Se encontraba en un salón de belleza, llevando a cabo su sesión mensual de baño especial, corte de pelo, peinado y arreglo de uñas, no iba a ser nada difícil y no sentía que pudiera aburrirse, al menos no como siempre lo hacía al tener que pasar ahí horas y horas sentada y sin poder moverse o incluso hablar, ese día ella tenía muchas cosas en la cabeza para poder quejarse de lo tardado que era su tratamiento de belleza, o más bien a alguien de quien no podía evitar pensar, le estaba dando vueltas a todo lo que ella sabía y pensaba de esa persona.
Ella se guardaba todos estos pensamientos para sí misma, y de hecho no sentía que pudiera compartir esto con nadie, nunca lo haría por temor a lo que le dijeran, pues ella sabía mejor que nadie, que una vez que todo el mundo lo supiera, la gente podría empezar a hablar mal de ella a sus espaldas, pero que era exactamente lo que estaba ocultando sobre esa persona?
Pues ella había quedado perdidamente enamorada de él, porque sentía que él no era como ningún otro hombre que le haya cortejado antes, ella sentía una atracción y una sensación de amor a primera vista desde la última vez que lo vio, su nombre...
Era Balto Ella al inicio intentó negarse lo que sentía a sí misma, pues todo lo que su familia le había dicho sobre él o sobre ese tipo de personas es que no son de confiar y que podrían atacarte a traición en cualquier momento, esperando la más mínima distracción, pero ella no creía en ninguna de estas cosas e incluso quería ver lo primero que pudo notar en el:su corazón tranquilo, su actitud pacífica y tierna, y... Su.... Apariencia....
Ni ella misma hubiese querido aceptarlo, pero aunque lo hiciera sabía perfectamente que se estaría mintiendo así misma, porque lo cierto era que ella lo encontraba muy apuesto, tal vez incluso resultaría que podría tener debilidad por los perros de ese clase, y sólo había decidido callar para evitar malos pensamientos por parte de los demás.
Ella creía que Balto era fuerte, guapo y muy dulce, al menos esos eran los pensamientos que ella tenía por el, y en ese momento pasó...
Balto se encontraba pasando por la instalación de belleza en la que Dixie se encontraba y lo pudo ver por la ventana, ella se paralizó por completo ahora si, al momento de verlo rondar ese lugar, era demasiada tensión para ella pero no hiba a quedarse solo ahí parada, quería llamarlo pero se sentía impotente, quería ir a alcanzarlo, pero sabía que no la dejarían moverse de donde estaba.
Ella no sabía que hacer y sentía que la mataba el no poder hablar con él sin ser mal vista por los demás :
Esto ya no será así por más tiempo, no mi precioso “Poopsie”, un día de estos, te haré venir a mi y te haré mio, me lo agradeceras pues conmigo finalmente tendrás una vida de ensueño.
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Balto Encuentra Un Harem.
FanfictionEn este mundo y en esta vida no sabes nunca y mucho menos con seguridad que cosas, experiencias, sucesos o allazgos que vendrán a uno, y a Balto por supuesto que eso le quedó muy claro, puesto que el jamás en la suya se esparia que sin poderlo haber...