Amor platónico

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No puedo olvidar en su mirada el atisbo

en el que una gran sorpresa se reflejó

al hablarle de un corazón que ya no es mío

desde que mi cuerpo junto al suyo lloró.

Los días pasan y aún siento en mí ese perfume

que al enredarme en su pelo un día descubrí,

ante esa sensación yo me creía inmune

y fui tan vulnerable que en él me perdí.

He intentado desquitarme de sus abrazos

consiguiendo así desearle una vez más,

sólo duermo para soñarme en su regazo,

sólo despierto para volver a soñar.

Versos adolescentesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora