Kuon estaba demasiado nervioso por volver a su país aún si es que no hacía mucho que estuvo ahí. Era razonable, iba a verla a ella y a sus padres, además de que su audición estaba cerca. No obstante, aunque no quería aceptarlo, en el fondo estaba inquieto por la advertencia de su rival.
«Unos tipos raros le preguntaron cosas de Kyoko a compañeros de nuestra secundaria...»
Le había dicho a Kuon, quien se quedó pensativo por un momento hasta que simplemente sonrió y bufó.
«Es una estrella, seguramente eran periodistas»
Fue lo que Kuon respondió.
«¡¿No lo entiendes, gigantón con cerebro de nuez?!»
Sho frustrado se atrevió a sacudirlo.
«¡Ellos preguntaron por ella y no por mí cuando todavía ni había aparecido en Dark Moon, y estoy seguro que tiene que ver contigo porque eran extranjeros, así que explícamelo!»
Kuon sintió un escalofrío, pero actuó como si nada.
«¿Hay algo más que hayas descubierto?»
«Ellos se fueron ni bien tú entraste, justo después de hacer preguntas sobre Kyoko a mis padres...»
Kuon suspiró pero lo miró como si estuviera tranquilo.
«Ella está conmigo»
Sentenció y se fue, dejándole un claro mensaje a Sho: la seguridad de Kyoko no era de su incumbencia.
Kuon no quería creer que todo este tiempo jamás pudo escapar de su pasado, mucho menos que este estaba detrás de su adoración. Por eso intentaba no pensar demasiado en eso y realmente solo intentaba concentrarse en la audición y en sorprender a Kyoko más tarde con una cita improvisada y tal vez algunas cuantas explicaciones sinceras sobre él, quería llevarla a pasear por los lugares más importantes para él y quizás entrar clandestinamente a su secundaria y mostrarle sus trofeos como adolescente presumido que intenta impresionar a su chica.
Todo eso iba a ser de mucha ayuda para conseguir el impulso para ir a su audición y tomar el papel, ya que eso ya lo tenía decidido.
Llegó de noche a Los Ángeles y de inmediato se encaminó a su casa, solo que por un camino distinto. Observó con binoculares su propio hogar, espiando a lo lejos, desde un monte en medio del bosque que separaba aquellos condominios exclusivos de todo lo demás. Y fue entonces, cuando vio a Kyoko y a su madre salir de la mansión, que reconoció que algo estaba sucediendo... Las estaban siguiendo.
A partir de ese momento comenzó la noche de pesadilla para Kuon. Él siguió a lo lejos a las mujeres de su vida, identificando de a pocos ciertos rostros que le causaban repulsión y vigilando desde sombras todos los movimientos de estos. Así supo que no fueron mandados por Cedric, pero que estaban más que dispuestos de venderle la información que habían obtenido. Kuon necesitó de mucho autocontrol para no atacarlos de inmediato, porque lo importante ahora era analizar la situación para poder manejarla adecuadamente. No tenía paciencia, pero aguantó lo más que pudo.
No se calmó cuando, luego de horas, cuando su madre y Kyoko habían acabado de volver, se encontró con que esas personas seguían a los alrededores, vigilando a Kyoko. Por eso, con el dolor de su corazón, le canceló a Kyoko la cita que supuestamente iba a ser virtual. Y hasta ese momento, no pensó que la noche podría ser peor. Ya para cuando estaba por meterse a dormir a la casa del árbol que hizo a los catorce, casi enloquece al notar que Kyoko se había ido al parque cuando todavía eran las cuatro de la mañana; mucho más considerando que esos imbéciles estaban ebrios y drogados tonteando por ahí. Sus miedos pudieron haberse cumplido, estuvo demasiado cerca.
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Skip Beat: Luces, cámara y... ¡Amor!
FanfictionA Kyoko se le va a presentar un desafío, uno tremendo: ¡Al fin va a ser la estrella! ¡Se acabó su racha de villana! ¡Al fin dejó los antagónicos! Pero no será cualquier serie, esta serie será una nueva adaptación de uno de los mejores doramas de tod...