Escrito 17: Almas en paz

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Entre tantos enredados pensamientos comprendí el gran valor que tengo y la gran belleza interior que carga mi alma. No estoy para dejarme caer por nadie, y rogar por un interés que no está ahí. Quien me quiera, debe demostrarlo, no solo dejarle a las palabras el trabajo de querer. Quien me quiera, debe hacerme ver ese sentimiento, con detalles y no físicos; con detalles del alma y corazón. En donde me sienta segura, donde aquellos brazos me permitan sentir segura. Soy difícil de querer, y no debo pensar en eso como una desventaja. ¿Por qué pensar así? Si al final quien de verdad me quiera, luchará por ese cariño. Pues no soy igual a los demás, cargo en mi un libro lleno de páginas rotas junto a otras en tan perfecto estado. Quien me quiere, leerá todas las hojas, y reconstruirá las otras. Así como yo haré con las suyas. Algo mutuo y no de segunda. No soy la chica de flores, soy la chica de metas y de amor inmenso que no está lista a dar a quien sea. Pues soy un Saturno en busca de algo real y único ante los ojos de la luna. Soy un Saturno que ama que presten atención a sus pequeños detalles, que ama que elogien sus logros, que ama que cautive solo un amor. Pues lo que quiera estar a mi lado, será mío, porque si es de todos, no lo quiero.

- Con cariño, Anie

Con cariño, Anie🍁Donde viven las historias. Descúbrelo ahora