Un leve rayo de luz iluminaba un pequeño trozo del cuarto en donde se encontraba acostado cierto país tricolor.
Se encontraba abrazando inconscientemente una almohada mientras que cierta cantidad de saliva salía de su boca hasta topar con su almohada o con su mejilla.
Poco a poco fue despertando cuando sintió que el rayo de luz topó con su cara, haciendo que le molestara un poco; se fue levantando levemente de la cama, entre cerrando sus ojos para poder ver con claridad la hora que marcaba el reloj que se encontraba en su pared.
Se alteró mucho al poder divisar bien la hora, eran las 9:35am.
Se había acordado que tendría una reunión con Estados Unidos, ya que quería hablar sobre cosas de la guerra y le daría la posición de donde debería de ponerse su escuadrón aéreo para poder atacar de una buena vez a Japón y así darle ventaja a Estados Unidos para que por fin puedan ganar esta maldita guerra.Se levantó rápidamente de la cama y se dirigió a unos de los baños que estaba más cerca de su habitación, ya que la gran mansión soviética tenía demasiadas habitaciones y baños.
Al entrar simplemente cerró la puerta y empezó a desvestirse de una forma algo apresurada; abrió una de las llaves para que después empezará a salir agua, empezando a llenar lentamente la tina, algo que sin duda no era conveniente para el mexicano, ya que andaba con prisa.Al llenarse la mayoría de la bañera con agua tibia, el mexicano empezó por meter un pie a la tina para comprobar si el agua era de su agrado.
Después pasó por meter todo el cuerpo y así empezar a sentir esa sensación tan relajante que siempre le brindaba el agua, aunque el mismo sabía que le quedaba poco tiempo, así que lo más rápido que pudo empezó a limpiar todo su cuerpo.
Al terminar de limpiarse salió de la tina y tomó una toalla para así empezar a secar su cuerpo; al terminar de secarse enrollo la toalla que había tomado antes para enrollarsela en la cintura y así poder salir aunque sea algo cubrido para ir a de vuelta a su hábitacion.Cuando salió del baño se encontró a un pequeño niño que iba caminando por el pasillo, era nada más ni nada menos que el lindo y pequeño rusia.
›Hola pequeño.
Dijo con cierta sonrisa en su rostro, ya que de cierta forma se alegraba de encontrarselo.
›Hola México.
›Pequeño, enserio me encantaría seguir hablando aquí contigo, pero necesito apresurarme ya que tengo una reunión importante.
›Esta bien señor México.
Dijo con una linda sonrisa el menor, a la cuál el mexicano la respondió con otra sonrisa, para después seguir caminando en dirreción a su cuarto.
Después de unos minutos salió de su cuarto vestido muy formal, ya que sabía que sería algo importante.
Le esperaba un gran y tedioso día._______________________________________
Gente, lamento mucho demorarme tanto en hacer un simple capítulo.
Les juro que estaré más activa en está historia y trataré de actualizar a menudo.
Pronto haré una nueva portada que supongo que estará más bonita que la que está ahora.
Muchas gracias por leer, espero que lo hayan disfrutado.-Con amor la escritora de éste libro. ✨