One Shots. (Steve Rogers/ Chris Evans)

Chris Evans

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ADVERTENCIA: Este One Shot contiene violencia y palabras no aptas para todo publico. Si te incomoda te recomiendo pasar al siguiente. Gracias.

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La duda siempre queda, siempre hay algo que no logre cuadrar ante la situación. Habían momentos en el transcurso del día en que no podía dejar de pensar en eso. En todo matrimonio hay dificultades, discusiones, eso no los hacía diferente a todos los demás. Pero lo que si los diferenciaba de aquellos matrimonios, era que estaban en el ojo del huracán. Todo el tiempo eran perseguidos por millones de paparazzis. Cada salida era seguro que al medos dos docenas de ellos les estarían pisando los talones.

Era bastante agotador tener que vivir de esa manera. Pero no había nada que hacer, salvo acostumbrarse a esa vida. Cada movimiento tenía que estar previamente pensado, planeado y sobre todo cuidar de no llamar mucho la atención. Pero fueran cono fueran de cuidadosos, siempre había alguna pequeña cosa que los medios usaban en su contra para poder joder.

Estar en el medio del espectáculo, era agotador. La pareja que aun estaba de moda era la de Chris Evans, quién llevaba de estar junto a su mujer siete años, dos como una pareja de novios y cinco años en matrimonio. La mayoría estaba tan obsesionada con ellos, que hicieron trabajar a los paparazzi con intensidad, solo para saber que era lo que hacían a cada hora de cada día.

Últimamente, las especulaciones de una infidelidad por parte de la pareja del momento, estaba sonando en todas partes. Pues se filtró una fotografía bastante reveladora. Ambos amantes desnudos, compartiendo la misma cama, la misma colcha. La imagen no tardó en llegar a la pareja afectada. Quién en ese momento estaba dando vueltas en la sala, mientras que la persona con la que había compartido siete años de su vida estaba al frente, con la cabeza agachada y sin emitir una sola palabra.

─¿¡Quieres explicarme, qué mierda es esto!? -finalmente dejó salir aquellas palabras que se moría por decir-

─Y-yo... -pero no hubo más-

─¿¡SABES QUÉ FUE LO QUE HICISTE!? ¿¡TE DAS CUENTA DE LA GRAVEDAD DE ESTO!? -volvió a usar un tono de voz alto-

─Escúchame. Sé que... bueno yo, realmente me siento muy mal por...

─¡Es lo menos que deberías de sentir! ¡Mierda! ¡¡A la mierda tú y tus putas explicaciones. A la mierda tú y tus putas disculpas!!. -miraba aquellos ojos con tanto odio-

─No estabas, Chris. Jamás estabas en casa, me sentía muy sola. -un par de lágrimas comenzaban a salir de los ojos castaños de la pelinegra- Estaba la mayor parte de mis días sola y...

─Y tu solución fue ponerme los putos cuernos. Gracias, eso tiene lógica. -ella se mantenía con los ojos clavados en los de él- ¿¡POR QUÉ!? ¡¡MIERDA!! ¿POR QUÉ?

─¡Jamás estabas! Te ibas por tanto tiempo, y estabas tan poco aquí conmigo. A lo máximo era solo una puta semana. La misma en la que te ibas con tus amigos, ¿en qué momento estaba yo? Me dejaste de lado, Christopher.

─Debiste de hablarlo. Esas estúpidas cosas se hablan, jorder. No solamente vas y te metes a la cama del primero que te encuentres.

─¿Cuándo? ¿Cuándo hablaríamos? Jamás tenías un maldito segundo para mí. No solamente soy yo la culpable, tú también tienes culpa de esto.

─¡Oh, disculpa por ir y abrirte la putas piernas para ese hijo de perra! ¡Fue mi puto error! -de nuevo ya estaba levantando la voz-

Pero la pelinegra alzó su mano, propinandole una buena bofetada. El actor volteó la cara, y sintió como el ardor en su mejilla lo hacía alterarse todavía más de lo que estaba. Chris se giró alterado, mirando de una manera mortal a su esposa. Mientas que ella lo miraba con molestia también, pero su expresión se suavizó cuando continuó con sus palabras.

─Chris, entiende, realmente no era mi intención lastimarte, no planeaba engañarte ni nada de esto. -quiso acercársele pero él retrocedió-

─Habiendo tantos hombres en este planeta, ¿por qué él?

─Chris...

─_________, respóndeme. ¿¡Por qué!?

─Henry se mostró muy comprensible. Dijo que el entendía perfectamente lo que se sentía... una cosa llevó a la otra y... Cariño yo. -pero el rubio la tomó de los hombros y la sacudió-

─¡Siete años, _________! De estar juntos, y tú me engañas por esas estúpidas excusas... Con ¡¡CAVILL!!

─Chris, me estás lastimando. -dijo ya al borde de las lágrimas-

Evans la soltó, se quedó pensativo, los dos estaban con el corazón alterado. Y no sabían que era lo siguiente que tenían que hacer.

─Tenía miedo. Te fuiste por días, los medios decían que tenías una relación con Olsen, con Stale y con la actriz de Cenicienta... James, Lily James. Te pedí explicaciones, porque realmente quería que estuviéramos bien. Pero jamás lo tomaste en serio, Christopher, jamás te tomaste un segundo para realmente hablar de mis sentimientos, los míos también importan. Ahora tú estás enfocado en lo de Henry, pero no te pones a pensar en lo que yo sentía cuando... -la interrumpió-

─¿Cuándo ese hijo de perra te estaba cogiendo?

Y esa fue la gota que derramó el vaso. Con todo el coraje del mundo, la pelinegra tomó el valor que le hacia falta. Ella entendía que Chris estuviera más que furioso con ella, pero tampoco toleraría que la estuviera insultando. Llenó sus pulmones con aire suficiente, para después sacarlo y decir esas palabras que jamás pensó que llegaría a usar.

─Quiero el divorcio. -se sostuvo del respaldo de la silla, para después caminar hasta la recámara que compartía con el rubio-

Una vez llegó, fue hasta el armario y comenzó a guardar sus prendas de ropa. Evans seguía conmocionado en la cocina, había escuchado esas palabras claramente. Y se sorprendió al darse cuenta de que no quería dejar a ______, a pesar de lo que había hecho, él no quería darle fin a su matrimonio. Sacudió varías veces su cabeza, para ir a la habitación. Pudo ver como era que la pelinegra, su pelinegra estaba guardando prenda por prenda.

─________, espera, no... no quiero que te vayas.

Dejó escapar un suspiro, pero aún así ella siguió guardando sus pertenencias. Una vez la maleta estuvo lo suficientemente llena, la cerró, dejó caer sus manos en ella, alzó la mirada a Chris, para finalmente hablar.

─Será lo mejor, Chris. Será difícil que los dos nos tengamos confianza, será duro. Y tú mismo lo dijiste... soy una maldita zorra. -em rubio se quedó con los ojos blancos, sin saber que más decir-

_______ caminó hasta la salida, con su maleta tras de ella. Dodger se acercó hasta ella, se inclinó para darle unas cuantas caricias al can. Se paró, miró su mano izquierda, tomó el anillo con los dedos delgados de la otra mano. Al quitárselo, lo miró por última vez, a ella llegaron los recuerdos de toda su relación con el actor. Y el mejor y peor recuerdo que ahora le estaba rompiendo el alma, fue el día que le pidió matrimonio.

Ambos estaban tan felices y enamorados. Pero, todos saben que eso no dura para toda la vida.