desde el comienzo

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Capítulo 1. Primero

Comenzando el inicio en otra dimensión, uno de los seres que estaba a cargo del cuidado era un pequeño niño, el cual era un ángel asignado a esa nueva dimensión.
Llamado Shinezu, era joven, solo tenía 5 años, ¿se preguntarán porque alguien tan joven estaba a cargo de una dimensión? Porque había escases de personal, así que temporalmente iba a ser el "jefe" pero del vacío.

Ya que no había nada allí, le dieron la tarea de comenzar a crear cosas, así que el solo se puso a dibujar en una libreta que le había dado su padre, para anotar las ideas y pedir permiso a su superior, así que, sentándose en el vacío del lugar, comienza a pensar, aunque solo se le ocurre lo más lógico, crear los planetas y cosas que necesitan los seres vivos, basándose en la creación de la primera dimensión.

Sabe que es lo más lógico, pero va a la otra dimensión a ver a sus superiores a decirles sus ideas, aunque, tenía miedo ya que los superiores eran muy estrictos, al entrar, solo ve a todos los adultos caminar a un lado a otro apurados, algunos lo chocan, provocando que se callera, ¡el ángel que choco con el solo grito un “perdón!" Y “¡estoy apurado!", se levanta, y continua su camino llegando a la oficina de su superior o jefe, entra, viendo que el hombre estaba mirando a dirección de la ventana mientras hablaba por teléfono, al notar la presencia del joven, cuelga.

Shinezu: jefe -actuaba seriamente -

Jefe: ¿qué pasa Shinezu? -dice dándose vuelta mirándolo mientras guardaba el teléfono-

Shinezu: bueno, quería comentarle que tenía intenciones de hacer planetas con tal-es interrumpido-

Jefe: ¿¡obviamente tendrás que hacer planetas, viniste hacerme preguntas tontas niñito!? ¡No ves que mi tiempo es valioso ahora!?!?

en esos momentos Shinezu se había asustado, no esperaba que su jefe le gritase tan repentinamente, solo agacha su mirada recibiendo regaños, sabía que igual fue tonto lo que hizo, pero el solo quería informarle a su superior que hacía, una vez listo  su jefe se había calmado, él chico fue al departamento de creación, solicitando que le diesen o le enseñaran a cómo crear los planetas, solo le entregaron un libro viejo…

No dijo nada y fue tranquilo dirigiéndose a su dimensión, sin antes tomar los materiales que necesitaría, guardo todo en un bolso o bolsa reutilizable, una vez ya allí toma el libro leyendo las introducciones.

Según las intrusiones él debía toma el equipo, poniéndolo en un lugar, dejando ver una esfera transparente y un lápiz, toma el lápiz.

la segunda intrusión es que dibujase como sería el planeta, una parte difícil ya que toma algo de tiempo, pero él tenía bastante tiempo así que, comenzó a dibujar.

Luego de un rato, lo logra, creando un planeta cubierto de verde, ya que era puro bosque, igual había mar o cosas así, ya que quería que hubiese criaturas marinas, ahora tenía que lazar la esfera donde quería que se ubicase el nuevo lugar.

Lanza el ‘’planeta’’ a una zona vacía, comenzó a crecer lentamente el planeta, la esfera tomaba poder(o energía) de ángel, por eso normalmente los que tenía gran energía eran los que ayudaban con la creación de planetas, aunque el planeta casi ni superase su tamaño, ya se sentía agotado, simplemente, se sentó, al frente del planeta, mientras tomaba otra esfera y el lápiz comenzando a dibujar un sol.

sin darse cuenta, nuestro pequeño ángel se quedó dormido, aunque algunos se pregunten como lograba dormir ‘’sin caer en el espacio’’ sinceramente, es un dato desconocido hasta para mí.

se abre un portal no muy lejos de donde estaba el chico, dejando ver un ángel de unos 37 años, pero de apariencia de 19, el cual se acercó, observando como el pequeño ya estaba creando en esa joven dimensión, tomo al pequeño, llevándolo a casa.

una vez llegaron, acuesta al niño en su habitación, yendo el a la habitación que le correspondía y donde estaba la madre del pequeño, charlando con ella.

Madre : él está bien?

Padre : no te preocupes, él está bien, solo está cansado.

Madre : ¿¡cómo no!? ¡Si a un niño tan pequeño le encargaron una dimensión nueva! ¿Seguro que no podemos hacer nada?

Padre : no tenemos permitido intervenir -suspira estresado- Sabes que últimamente hay muy pocos ángeles disponibles por el tema del caso de la desaparición de ángeles guardianes.

Madre : lo sé pero… él es solo un niño!
Padres : lo sé…

Los días siguieron así, Shinezu yendo a trabajar en su dimensión, y en las noches su Madre o Padre yéndolo a buscar.
No tardó mucho en crear un sistema solar, aunque parece que se pasó en la energía que uso, ya que los planetas eran demasiado grandes, a él le costaba moverse, así que su Padre le prohibió trabajar en la dimensión por un tiempo para que se recuperase.

Shinezu sabía que era por su bien, pero el quería seguir trabajando, ahora mismo estaba en su cama acostado, sin saber qué hacer, ya que tampoco como si hubiese algo que pudiese hacer.

Aburrido, se levanta de la cama y va a ver si sus padres estaban, resulta que no, había surgido una emergencia, así que no iban a estar, aprovecha esta oportunidad y corre al patio, abriendo un portal, apareciendo en su dimensión, viendo como su planeta ya le ganaba por seguramente millones o mas de tamaño, con tranquilidad ve el sol que creo, toma el libro por si le falto algo para el planeta.

MIENTRAS TANTO….

El padre de shinezu se hallaba volando apurado donde los guardias.

papá (Jihan) : ¿!como que secuestraron a esos ángeles guardianes en frente de vuestras narices!?

guardia : lo siento señor!, no sabemos que paso, nos fuimos unos minutos, para buscar la comida, ya que nos dio hambre, lo sentimos! -dice agachando la mirada-
Jihan : no hay tiempo para arrepentirse, busquen los por todas partes, ahora! -dice mientras corría a unas grandes velocidades por la zona, terminando saltando comenzando a volar por buscar desde arriba- no pueden simplemente desaparecer de la nada! ¡Deben de estar por aquí!

madre(shin) : todos los exploradores! En orden, vamos a comenzar la búsqueda por tierra, equipo B, protejan los ángeles guardianes que van llegando, el resto, partan a la búsqueda, que dios los proteja.

en ese mismo instante todos desaparecieron yéndose en grupos para buscar a los ángeles que se habían secuestrado.