Yo ya conocía su cuerpo desnudo. Su hermoso torso suave.
Conocía el sabor de sus besos en cada parte de mi cuerpo. Ese sentir erótico cuando sus labios me provocaban más que cualquier fantasía sexual pudiera expectearme.
Conocía el olor que uno siente luego de distinguir el latex en el ambiente. Había visto rincones que nisiquiera ella había conocido de su propio cuerpo.
Me sabía de memoria sus gemidos, y el repaso en mi mente de la forma en como se aferraba a las sábanas hundiendo la cabeza en el colchón.
Sus ojos cerrados y apretados y sus labios inquietos y mañosos le delataban el placer que sentía.
También me sabia como se oía mi nombre pronunciado por palabras tan débilmente firmes y más alteradamemte suspirados.
Mi lengua ya había distinguido entre sus tantos sabores...Y ahora me encuentro aquí, en esta su fiesta, tan solo viendo como baila queriendo hablarle, moviéndose así, llamándome, sin mirarme y yo mirando.
Pensando en todos esos grandiosos movimientos que alguna vez me dedicó a mí, pero solo a mí, solo yo sabía lo que ella era capaz de causarme aunque no tenga la experiencia de la que tanto se jacta que le hace falta.
Rogaba que me esté bailando a mí, que pensara que lo estaba haciendo frente a mi yo lo estaba preseciando a dos metros de distandia disfrutandolo y que me hiciera desearla aún mucho más.Hace mucho tiempo no me encontraba en una fiesta es por eso que olvidé como era sentir a la música convertirse en una fuerza tan poderozamente bella. Cada canción me recordaba a ella, a mi Val, esta era su fiesta de cumpleaños número 18, tenía tantas expectativas de este día que las previas de una boda se quedarían cortas frente a lo que pasaba por mi mente cada segundo antes y durante la fiesta, aunque ya me haya encontrado dentro de la residencia aun me sentía sumamente nervioso que si no bebía al menos un trago de agua mi corazón iba a comenzar a sonar aún más fuerte que los bajos de la vocina reproduciendo a tal nivel de volumen las canciones.
"Vine por ti, solamente por ti" eso es lo que me repetía a cada segundo mientras la veía bailar con sus amigos imaginandome a mí mismo partiendolos en dos porque sentía que lo merecían tan solo por tener el privilegio de bailar con ella, así que sí, lo merecían.
Pero aunque moría de ganas de tirarlos del hombro al piso y adueñarme de la cumpleañera no quería que ella me odiase.
Ella estaba hermosamente preciosa, y aún eso se queda corto. Todas las combinaciones de palabras que describan a algo delicioso serían una mierda comparandose con aquella obra maestra que yo tenía el agrado de ver, y estaba tan bella que estaba siendo sumamente afortunado de ser uno más de entre todos estos imbeciles que la presenciaban esta noche, y estaba tan perfecta que pensaba tontamente que jamás iba a repetirse esto y que jamás nadie nisiquiera ella iba a verse tan bien como se ve ahora mismo.Yo también me arreglé para el día de hoy, lo mejor que pude para gustarle, sin embargo aún no había podido hablar con ella, me sentía el invitado menos acogido el día de hoy, aunque lo más probable era que me viese como otro típico muchacho junto a una pared viendo a los demás bailar mientras disfruta del ambiente.
Me sentía extraño con todo esto, me di cuenta de que la amaba, con todas mis fuerzas y que aunque lo mereciera o no pensar que ella me ignorase no solo porque estaba enfadada conmigo sino porque ya no sentia el mismo amor de antes por mí, me destruía por dentro, cual mismo golpe entre las piernas, cada segundo era más y mas doloroso. El dolor de la pérdida lo llaman y no quería que fuese así, la extrañaba mucho y me esforzaba por llamarla con la mirada, con mi mente pero nsiquiera ella posaba su mirada e mí, asi que deseaba con todas mi fuerzas que pongan nuestra canción especial porque ya no aguantaba otro segundo más así, siendo un desconocido.Ese momento jamás llegó, ya habia pasado una hora desde que llegué y para nada había reservado el rincón cerca al baño exclusivamente para mi toda la noche.
Val, Val, Val... estás jugando sucio esta noche, con ese vestido y ese maquillaje me animas a tanto mujer.A tanto, pero yo apenas me he llegado a mover tan solo para llevarme el trago a la boca...
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EL PROCESO DE DESTRUCCIÓN DEL ALMA LUEGO DE UN DESAMOR
Teen FictionMejor amiga, amor. Quiero que este sea el mejor libro que leerás. De mí para ti.