Nail Polish- Rubgan || karmaland 4

~CAPÍTULO UNO: DESEOS Y CANCIONES EN LA NOCHE ESTRELLADA~

Era un día como cualquiera en karmaland, aldeanos paseando con total tranquilidad, charlas entre los héroes, gente en sus trabajos, escuelas y demás, un pacífico día de domingo. Dos de los héroes de karmaland y los que más destacaban se encontraban sentados en la mesa de una cafetería, charlando con completa naturalidad de sus vidas.

-Y por eso fui a casa de vegetta el otro día... Auron se la pasa robándole porque según él así llamará su atención- soltó con naturalidad el híbrido alado viendo como su acompañante soltaba una pequeña risita por la anécdota

-bueno, Auron es un completo misterio... si yo estuviera en su lugar trataría de ser más como Alex o Luzu no sé del tipo detallista pero sin ser un empalagoso- dice el híbrido de oso a modo de respuesta- Aunque eso sí, JAMÁS sería un tóxico como solía ser Lolito...- gruñó el oso por lo bajo al recordar como trataba a su amigo Mangel

-Tranquilo rub no es para tanto... aunque bueno, yo sí sería de esos chicos taaan cursis que llegan a empalagar a la gente- dice el búho riendo un poco- Bueno... ya se está haciendo tarde, si iremos a ver las estrellas, no?

-Oh si, si, casi lo olvido, ahí estaré Fargan- sonrió el oso antes de irse camino a su casa para arreglarse y preparar algunas cosas

Eso era algo que ambos tenían en común, amaban estar en contacto con la naturaleza, tal vez por su lado animal, pero simplemente era algo que relajaba a ambos, a Rubius le gustaba solo estar en calma y de vez en cuando retratar los paisajes que admira y en cuanto a Fargan solo le gusta estar ahí y escuchar los sonidos del viento o el agua... Era algo simplemente maravilloso para ambos.

Ya era casi de noche y ambos se encontraban en su casa, ya preparados y vestidos para la ocasión, a último minuto el rubio propuso acampar, cosa que a Fargan le pareció bien, pues así podría pasar más tiempo en la naturaleza 

||POV Fargan||

Ya estaba listo, a último minuto a Rubius se le ocurrió acampar a último minuto, cosa que acepté y bueno, si iba a estar toda la noche ahí debía ir bien para la ocasión, me puse una falda azul rey que llegaba por debajo de las rodillas, no mucho pero si lo suficiente para que no me diera frío y por la parte de arriba un simple suéter negro acompañado de una chamarra blanca y, para no perder costumbre me pinté las uñas de un simple color negro, no era nada fuera del otro mundo pero me gustaba como iba, en cuanto a lo que llevaba, comida, agua, una cámara pues me gustaba la fotografía, sábanas y una casa/tienda de campaña.

Al llegar al lugar me llevé la gran sorpresa de mi vida al ver que Rubén ya estaba en el lugar, esperando y con las cosas puestas, bueeno, tal vez exagero pero es un milagro que llegara temprano a los lugares o eventos

-Rubius? pero, cómo llegaste tan temprano?- pregunté riendo por lo exagerado de mi reacción

-Tsk, solo me emocioné y llegué antes, es todo...- dijo sonriendo al verme

||Omnipresencia|| [porque no sé escribir desde los puntos de vista de los personajes]

Ambos chicos conversaron un poco mientras admiraban el cielo estrellado, un maravilloso paisaje que ambos disfrutaban por la paz que este transmitía.

-Se ve hermoso, no crees?- dijo el rubio mirando a su acompañante- Desearía tener esta paz por siempre...- suspiró metiendo las manos a su sudadera

-Pues si.. es una noche hermosa, yo también quisiera que así fuera siempre...- dijo el castaño apoyando la mano en su mentón mientras miraba el cielo- yo desearía poder tener esta paz siempre.. sin preocuparme por el trabajo o por la gente del pueblo- gruñó por lo bajo pues la gente siempre lo miró raro por usar ropas femeninas, sin importarle sus emociones o como se sentía con esas ropas

-Ya hombre, no gruñas... si te hace sentir mejor, te ves bien hoy, me gusta tu ropa- dijo con sinceridad el oso- si en verdad todo es tan malo yo no culparía al mundo pues solo cumple su función, dañar a los que son brillantes para dar paz a los pobres que solo... buscan una luz, una luz que seguir hasta el más allaaaá... si en verdad to...do es tan maaalo... dime por... qué... te co...nocí?~-cantó el oso para animar a su compañero, cosa que funcionó perfectamente

-Wow.. no sabía que cantabas... me gusta tu voz, mucho, enserio...- sonríe con total amabilidad y sinceridad, cosa que hizo algo en el interior del oso removerse.

esa noche ambos híbridos siguieron con los cumplidos, tratando de animar al otro haciendo que ambos se sintieran protegidos y queridos... estaban agradecidos de tenerse como amigos.

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[791 palabras]

Es corto, lo sé, pero es tarde en mi país y la creatividad no me llegó para mucho, aparte es el primer capítulo y para empezar no lo veo tan mal, sin más que decir, me despido, lindo día, tarde, noche o madrugada, nos vemos en el siguiente capítulo.