- Esto es una pérdida de mi valioso tiempo, atsushi...- Se escucho la milésima queja por parte del castaño
- Dazai-San, En serio no encuentra nada bueno en el festival?- Después de rato no obtuvo más respuesta que la mirada de aburrimiento en el rostro de
DazaiPor qué debía ser así? Estaban en un festival de año nuevo! Se supone que mínimo debía tratar de iniciar con un mejor ánimo
- Si estuviera en casa podría seguir investigando la forma más revolucionaria para pedirle a una bella joven que cometa suicidio doble conmigo!! Pero nooo, estoy aquí, viendo gente caminar, Puedo hacer eso desde mi ventana!!!- Las quejas volvieron a iniciar, atsushi solo suspiro resignandose a que seria así por un largo rato y se puso junto a naomi y Tanizaki
- Solo iremos a rezarle a un dios y podremos irnos~ esta vez hablo Kenji que Al igual que todos portaba un yukata tradicional
finalmente pararon frente a un templo, Este era elegante y muy bello, La gente entraba y ponían ofrendas en las diferentes estatuas, otros ponían sus deseos en las ramas y paredes y finalmente entraban al templo a rezar, los jóvenes entraron y quedaron conmocionados al ver la elegancia y belleza que se reflejaba, el lugar estaba lleno de cerezos floreciendo adornando el cielo nocturno, una leve brisa hizo que algunos pétalos volaran
Dazai alcanzó uno de estos y lo miro, ciertamente el lugar era precioso, quizás si no hubiera tanta gente lo disfrutaría más
Empezaron a caminar en diferentes direcciones, Mientra unos fueron guiados hacia el templo por unas jóvenes Miko, Dazai se distrajo mirando las estatuas que rodeaban el lugar, eran Zorros. a pesar de que todas las estatuas estaban hechas de piedra, había una que parecía estar hecha de... porcelana...? talvez no, Captaba la atención muy facilmente, Lo que más resaltaba eran los ojos, Azules, tan brillantes que parecían llenos de agua apunto de desbordarse, Dazai se fue acercando a paso lento en lo que la gente se iba alejando de esta, Estaba rodeado de ofrendas y tenía algunas notas colgando de sus orejas, posó su mano en el hocico de este, Tenia cuatro colas, era eso normal?, estas eran blancas y terminaban en tonos naranjas y rojizos, su mirada era tan intensa que al ver sus ojos parecía estar vivo
* Ya me estoy volviendo loco....*
- Bastante hermoso, no lo crees, joven?- Una voz femenina le hizo darse la vuelta, Pareció como si todo el mundo se hubiera esfumado, y el tiempo congelado, La mujer tenía un cabello rojizo amarrado y lo sostenían unos broches, usaba un kimono rosado bastante elegante, sus labios y ojos estaban pintados de un rojo cereza y en sus manos reposaba una sombrilla, Poseia una sonrisa bastante encantadora
Dazai retrocedió un poco después de analizar a la mujer, seguramente era una sacerdotisa del templo
- De hecho, si, pero me da la sensación de un tipo de preferencia, espero que mi hermana disculpe mi ignorancia y me diga si esta es una figura muy importante- Dazai sabia muchas cosas, y lo que no, lo deducía en segundos pero resulta que el tema de los dioses no era su fuerte que digamos
Ella lo miro por un segundo y río gentilmente, no supo si de burló o de manera gentil, pronto, hablo - Joven, Tu sabes a que dios pertenece este templo?- Dazai nego y ella Se acercó más mirándolo con una expresión que mezclaba confusión y diversión
- Vaya, Si ese es el caso, Aunque es extraño que alguien venga a rezar en un templo del cual desconoce su propósito, Seria peor que yo me negase a decirte- ella empezó a caminar invitando a Dazai a unirsele, Dazai por su parte se encontraba un poco intrigado, esto le ayudaría matar el aburrimiento por un rato
Llegaron ante una estatua, no podía decir si era un hombre o mujer, le resultaba confuso
- Oinari o inari- ella inicio a hablar captando la atención de Dazai - Es un Dios de la fertilidad, el arroz, los zorros y la agricultura, es también conocida como un símbolo de prosperidad y amistad, Como notarás, Es un dios de aspecto andrógino, es a quien rezamos en este templo. Ahora, es más fácil hablarte de los kitsunes-
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Kitsune🍂[Soukoku]
FanfictionMas de mil años..... Más de mil años viviendo en un mundo, donde no cambiaba nada, pero al mismo tiempo nada permanecía igual. nakahara chuuya se dedicaba a ver la gente pasar y simplemente cuidarlos hasta que se desvanecieran dejando una mancha de...