22. Aceptación errónea

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Hoseok supo que habían pasado cuatro días luego de aquella mañana donde fue violado por la persona que le juraba amor eterno, aquella persona que él amaba pero que le estaba haciendo demasiado daño. Estaba desconectado de todo objeto tecnológico por lo que solo podía basarse en un calendario que tenía en su cocina.

Estaba marcando los días con un lápiz cuando Suk se iba a trabajar. Solo sabía qué hora era cuando el mayor se iba y luego volvía a casa. Por suerte no le había obligado a tener sexo de nuevo ni le había vuelto a pegar. Siempre pasaba de buen humor y él era el que cocinaba por la mañana y por la noche.

Ahora Hoseok estaba en la sala pensando sobre el haber sido aceptado para ir a
Estados Unidos. Cada vez que lo pensaba quería llorar porque esa era su gran oportunidad para cumplir sus sueños y metas. Y no crean que Hoseok no había querido salir de ese departamento, lo había intentado cuando ya pudo pararse de la cama y JongSuk no estaba, pero la puerta estaba cerrada por fuera, con un candado.

Hoseok ya cansado va al baño para lavar su cara y suspira al ver su reflejo en el gran espejo, tiene su ojo derecho rodeado de un morado oscuro casi siendo negro en algunas partes, sus mejillas pintadas de un verde oscuro, sus labios partidos y con sangre seca en aquellos cortes profundos y tenía una ceja partida.

Se veía muy lamentable, los golpes habían sido muy fuertes y su delicada piel no había resistido tantos golpes en la misma zona. Pero su cuerpo también estaba en las mismas condiciones, llenos de moretones. Lava su rostro con cuidado y cuando sale del baño se asusta al ver a JongSuk sentado en su cama.

-He salido más temprano hoy, cariño- Hoseok le da una pequeña sonrisa porque aprendió que si no lo hacía cada vez que llegaba su humor cambiaba y se ponía agresivo.

-¿Qué tal te fue?- se acercó y le dio un corto beso en sus labios lo que puso más feliz al mayor.

-Genial, si me dan un ascenso más, tendremos que irnos a Ilsan- eso a Hoseok le preocupó mucho. Si se iba poca probabilidad tenía de terminar con todo eso.

-Eso es bueno. Me alegro demasiado- sumando una sonrisa y supo que fue correcto hacerlo porque le hizo sentarse en su regazo.

-Hoy saldremos a comer a nuestro restaurante para celebrarlo. Solo que debes ponerte algo en tu hermosa cara, tus moretones son muy notorios- JongSuk lleva su mano a la mejilla de Hoseok y con su dedo índice la empieza a acariciar con suavidad. -Lo siento mucho por esto, bebé. Pero debía hacerlo para que aprendieras a reconocer tu lugar. No puedes ser cariñoso con nadie más porque ya sabes cuales son las consecuencias.

Hoseok asiente y envuelve sus brazos alrededor de su cuello para un dulce abrazo. Hoseok suelta un suspiro y hunde su cara en el pecho de su novio mientras cierra los ojos. Se sentía bien estar así, se sentía querido y amado aunque no fuera lo correcto.

-Te amo, bebé. No tienes idea de cuánto te amo- el mayor le envuelve en sus brazos y le da un beso en su cabeza.

-También te amo- <<Te amo aunque me hagas daño. Tal vez la única manera que esté bien es esta, si me quedo a tu lado y me olvido del resto>>.

(...)

Hoseok y JongSuk se sentaron en una mesa un poco alejada de las personas, Hoseok llevaba una mascarilla y gafas de sol. Su ropa era floja porque Suk así lo quiso y no quería que cancelara la salida.

Cuando llegó la comida fue el único momento que se deshizo de mascarilla. La comida estuvo deliciosa y ambos conversaron sobre el poco tiempo que faltaba para que el mayor fuera ascendido y así tuvieran que viajar.

-¿Puedo ir al baño?- esperó una respuesta y luego se levantó de la mesa. Estaba haciendo todo lo que le había pedido antes de salir. Que le consultara todo lo que quisiera hacer porque debía obtener su permiso. Se iba a negar, pero realmente quería salir de ese departamento y tener aire limpio.

Cuando entró al baño soltó un suspiro porque estaba un poco cansado. No había momento en que sus pensamientos comenzaran a atacar. Pensamientos sobre conformarse con la vida que JongSuk le estaba ofreciendo o luchar un poco y zafarse del miedo sin importarle su amor.

Se sacó sus gafas y las dejó sobre la cerámica y se vio en el gran espejo. Pero si intentaba luchar quién iba a ayudarle y darle una mano. Sus padres le odiarían por haberse metido con un hombre y haber dejado la universidad si llegaba a Gwangju pidiendo posada nuevamente. Sus amigos ahora le estarían odiando por haberlos metido en problemas y haber destruido el lugar que consideraban un hogar.

Y aunque Taehyung le había dicho todas esas cosas hermosas dudaba que siguiera interesado. Estaba seguro que JongSuk le había hecho algo y tampoco quería meterlo en problemas. No quería causarle a él y a los otros más daño. Y Lilian ni entraba en la lista. Ella podría salir muy afectada por los celos de Suk.

-Espero que el otro tipo haya quedado peor- Hoseok da un brinco y mira por el reflejo del espejo al hombre que habló. -Lo siento, no quise asustarte.

Hoseok toma sus lentes y se los pone. -No fue nada, no te preocupes- Hoseok le sonríe y para aparentar comienza a lavarse las manos.

-Entonces... el otro quedó peor, ¿cierto?- vuelve a preguntar.

-No hubo nadie más- Hoseok le sonríe y salta en su lugar cuando la puerta se abre con brusquedad.

-¿Qué estás haciendo?- borra su sonrisa y con rapidez cierra la llave de agua y va donde su novio.

-Estaba lavando mis manos. Volvamos a la mesa- lo dice con miedo porque la mirada del mayor era terrorífica y estaba entrando en pánico. Agradeció que le hiciera caso y ambos salieron del baño y regresaron a su mesa.

-¿Por qué tardaste tanto? ¿Conocías al tipo que estaba allí?- su voz daba miedo, todo de él en ese momento le estaba dando mucho miedo.

-Porque no me sentía bien. Y no lo conozco. Mis amistades eran muy pocas y ahora ya no queda nada de ellas- su mirada está fija en el postre porque piensa que si le mira a los ojos se iba a poner a llorar.

-Me alegro. No debes tener a nadie más que a mí. A los demás no les importas, eres poca cosa para ellos. Pero para mí eres como un diamante, yo soy el único que te va a amar, Hoseok. ¿Lo entiendes, cierto?

-Sí- como pudo sonrió y luego empezó a comer. Realmente le daba mucho miedo.

Una mala decisión [VHOPE/VOPE]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora