Cassandra sonriente y acto seguido le abrazó como si de un peluche se tratara
-Gana la competencia y así me lo agradeceras- rió su prima levemente y devolviendo el abrazo
-No quiero interrumpir pero es hora de irse- habló algo apenada la madre de Cassandra
-Claro- sonrió la joven de cabello café mientras Lilith se despedía de su tía
