Un caminante con una ruta larga
y muy diversa en su espacio.
Aparecen como muestra
de un sentimiento.
La costumbre de aparecer
entristece a tu dueño
y la rutina de ocupación te deja a un lado.
Puedes presentarse a cualquier hora,
sin importar la edad ni su clase social.
Puedes manifestarte tanto en los niños
como en adultos, mala acostumbras
a unos y en otros te acumulas
hasta que el vaso se desparrama.
Tratas de asemejarte a la lluvia,
hasta para salir, eres la mejor en copiar.
Imaginarte desaparecer a muchos asustará
y a unos cuantos ayudará a no sentir debilidad.
Es irónico esperarte
en los momentos de soledad,
cuando se supone
que el ser humano en ese instante
quiere existir sólo él.
Muchas cosas convocan tu presencia,
desde momentos esperados hasta
situaciones en que el alma se sale.
La mirada delata tu salida,
un ambiente oscuro abarca tu diluvio
y un día de alegría marca tu punto seguido.
La avenida de tu ruta es un sin fin de saberes
y recuerdos propios de cada luz viviente.
En las noches tu presencia,
es más fuerte
y en el día de tu ausencia
no alarma a nadie.
En todas las vidas has encontrado camino,
a veces ni las súplicas porque no aparezcas funcionan.
En ocasiones tu presencia
es importante y en otras innecesaria,
vuelves sentimental a esa piedra
que solo cambia cuando nadie le ve,
o te derramas por un acontecimiento
que trae consigo un glamuroso atardecer.
Tu puedes competir con la bipolaridad
porque eres capaz de cambiar un
mundo en segundos.
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Escritos
RandomAquí se encuentran algunos escritos sin un sentido concreto ni contexto amplio, que no mantienen una extensa redacción ni amplio vocabulario, ideas que surgieron de repente y sin un motivo en específico.
