-Soy un desastre de Angel-gemí cuando me tiré en la cama.
-Vamos cariño, lo hiciste genial-me dijo mamá cuando la tía asintió volviendo con unas tazas de café, té y zumo en la bandeja, y nuestro Bosley (un hombre moreno de aspecto latino) traía galletas.
Se suponía que era un trabajo fácil. Entrar en un complejo turístico y "convencer" a un médico llamado Travis Blackwood de entregar las llaves de su laboratorio, ya que estaba manipulando medicinas para enfermar a los pacientes. Luego lo llevaríamos a la Agencia y listo. Pero casi se nos escapa, y además en el laboratorio había un grupo de vigilantes, demasiados para unas simples medicinas. Al parecer el hombre también estaba metido en drogas. Logramos quitarle las llaves sin que se diera cuenta en vez de utilizar la violencia, lo que siempre es bueno, aunque mamá necesitó distraerle.
-Eres la mejor Angel, Dalia-dijo Bosley-. Por algo te tatuaste en tu quinto cumpleaños.
Así es. Tengo 5 años y soy un Ángel. Nací para eso. Sonreí.
Entonces, sonó el comunicador.
-Hola, ángeles-se escuchó una voz masculina.
-Hola Charlie-respondimos mamá, tía Cora y yo. Nos erguimos.
-Charles-dijo Bosley, cruzado de brazos-. Te juro que como quieras enviarlas a otra misión, averiguaré dónde vives y te patearé el trasero.
-Tranquilo Bosley, sólo quería decirles que buen trabajo a las tres. Baby Angel, pensé que no podías mejorar más, pero has demostrado que estaba equivocado-aplaudí-. Kate... hablamos de dejar a la gente en el hospital-mamá se rió alegremente como psicópata, pero la verdad, ese hombre se lo merecía-. Cora, sólo te falta una misión más para ganarte el tatuaje.
-¡Estoy muy emocionada, Charlie!-gritó tía Cora. No había aprobado todavía algunas asignaturas de estudio avanzadas, pero tenía las básicas, era más fuerte que una humana, y éramos familia. Tía Cora sólo necesitaba una misión más (la de entreno fue conmigo, poco antes de ganarme el tatuaje, me acompañó en un problema con el tráfico de personas; la primera fue rescatar a un testigo protegido, un adolescente llamado Leo Gomez, de un hospital donde los policías corruptos que le dispararon querían matarlo; la segunda esta misma).
-Estupendo, pero ángeles, hay algo que os involucra. Kate, ¿sabes algo de tu hermano?
-Chris... se ha mudado a Beacon Hills, es lo último que sé. Además estaba convencido de que alguien buscaba venganza. Se encontró un ciervo muerto con el símbolo.
No me sorprendió, mamá ya nos lo había susurrado a tía Cora y a mi.
-¿Cora?
-El único lobo que continúa en Beacon Hills es mi tío Peter. A no ser que se hayan mudado muy recientemente. O un nuevo mordido, pero en ese caso no sabría el significado. La manada de Satomi no se involucra demasiado.
Miré a mamá y a la tía Cora hasta que Charlie volvió a hablar.
-Han habido algunas muertes en Beacon Hills. Supuestos ataques de animales a un involucrado en el incendio de la Casa Hale-yo me sabía esa historia. El padre de mi mamá la obligó a hacerlo. Mi tía, mi padre, mi otra tía y mi tío abuelo fueron los únicos supervivientes.
-¿Uno de ellos?-tía Cora era muy buena en ignorar el hecho de que mamá mató a su familia. A veces le seguía molestando ese hecho, pero prefería concentrarse en el presente, porque ya no era la niña de 11 años que huía del fantasma de una casa en llamas, ahora es una mujercita a punto de ganarse sus alas-. ¿Quién más murió?
-Tu hermana Laura-respondió la voz de Charlie.
Me acurruqué en mamá mientras miraba preocupada a Cora, quien sólo respiró hondo.
-Entonces, ¿modus operandi?
-En el informe pone un ataque de animales. Después fue cortada por la mitad.
-¿Primero un lobo la mata, probablemente para quitarle el poder alfa, y después los cazadores la encontraron?-pregunté yo.
-Es lo más probable, Dalia-pude sentir cómo las garras crecían y se me contraen. Al igual que mi abuela, era capaz de transformarme completamente: mamá siempre me había animado a ser tan lobo como humana.
-Entonces, el más probable es Peter Hale-deduje.
-Sus registros indican que está en el hospital-dijo Bosley con su fuerte acento de enfado y la tableta en la mano.
-Tsk, sigue siendo el mayor sospechoso-murmuré yo.
Tía Cora me miró entre indignada y curiosa con los brazos cruzados.
-Explica, Baby Angel-ordenó Madre.
-Peter Hale es el único lobo que nosotros sepamos que está en Beacon Hills para el que sería necesario una venganza además del poder Alpha-expliqué mirando a mamá, quien se hizo la loca mirando hacia el balcón, incluso llegando tan lejos como para silbar la canción una de las películas de Batman-. Incluso si el símbolo de venganza es una distracción para el poder alfa... Un omega no tendría tanto control y un beta sería perseguido por su manada, o al menos avisarían a los lobos del pueblo donde pensarían que estaría. La manada del Alpha Satomi Ito no se involucra. Honestamente, me sorprende que nadie lo haya interrogado ya. Con un poco de curiosidad sería bastante fácil que otro lobo se presentase para mirar si está o no curado, y tiene o no un poder Alfa.
-Lo visité algunas veces desde que me uní a la Agencia-susurró tía Cora-. La última vez poco después de tu cumpleaños, Dalia. Me parecía que estaba mejorando y dejé mi teléfono...
-Pero necesitaría ayuda-habló mamá-. Para enviar la carta, alguien que lo cubriera. Una enfermera, uno de sus cuidadores.
-Jennifer Hill-habló Tía Cora, recordando-. Ese era el nombre de la enfermera que me echó. Muy enfadada, de verdad.
-Muy bien ángeles-se escuchó la voz aprobadora de Charlie-. Kate, Dalia, vosotras dos iréis a Beacon Hills, averiguad lo que el alfa quiere hacer, es decisión vuestra si involucramos a la Agencia. Cora, tú todavía debes terminar el entrenamiento-mi tía gimió.
Sin embargo, hicimos caso a Charlie. Siempre lo hacemos.
Si nosotras somos Ángeles, él es nuestro Dios.
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Angel (Teen Wolf)
FanfictionKate Argent regresa a Beacon Hills Con una hija de cinco llamada Dalia Ambas tienen un tatuaje Y trabajan para un hombre llamado Charlie Como Dalia dice, Charlie es su Dios Ellas son ángeles Los ángeles de Charlie