Teen Wolves [En Edición]

Kiss me senseless

—Me voy un par de horas y cuando regreso, está todo hecho un caos. ¡Un par de horas, Salvatore!

Fue la entrada de Jasper Hale-Stilinski a su casa unas horas después del incidente con Damon. Jas canceló su cita en Boston para poder quedarse a meter algo de sentido en la dura cabeza de los hermanos Salvatore. Tenía los brazos cruzados, su ceño fruncido se veía absolutamente adorable en su rostro, por lo que Stefan no pudo evitar enamorarse al verlo enojado.

—Te ves precioso cuando te enojas —le dijo, causando un sonrojo sobre la cara enojada de Jasper.

—Esos trucos no van a funcionar conmigo hoy, Steven —Stefan ahogó un gruñido de exasperación al oír el apodo que Jasper le ponía cada vez que se enojaba—. No vas a poder salir de este lío endulzándome con palabras bonitas.

—Valió la pena intentarlo —se encogió de hombros con una sonrisita de suficiencia, porque sabía lo mucho que sus palabras afectaban a su pareja, aunque él no quisiera admitirlo.

—Escucha, amor, esta vez estoy del lado de Damon. Te portaste como un imbécil —le regañó, a lo que Stefan contestó con un suspiro.

—Lo sé.

—¿Ya te disculpaste?

—Por supuesto que sí —respondió rápidamente.

—Pero no hablaste con él —ahí Stefan sí se quedó callado, porque él y Damon no hicieron más que discutir en lugar de dialogar y entenderse—. Dios... ustedes los Salvatore me van a dar un aneurisma.

—Intenté hacerlo, de verdad, pero Damon me mandó a la mierda.

—Y con mucha razón.

—Jas, ¿cómo arreglo esto? No sé qué decirle.

—Primero que nada —Jas le miró a los ojos—. Es tu hermano, y debes comenzar a confiar más en él. Es injusto que sigas escudándote tras la excusa de que no lo conoces lo suficiente. Él te ha demostrado incontables veces que ha cambiado. Se unió a la manada hace más de cien años, por el amor de Dios.

Stefan bajó la mirada, porque el híbrido tenía razón. Realmente no tenía excusa alguna que justificara su desconfianza hacia su hermano.

—Nos protegió y defendió cuando lo necesitábamos, puso su vida en riesgo por nosotros. Cuido a mi sobrino desde que era un niño, y cuando murió, prácticamente se deprimió. Stefan... tu hermano es una persona completamente distinta. No entiendo cómo no puedes confiar en él, cuando yo le confiaría mi vida sin dudarlo.

El vampiro alzó la mirada. Jasper le acarició el rostro con ternura porque también entendía que Stefan había sufrido mucho a causa de Damon, pero seguía sin ser excusa para su comportamiento. Esperó pacientemente a que el rubio reuniera sus pensamientos para hablar.

—Por supuesto que le confiaría mi vida. Y quiero confiar en él, de verdad que sí... pero no es fácil hacerlo cuando he visto la forma en la que funciona su mente a lo largo de los siglos. Él es tan volátil e impredecible, Jas... sólo quiero proteger a mi niño —susurró. Jasper no pudo evitar abrazarlo con fuerza.

—Oh, Stefan, lo entiendo, por supuesto que lo entiendo. Pero tendrías que ver la forma en la que lo mira —se separó de él para enfocarse en sus ojos—. Es la misma forma en la que tú me miras. O en la que yo te miro —y le besó despacito. Stefan soltó un suspiro de absoluto placer.

Jasper se separó de él cuando de repente el vampiro comenzó a reírse de la nada en medio del beso. Le dio una mirada confundida.

—Es que... el pobre idiota no ha tenido sexo en años. No desde que conoció a Cas.