La puerta del 11 de febrero de 1873 iba a parar a uno de los epicentros culturales y políticos de Madrid, el Café Suizo conocido por sus tertulias entre personajes importantes de la época. Alba salió de aquel armario que, solo para ellas era algo más, sorprendiendo a un caballero que justamente pasaba camino al baño.
- Disculpe. – dijo para luego volver a entrar y tirar de Aura que seguía a medio cruzar – Vamos hay que darse prisa.
- ¡Joder! - Gritó su sobrina.
- Baja la voz y salgamos de aquí.
Por suerte Alba había elegido para ellas vestidos discretos, no precisamente de clases pudientes, para que así pudieran pasar fácilmente desapercibidas. Sin soltarse salieron por la parte trasera del café, fue entonces cuando Aura fue consciente de que efectivamente habían viajado al siglo XIX. Mirase por dónde mirase veía carros de caballos, señores con traje y sombrero de copa, pero también niños pobres sin zapatos o mujeres cubiertas con pañuelos y mantillas.
- Estamos...
- El Madrid de la Primera República. – dijo Alba acelerando el paso.
- ¿Dónde vamos?
- Al único lugar al que iría Natalia. – Aura se puso a su lado sin atreverse ni a parpadear por todo lo que estaba experimentando – Es importante que pasemos desapercibidas, no tenemos ni idea de quién es quien ahora mismo.
- ¿A qué te refieres?
- Si Natalia quedó con Noemí aquí es porque iba a pasar algo importante, y lo único que se me ocurre es la proclamación.
Alba hablaba mientras escrutaba el entorno en busca de alguna pista, no era la primera vez que estaba en ese año, de hecho había ido con Natalia en más de una ocasión, por eso sabía que donde se dirigían era dónde ella habría fijado su punto de encuentro. Su querido parque del Retiro. Daba igual en qué época estuvieran, si pisaban Madrid siempre acaban dando un paseo por el parque o cerca de él y era él quien guardaba sus mayores secretos, las confesiones de dos amantes que se sabían ver sin ni siquiera mirarse.
- ¿El Retiro? – dijo Aura al reconocer el camino y Alba asintió – ¿Qué has querido decir con lo de la proclamación? Creí que ya se había instaurado la República.
- El día 9 abdicó Amadeo I, así que hoy se vota en Cortes Generales la proclamación de la Primera República y es lo que quizás quieran impedir.
- Un momento, ¿impedir? Creí que el señor Capdevila había dicho que este grupo lo que quería era que el Ministerio no toqueteara la historia. – Alba se frenó en seco provocando que Aura chocara con ella.
- No toqueteamos la historia, impedimos que otros la manipulen. – Alba la miraba seria y Aura tragó en seco – Cambiar la historia es muy peligroso, lo que en esta época es una simple piedra, se puede convertir en un muro dos siglos más tarde o en un muerto, ¿lo entiendes? – Aura asintió – Por eso es importante lo que hacemos.
- ¿Y qué pasa si se cambia algo por accidente? – Alba se giró y comenzó a caminar de nuevo con Aura a su lado.
- Qué vamos y lo arreglamos.
- Y si...
- Aura por favor, céntrate en la misión. – dijo Alba comenzando a estar un poco agobiada y asustada por lo que se fuera a encontrar.
- Perdón.
Entraron al Parque en busca del lugar donde Alba estaba convencida podría encontrar la pista que necesitaba, el Retiro no era exactamente igual que como Aura lo recordaba de su presente, pero no tuvo dificultad para reconocer hacia dónde se dirigían.
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CALENDARIO DE ADVIENTO ALBALIA
FanfictionVoy a escribir cada día un pedacito de historia, oneshots o lo que sea que salga esa mañana y os la voy a dejar aquí. Será un pequeño calendario de adviento un poco improvisado. Espero que lo disfrutéis.