[Hamilton] Zurcidura; español

capítulo catorce.

Este libro no es de mi autoria, es de Pale_Cas.
espero lo disfruten. uwu

Thomas entro a su dormitorio, suspirando mientras cerraba la puerta detrás de él. Al principio todo lo que pudo oír fue silencio, pero después de unos momentos el sonido de sollozos ahogados llego a sus oídos.

"James." Thomas dijo sin aliento con el pánico llegando a su estómago. Sus pies parecían andar más rápidos que su mente mientras corría a su habitación, casi derribando la puerta por la fuerza con la que la empujo.

James estaba echo una bolita, las mantas de la cama de Thomas estaban arrugadas sobre su pecho, tenía el ceño fruncido, sus ojos estaban cerrados con fuerza. "Por favor... por favor no me dañes..." dijo, las lágrimas aun fluyendo de sus ojos. "¡Para!"

La preocupación se acumuló en los ojos de Thomas al notar que James solo estaba teniendo una pesadilla. "James, amor." Thomas dijo suavemente acercándose a la cama, tirando al pequeño James sollozante a su regazo. "Jemmy, despierta." Thomas sacudió ligeramente al hombre en sus brazos, esperando que eso lo despertara.

"¡Por favor no me pegues de nuevo!" James chilló, acurrucándose en el regazo de Thomas. "¡No!"

"¡James!" gritó Thomas, sintiendo que las lágrimas se acumulaban en sus ojos, James nunca mereció pasar por eso.

Los ojos de James se abrieron de golpe. El corazón de Thomas se rompió cuando vio los hermosos ojos oscuros de James, llenos de miedo y confusión. Le tomo unos segundos, pero finalmente James se dio cuenta donde estaba, en la seguridad de los brazos de Thomas.

"Tommy." Dijo James antes de sollozar en el pecho de Thomas.

"Lo sé cariño, lo sé." Dijo Thomas, haciendo círculos en la espalda de James mientras este lloraba. "Déjalo salir."

Thomas perdió la noción del tiempo mientras sostenía a James cerca, el menor todavía lloraba con el corazón. Cada segundo que pasaba hacia que el peso en su estómago creciera.

"Perdón." Dijo James una vez se recompuso, secándose las lágrimas con las mangas de su camisa.

"No te necesitas disculpar Jem, esta bien. Odio preguntar pero, ¿te gustaría hablar de esto?" pregunto Thomas, mirando a James. "No lo tienes que hacer si no quieres, claro. Nunca te obligaría a hacer algo que te incomodara."

"No, estoy de acuerdo con hablar de eso. Solo... ¿Thomas?" James levanto la vista hacia Thomas con nerviosismo.

Thomas levanto una ceja. "¿Sí?"

"¿Te puedo pedir prestado uno de tus abrigos? Tengo frío." Thomas sonrió, levanto suavemente a James y colocándolo en la cama antes de dirigirse a su armario, sacando un abrigo color celeste, uno de sus favoritos. Se lo entrego a James, esperando a que se lo pusiera antes de meterse en la cama junto a él.

James sonrió, tirando de las mangas para que sus manos no estuvieran cubiertas, ya que eran demasiado largas para su brazo. Dejo que Thomas lo acercara más, con la cabeza apoyada en el pecho del hombre más grande mientras yacían en la cama de este.

"Bueno, se trataba de Reynolds." La cara de James decayó. "Él... Él me pego varias veces, lu-luego me pateo, muchas veces. Estaba aterrorizado, pidiéndole que no me pegara. Estaba enojado y no sabía como hacerlo parar." James no noto que estaba temblando hasta que Thomas lo agarro con más firmeza. "Entonces te escuche, y él desapareció, y desperté."

"¿James?" Thomas miro a James, quien lo miró con los ojos entrecerrados.

"¿Sí?"

"Reynolds no volverá a dañarte, no mientras yo este con vida." James sonrió, restregando su cara en el pecho de Thomas.

"Lo sé Tommy."