The Baddest Female (K-Pop) [2NE1]

Capítulo 2: Chica caprichosa.

La bella jovencita de dorados cabellos fija su rasgado y sorprendido mirar en el atractivo joven que tiene frente a ella. No puede articular palabra por la impresión y tampoco se siente dispuesta a permitir que alguien como él se burle de ella de esa manera. Porque percibió la ironía en sus palabras y sabe que la opinión que tiene hacia su persona no es buena, como la de muchos otros individuos que se han formado ideas equivocadas de su, supuestamente insoportable, temperamento.

--Así que tú eres el nuevo fotógrafo --murmura con aire de desprecio y mirándolo nuevamente de pies a cabeza.

--Es correcto, señorita --responde Víctor con una sonrisa--. seré yo quien se encargue de las fotografías de su próximo debut como solista; el director me acaba de informar. Ahora que recuerdo, ¿disfrutó su frappé? --cuestiona acercando un poco su rostro al de ella.

--¿Cuál es tu país de origen, extranjero? --interroga con semblante presuntuoso e ignorando la pregunta de su simpático interlocutor.

--Ah, veo que estás un poco curiosa sobre mí --deja escapar una traviesa risita y enarca una ceja--. Verás, compañera, yo vengo desde el otro lado del globo terráqueo, a miles de kilómetros de esta hermosa ciudad.

--¿Eres de América? --emite con evidente sorpresa.

--¡Vaya, entonces sí asististe a tus clases! --exclama de forma burlona, provocando que el representante de la chica soltara una risita--. Efectivamente, soy americano.

Ella, a punto de perder la paciencia, sólo aprieta sus puños con fuerza y dibuja una media sonrisa. Si hay algo que odia es perder y no permitirá que sea él quien resulte victorioso en esta confusa charla; porque no está segura de si es sólo una conversación o una discusión. Su orgullo está de por medio.

--Es extraño... --dice observándole con curiosidad--, dices que eres de América, pero tu piel... es oscura.

El extrovertido latino deja escpar una carcajada. Baja el estuche de su cámara profesional de su hombro y la coloca sobre el escritorio color caoba; se encamina hacia la silla ejecutiva del director y se acomoda en ella. Recarga su cabeza en el cómodo respaldo y fija su intensa mirada en su interlocutora.

--Acudiste a clases, pero no las aprovechaste lo suficiente --menciona sonriente--. Tú formas parte de esas muchas personas para las que América no es un continente, sino un país. América no es sólo esa nación en la que estás pensando, de habla inglesa y habitantes de nívea piel; debajo de ella hay mucho más territorio. Aún así, la diversidad cultural es casi infinita dentro de cada estado. En fin, te sugiero que vuelvas al colegio y exijas una recapitulación de cada una de las asignaturas. O en su defecto, demándalos por no instruirte como es debido.

--Idiota --piensa mientras le mira con hastío--. Lo tomaré en cuenta --dice finalmente luego de un breve e incómodo silencio, y muestra una forzada sonrisa.

El travieso muchacho que no puede apartar su intensa mirada de ella, ríe nuevamente con un poco de malicia; se pone de pie y se aproxima a la nueva víctima de su inevitable e innato sarcasmo.

--Eso último sólo fue una broma... para romper el hielo, tú sabes --manifiesta sonriente--. Lo importante ahora es que trabajaremos en un sólo equipo, y te aseguro que dedicaré todo mi esfuerzo para lograr las mejores fotografías. Bien, -ríe -hemos iniciado una interesante charla, pero aún no conocemos nuestros nombres. ¿Con quién tengo el gusto?

Observando a su interlocutor con actitud altanera, permanece en silencio a la espera de que sea su despistado representante quien se encargue de responder; sin embargo, éste no parece comprenderla. Instantes después, ella lo mira por el rabillo del ojo y él por fin entiende el mensaje.

--Permítame --titubea--,. soy Cha Dong Hoon, manager de la señorita. Ella es Lee Chae Rin.

--¿L-Lee...? --pronuncia el apuesto latino con semblante aturdido.

--Chae Rin --repite el amable caballero--. Lee Chae Rin.

El creativo chico se mantiene pensativo por un momento. Es la cuarta ocasión que pisa suelo surcoreano, incluso en el pasado residió en él por unos cuantos meses; aún así todavía le cuesta trabajo entender algunos términos. Durante una conversación puede quedarse callado de repente porque no encuentra la palabra correcta; su pronunciación no siempre es muy buena y los nombres propios son los que más se le dificultan, todo ello por cuestiones fonológicas.

--Chae Rin, extranjero, Lee-Chae-Rin. --silabea con evidente impaciencia.

--Oh, entiendo. Lee Chae Rin, será agradable ser parte de tu equipo --sonríe.

--¿No piensas decirme tu nombre?

--Por supuesto, llámame Vic-tor, Víctor --responde de forma juguetona y dejando escapar una graciosa risita a la que se une el otro hombre.

La talentosa cantante dibuja en su rostro una mueca de hastío y lanza a su representante una atemorizante mirada que lo hace callar al instante.

--Él es... muy... simpático --expresa el individuo temeroso; quien ante el insistente y estremecedor mirar de la bella señorita, baja la cabeza avergonzado.

--Con el permiso de todos ustedes --interviene un gentil señor entrando a la habitación. -¡Víctor, qué gusto me da verte de nuevo! --exclama dando un fuerte apretón de manos al aludido, para posteriormente abrazarlo y palmear su espalda de manera afectuosa.

--Director Jang, a mí también me agrada poder saludarlo en persona. Ha pasado tiempo desde la última vez que nos reunimos --contesta complacido.

--Hola. Lo siento, pero me he encariñado mucho con este carismático joven --se disculpa haciendo una venia frente a la futura solista y su manager--. Su sentido del humor es único --ríe--. Es un muchacho muy ingenioso, se darán cuenta muy pronto. He venido para mostrarte las instalaciones de la empresa y presentarte a tus compañeros de equipo y probablemente a algunos de nuestros artistas.

-Será un placer --emite emocionado.

--¿CL-ssi, nos acompañas? --cuestiona el importante ejecutivo. Ella asiente con la cabeza. -Entonces vamos.

--Primero las damas --señala Víctor abriendo la puerta de forma caballerosa y ella sale con aire altivo--. ¿CL? -Murmura curioso a su protector.

--Sí, ese es su nombre artístico. Es bonita, ¿verdad? -Responde en un confuso español y le mira con complicidad.

--Sí, pero bastante caprichosa y soberbia --dice en el mismo idioma, provocando la risa de su oyente.

Impresionado Víctor recorre los largos pasillos del lujoso edificio, guiado por ese buen hombre que le ha ayudado a obtener la oportunidad de convertirse en un prestigiado profesional y en compañía de la hermosa chica que bien podría convertirse en su musa.

Esbozando la encantadora sonrisa de la que es poseedor, se detiene en el umbral de uno de los salones de ensayo, donde más de una decena de jóvenes ejecutan una sensacional coreografía al ritmo de una cadenciosa pieza que invita a bailar en cuanto se le escucha.

Sin poder negar sus raíces latinas, amantes ancestrales de la danza, comienza a imitar algunos de los movimientos de los bailarines y a improvisar algunos más. Su descubridor ríe divertido y el otro individuo que los acompaña se le une, mientras CL observa con apatía al extrovertido jovencito.

Luego de tan gracioso momento, el cuarteto se dirige al espacioso gimnasio, donde algunas personas se ejercitan vehementemente. Otras más toman un descanso y charlan mientras consumen bebidas rehidratantes.

--¿Te gusta? --cuestiona el director Jang al notar el entusiasmo de Víctor.

--¡Por supuesto, es impresionante! --contesta sonriente.

--Aquí es donde nuestros artistas realizan sus rutinas de ejercicio. Hasta ahora no hemos visto a ninguno, pero no tardan en llegar. Es casi la hora de su entrenamiento. Todos esos jóvenes que ves son bailarines. ¿Te gustaría practicar en este lugar? Es evidente que te ejercitas bastante bien --palmea el bicep de su interlocutor, quien se limita a reír. -Me encargaré de que te autoricen la entrada a este lugar cuando desees.

--Se lo agradezco mucho, pero no creo que sea correcto --emite avergonzado.

--¿De qué hablas, muchacho? --ríe--. En esta empresa todos somos como una familia, unidos, y nos tratamos como tal.

--¿Todos? --pregunta con ironía al tiempo que dirige su mirada a la soberbia jovencita.

--Sí, todos. --ríe--. Sólo dale tiempo. Es normal que algunos desconfíen o se sientan incómodos ante un extraño, y más si se trata de un extranjero --dice en español para evitar ser comprendido por ella--. Mira, uno de los instructores ha llegado. Ven conmigo, te lo presentaré.

Detrás del entrenador arriba un grupo de alegres jovencitos. Todos ellos bromean y ríen, pero al notar la presencia del apuesto latinoameticano guardan silencio y comienzan a dispersarse hacia distintas máquinas.

Rápidamente tres bellas chicas se acercan a Lee Chae Rin. Sonríen y miran a su compañera de forma traviesa.

--¿Es él, unnie? --cuestiona la más pequeña de ellas con entusiasmo.

--¿De qué hablas? --se hace la desentendida.

--¡No me digas que es el nuevo fotógrafo! --interviene la mayor del grupo, mirando fijamente al sonriente muchacho.

--Ah, él --le observa con apatía--. Sí, es nuevo y se encargará de las fotografías promocionales de mi debut como solista.

--Vaya que tienes suerte, unnie --comenta otra de ellas--. Es muy apuesto.

--Sí, y se ve que es un chico bastante agradable --afirma la menor.

--Sí, sí, es muy simpático. Su especial sentido del humor es... --se entromete el manager. La malhumorada rapera le lanza una fulminante mirada--. Lo siento --inclina su cabeza y de inmediato se retira del grupo de chicas.

--Pues a mí me parece un hombre demasiado presumido y aburrido --se queja CL con fastidio.

Segundos después, el atractivo Víctor se acerca al alegre cuarteto femenino. Todas ellas lo observan sonrientes, excepto la rubia. 

--Hola --saluda en inglés con tono seductor--. Supongo que ya saben la razón por la que estoy aquí --agrega en coreano. Ellas asienten entusiasmadas--. Mi nombre es Víctor.

--Mucho gusto --responde la mayor de las cuatro haciendo una venia--. Yo soy Sandara, pero puedes decirme Dara. Ella es Minzy y ella Bom --dice señalando a sus compañeras--. Las cuatro juntas somos 2NE1, un grupo musical.

--Interesante. Para mí es un placer conocer a tan bellas señoritas en mi primer día en esta empresa --sonríe, causando el sonrojo y la risa de las tres chicas.

En ese momento un rubio y musculoso jovencito entra contento al gimnasio, pero su risueña expresión desaparece de su faz en cuanto ve al también ejercitado latino rodeado de las cuatro hermosas señoritas; en especial una de ellas.

Se detiene, frunce el ceño y observa la escena por unos instantes. Posteriormente se encamina hasta donde uno de sus amigos, de sonrisa sensual y mirada penetrante, se halla elongando.

--¿Y ese quién es? --pregunta molesto.

--No tengo idea --responde indiferente.

--¡Minzy-ssi! --alza la voz. Ella de inmediato comienza a buscarlo con su vista hasta encontrarlo y esboza una tierna sonrisa--. Ven acá --le ordena autoritario y mirando al joven de piel bronceada con recelo.

La talentosa señorita se despide de su nueva amistad y de sus colegas, y se dirige a donde el rubio oriental la espera visiblemente enojado. En cuanto le tiene cerca, comienza el interrogatorio típico de un novio celoso.

--¿Qué sucede? --cuestiona Víctor al notar la molestia del carismático vocalista.

--¡Ops! Minzy-ssi está en problemas --se burla Dara con una traviesa risita, mientras el atractivo latino le mira con desconcierto.

--Él es Daesung-ssi, integrante de BIGBANG, una banda de cinco chicos. El que está a su lado es Seung Hyun, el rapero del grupo --le informa Bom.

--Daesung-ssi es novio de Minzy-ssi, pero --coloca el dedo índice en sus labios--, ¡sssh! Es un secreto --revela en un susurro de forma traviesa.

--Oh, ya veo. -Murmura pensativo.

--Oye, extranjero --dice la caprichosa rubia--. ¿Qué idioma era ese que hablabas hace unos momentos con el director Jang?

--Era español, mi idioma materno. Ahora también sabes que en América no sólo se habla inglés --contesta con su característica ironía, causando que ella lo mire con fastidio.

--¿Eres de América? --interroga Bom con emoción.

--Así es --sonríe.

-¿-Cómo es que hablas tan bien el coreano? Tu pronunciación es bastante decente --interviene Dara--. ¿Tienes mucho tiempo viviendo en Corea?

--No --fija su vista en la nada--. Tuve que aprenderlo --finaliza con semblante melancólico.

Las tres jóvenes artistas le miran curiosas, mientras él permanece en silencio y parece haberse sumergido de pronto en sus pensamientos.

--Víctor, ven acá --lo llama el gentil empresario, sobresaltándolo un poco y sacándolo bruscamente de sus cavilaciones.

Él muestra una adorable sonrisa a las tres bellas jovencitas, se disculpa con ellas y se dirige a donde el importante empresario se halla en compañía de otro individuo.

CL le ve alejarse mientras en su faz se dibuja una maliciosa expresión que capta la atención de sus compañeras.

--¿Qué estás pensando, unnie? --cuestiona Dara con preocupación. 

--Nada --responde con un tono de voz que si se analiza, se puede percibir en él un toque de maldad.

--Unnie, sólo déjalo hacer su trabajo, por favor. En cuanto termine se irá --suplica Bom de manera sumisa.

La famosa rapera sólo se limita a guardar silencio y a clavar su perversa mirada en el nuevo integrante de la familia YG, al mismo tiempo que su escalofriante sonrisa se acentúa cada ves más.