RED MOON

CAPÍTULO 11

POV JOY

No puedo creer que no me hayan aceptado. La GUMMY ENTERTAINMENT se pierde de un gran talento. No lo vale. Encima escogen a una cualquiera. Choi Seungyeon me prometió que sería la siguiente trainee y me mintió. En parte es bueno que no haya ingresado, la GUMMY se va a ir en picada cuando MINT se vaya al ejército, y volverá hacer la pequeña empresa que era antes. 

- ¡Qué rabia!- rompí mi espejo y se hizo añicos- Lo que me faltaba, más mala suerte para mí.

- Joy, ¿todo bien por allí?- mi tía se había percatado del ruido.

- Si, todo perfecto por aquí- si esa tal Camelia no se hubiera interpuesto en mi camino, estaría muchísimo mejor.

Toda mi vida, la había dedicado al canto. Soñaba con ser una de las más famosas en ese rubro. No es la primera vez que audiciono, lo que me da cólera es haber caído en el juego de Seungyeon. Ella me aseguró que con mi talento era imposible que Yang Taeho no me eligiera, sin embargo ese viejo solo se fija en que tan bonita eres. Si no le gustaba mi rostro, podía haber optado por operarme allí en Corea y listo. 

- Ya no sé qué hacer, he ido a todas las compañías. Y cada una de ellas, me han rechazado. 

- Pues sigue intentando.

- ¿Quién está allí?- había oído una voz, no obstante nadie se encontraba.

- Tan fácil te rindes. Suerte, que tus padres partieron. No quisieran ver a una perdedora.

- ¡¿Quién eres?!- quien haya sido le iba a dar una buena paliza.

- Soy tu peor pesadilla. Todos te abandonarán, no sirves para nada.

- ¡Cállate!, muéstrate cobarde- no había respuesta alguna.

Escuche unos pasos veloces, subiendo por las escaleras. 

- Joy, qué te ocurre. Estabas gritando.

- Ah, tía. No, nada. Solo me golpeé y me dolió mucho que grite del dolor- por su cara, sé que se dio cuenta que algo andaba mal.

- Si tú lo dices, te creeré. Si algo sucede, solo llámame y vendré corriendo. 

- Sí, tía. No te preocupes.

Y salió de mi habitación. Acaso, me estaba volviendo loca. No puede ser, yo escuche a una persona hablando, empero por qué nadie me contestaba.

POV CAMELIA

Entre tan solo unas horas, Dareum iba a pasar por esta puerta y convencería a mis padres. No me siento bien, creo que no se lo creerán. 

En eso, mi celular sonó, era justo él. 

- Dareum, en cuánto vienes.

- Discúlpame, Cam. El tráfico hará que me demore unos minutos, pero que llegaré a tu casa sí o sí.

- Ok, lo único que te pido es que los persuadas y así poder ir contigo a Corea.

- Ya te lo dije antes, confía en mí. No volveré sin ti- me calmaban un poco sus palabras, sin embargo todavía sentía esa pequeña punzada en el pecho- Te voy a colgar, no te olvides tus líneas cuando esté allí. Adiós.