La balada de los espíritus

Capítulo Único

Geralt estaba viendo a lo lejos tratando de ignorar lo mas posible al bardo a su lado que no dejaba de platicar, hacer preguntas y cantar, lo que era algo habitual en el pero hoy estaba particularmente más parlanchín que de costumbre, Geralt pensaba que eso era debido a que tan solo ayer se divirtió tocando para los clientes en la taberna y habían disfrutado de una buena comida y cerveza, así como poder relajarse en sus habitaciones después de un mes de haber estado fuera, pero su tranquilidad no duro mucho, al día siguiente un hombre de mediana edad con rastros de barba y cabello castaño ondulado con unos inquietantes ojos grises se había acercado a ellos pidiéndole a Geralt ayuda con el demonio que amenazaba al pueblo, Geralt había pedido más detalles y que si alguien más estaba enterado ya que para ser un demonio los demás estaban muy tranquilos, el hombre les dijo que los de la aldea no sabían de su existencia pero en el momento en que lo supieran ya sería demasiado tarde para ellos y morirían, después de darle detalle sobre su localización y la información básica del demonio Geralt había partido en busca de rastros sin tener éxito alguno, cuando regreso a la taberna esa tarde un grupo de aldeanos se le acerco para pedir que matara a la bruja que acechaba en el bosque con un grupo numeroso de perros demonio, así que Geralt no tenía solo que matar a un demonio si no que también a los perros de la bruja, o al menos hacer que se alejaran de ahí ya que hasta ahora no habían hecho nada, parecía que los humanos solo querían deshacerse de lo diferente de nuevo, y Jaskier aunque a su pesar ya que no quería que lo acompañará insistió por varias horas en lo que Geralt se preparaba diciéndole que el no daba suficientes detalles y no había forma de que pudiera escribir más canciones si no iba él a presenciar esa pelea.
Así que aquí estaban ahora, caminando en medio del bosque mientras Jaskier no guardaba silencio y Geralt trataba de oír, aunque sea su respiración, después de unos momentos más de plática Jaskier se queda callado de pronto.

- ¿Escuchas eso Geralt? -

-Si guardaras más silencio podría oír mejor pero sí, lo escucho- dice Geralt bajándose de Roach sacando su espada, a lo lejos se podía oír un cantico, una voz dulce que cantaba una suave melodía, era armonioso y al mismo tiempo tenía un toque de dolor, de pena, de tristeza algo que anunciaba muerte y vida al mismo tiempo.

- ¿No hay sirenas en los bosques verdad? -dice Jaskier caminando siguiendo el sonido de esa voz-por que parece que estoy escuchando una en este momento-

-Quédate detrás de mí y no hagas ruido, debemos averiguar que es eso, no te separes bardo-dice Geralt sacando su espada de acero acercándose a la voz abriéndose paso entre los árboles hasta visualizar un gran espacio en el bosque, donde había una cascada que se transformaba en un lago, rodeado de arboles frutales, con varios pájaros haciendo ruido y se podían incluso ver los animales que habitaban en los árboles moviéndose pero a pesar de la belleza propia del lugar, lo más remarcable era la silueta de una mujer desnuda que estaba en medio de la cascada, ella era la que cantaba, no era una mujer normal, era hermosa, más de lo que Geralt había podido ver nunca, tenia unas caderas anchas, unos pechos voluminosos, un vientre plano, las piernas torneadas y largas, sus brazos eran largos y delgados y terminaban en unas manos delgadas, su cabello era como la cascada propia, de un color platino-azulado que parecía asemejar el movimiento del agua, cuando la mujer se volteó a verlos Geralt contuvo la respiración al ver su rostro, era aún más hermoso de lo que pensaba, era perfectamente simétrico, con una nariz pequeña y puntiaguda, unos labios rosados, carnosos y pequeños y sus ojos, debajo de sus largas pestañas negras estaban unos orbes grises igual de inquietantes que los del hombre de la taberna.
-Wow, quien es ella-murmuro Jaskier anonadado por la belleza de la fémina tratando de acercarse más cuando Geralt estira un brazo para detenerlo
-No queremos molestarla-hace una pequeña pausa-no creo que sea humana bardo-

-No, no lo soy- dice la mujer con una pequeña sonrisa apareciendo en su rostro etéreo

- ¿Qué eres entonces? -pregunta Jaskier sin poder contener su curiosidad

-La pregunta es quien no soy pequeño bardo- dice la mujer acercándose a ellos saliendo del agua sin importarle su desnudes, cuando se encuentra a un metro de distancia se detiene viéndolos fijamente, de nuevo esos ojos inquietaron a Geralt, eran demasiado inexpresivos y a la vez parecían transmitir mil emociones.

-Es una compañía interesante brujo-dice la mujer sonriendo suavemente

-Sabes lo que soy- dice Geralt más como una afirmación provocando el asentimiento de la mujer-creo que me parece justo que nos digas quien eres si dices conocernos-

La mujer sonríe suavemente antes de alejarse de nuevo sentándose en una roca y dándoles la espalda.

-Mi nombre es Jaeyin- dice sin mirar a algo realmente- soy un espíritu si es lo que querían saber-

- ¿Un espíritu? -pregunta Jaskier frunciendo el ceño-eso no esta en los libros de los monstruos, ni en ningún libro en realidad, ¿segura que no nos estás mintiendo? -dice Jaskier frunciendo aún más el ceño y cruzándose de brazos, la pregunta ocasiona una sonrisa en la mujer.

-Puedes estar seguro pequeño bardo que no les estoy mintiendo, los espíritus no son creaturas que estén registradas por los humanos por que no nos dejamos ver o por que nos confunden a menudo con otras criaturas, tampoco es como que sintamos necesidad de presentarnos ante los humanos-

-Entonces, eres un espíritu, pero ¿porque estás aquí? -

-Bueno la pregunta en realidad es porque están ustedes aquí, después de todo esta cascada es mi hogar- dice la mujer sin inmutarse

-Nos mandaron a cazar a la bruja y al demonio del bosque-dice Jaskier mientras se acercaba a la mujer sentándose a su lado y viéndola fijamente

-Ya veo…pensé que mi existencia no había sido notada-dice la mujer en un tono tranquilo, de nuevo con un tono imperturbable pero aun así Geralt pudo notar la tensión en sus hombros, la tormenta que ocurrió por un momento en sus ojos antes de que desapareciera.

-También nos dijeron que había unos perros demonio-dice Geralt con frialdad viendo a la mujer y frunce el ceño extrañado con su reacción cuando ella sonríe

-Oh ya veo, entonces me descubrieron por los protectores de mi hogar- dice con una sonrisa antes de soltar un silbido y es cuando Geralt escucha varias pisadas corriendo, así como los gruñidos y saca su espada en un movimiento rápido para matar a los perros cuando la mujer se pone de pie recibiendo el golpe con la espada y quitándosela de la mano

-No vuelvas a hacer eso de nuevo brujo- dice en un tono frío manteniendo una expresión neutra mientras tomaba la espada llevándosela sin inmutarse por la herida que ya no estaba ahí y sorprendiendo a Geralt no solo por sus habilidades curativas, si no por cómo podía cargar la espada sin inmutarse por su peso como los demás hombres, ¿Qué tan fuertes eran los espíritus?

-Los perros son mis amigos- dice la mujer clavando la espada en el suelo calmando a los perros con una mirada y arrodillándose y sorprendiendo una vez más a Geralt cuando ve a los perros lamerla y jugar con ella-los perros no son peligrosos si su amo no es peligroso-dice de nuevo la mujer viendo a Geralt y al bardo que tenía una mirada de miedo hacia los perros-los perros solo se defienden si sienten que su amo esta en peligro, así que no hagas de nuevo eso brujo o yo no los detendré de atacarte-dice seria antes de ponerse de pie
-Bien, no les hare daño, pero tienen que alejarse de aquí, pones a los humanos nerviosos y si ellos están así no será mucho el tiempo que tarden antes de que quieran matarlos y a ti con ellos-dice Geralt serio

-No puedo irme de aquí brujo, pero no creo que lo entiendas-dice el espíritu y su rostro adquiere un semblante triste.

-Entonces ayúdanos a entender-dice el bardo poniéndose de pie tomando la mano de la mujer, era un tacto suave y muy frío, como si no tuviera vida, la mujer suelta un suspiro viendo a otro lado

-Es una larga historia-

-tenemos tiempo-dice Jaskier antes de sentarse de nuevo frente a ella ocasionando una pequeña sonrisa en la mujer que asiente y se sienta frente a ellos.

-bien, entonces presten atención y si quieren repartir la información espero que sepan a quien lo hacen, no todos deben saber-Dice tomando un semblante mas serio antes de sentarse enfrente del bardo, Geralt soltando un gruñido incomodo se sentó también no sin mantener vigilados a los perros que estaban jugando entre ellos como si fueran unos cachorros normales.

-muy bien, pues primero deben comprender a los espíritus, los espíritus somos entes diferentes a todo lo que conozcan, somos tan viejos como la tierra misma, nosotros creemos que somos los hijos de los dioses nacidos en la tierra, pero en realidad no tenemos una certeza como tal, lo que si sabemos es que cada uno tiene un don, o lo creo pero con eso mantenemos el equilibrio, a algunos les toca el don del agua, a otro el don de los olores, a otro el de el mar, a otro el de las criaturas marinas, somos muchos tipos de espíritus, pero no hay muchos de nosotros en este momento, en mi caso yo soy un espíritu del bosque, cuido este bosque y lo mantengo con vida, soy la responsable de que después del invierno las flores vuelvan a salir, que los animales dejen de hibernar, que los peces regresen a los ríos, que los árboles crezcan y rieguen sus frutos, yo mantengo vivo este bosque-Dice y suelta un suspiro triste y pesado

-Yo los vi nacer a todos y cada uno de los que pasan por aquí, vi a Geralt cuando fue en contra de un dragón, lo vi cuando iba con su madre en camino a convertirse en brujo, vi al primer brujo, vi construirse al primer reino, a la primera aldea, todo, vi a los elfos prosperar y aprender a convivir con la naturaleza y luego los vi ser masacrados por los humanos, al igual que vi extinguirse a muchas especies por la estupidez humana que no sabe convivir con la naturaleza-hace una pequeña pausa-como les digo vi todo, los espíritus fuimos creados desde el inicio de los tiempos y… obviamente aunque vivimos mucho tiempo no somos inmortales y no todos tenemos la misma fuerza, eso depende de lo que somos, de lo que cuidamos… yo.. Mi esposo o ex esposo es el espíritu de los humanos, al principio los espíritus estuvimos dudosos, y pensamos que era una aberración que los escogiera, créeme que yo también dude que los humanos lograrían vivir tanto tiempo y prosperar, así que al principio era un espíritu débil, pero después de un tiempo los humanos… no sé cómo le hicieron pero empezaron a crear grandes aldeas, edificios, ciudades enteras, y se hizo más poderoso, es el espíritu más poderoso o uno de los más poderosos-susurra suavemente-yo antes también lo era, mi bosque era más grande, era extenso, frondoso, lleno de vida… y los humanos me lo fueron arrebatado, cortando mis árboles, matando mis animales, destruyendo todo para hacer sus aldeas, a diferencia de los elfos que me agradan mas por que ellos si saben respetar la naturaleza, claro eso antes de que los humanos los masacraran-dice rodando sus ojos en una expresión molesta gracias a lo que estaba narrando.

-Okey, entonces eso son los espíritus- dice Jaskier viendo a la mujer ladeando su cabeza con curiosidad -si son tan importantes para nosotros, por que no se habían presentado antes, digo, creo que es importante conocerlos si ustedes mantienen todo este lugar-

-Por que hemos visto de lo que son capaces los humanos de hacer contra cosas que no conocen, ni siquiera el espíritu de los humanos es tan tonto como para presentarse a ellos-

-Dijiste que el espíritu de los humanos es tu esposo, o ex esposo…puedo preguntar que sucedió ahí- dice Geralt viendo fijamente a la mujer haciendo que esta suelte un suspiro y sus ojos pierdan algo de su brillo.

-Sí, mi esposo, también llamado Salang, es el espíritu de los humanos, el básicamente hace que los humanos sientan el amor, que puedan prosperar, que les llegue la inspiración para hacer historias, canciones, para hacer medicinas, es en parte responsable de la expansión que los humanos lograron, yo…bueno es una historia larga, así que la voy a resumir, lo conocí cuando un grupo de humanos trato de matar mi bosque por completo, obviamente me enoje y los iba a matar cuando el apareció y me lo impidió, me dijo que los dejara, que mejor les enseñara como a los elfos como aprovechar la naturaleza, al principio estaba renuente, pero cuando vi a los humanos y estos empezaron a sentir, a sonreír, a hacer arte y cosas hermosas…acepte, y me gustaron los humanos, les brinde de mis recursos para construir sus aldeas, siempre mantuve abundante de comida el bosque y los lagos para que pudieran subsistir y con todo este amor a los humanos y todo lo que compartía en secreto con Salang…me enamore, nos enamoramos, nos casamos y tuvimos una pequeña hija, se llamaba Yelan, apenas era muy joven, unos doscientos años para ustedes pero apenas había cumplido los 4 años para un espíritu, aun estaba en crecimiento y yo quise enseñarle como ser espíritu, así que en una parte de mi bosque antes de llegar a la aldea de los humanos, mi hija hizo su corazón, un lago, era hermoso, ella tenía un don nato con los animales, así que pensé que sería un espíritu animal, era nuestro pequeño orgullo, además de que es muy difícil para los espíritus formar una familia, fueron las épocas más felices…pero eso no pudo durar mi hija creció con el amor a los humanos por su padre y tenia curiosidad de conocerlos, así que se apareció ante ellos para jugar con los niños, en un descuido nuestro ella se perdió de nuestra vida y trajo a los niños y algunos de sus padres al lago y les demostró lo que podía hacer, los humanos se asustaron y uno fue a dar aviso a los demás de que mi hija era una bruja según ellos, como aun era pequeña no sabía que pasaba, los humanos fueron y trataron de matarla pero mi hija no moría ya que era un espíritu, eso los asusto aun más, cuando me entere era demasiado tarde, yo estaba lejos, le había encargado a Salang cuidar de nuestra hija ya que tenía que reparar una parte del bosque, fui lo más rápido que pude pero mi hija estaba muy asustada no sabia que pasaba, los humanos la amarraron a un árbol y quemaron el bosque donde ella estaba, miedosos, trate de sacarla de ahí pero el fuego consumió su corazón, el lago que hizo, el lugar donde ella puso su corazón…desapareció, hay algo que deben de saber para entenderlo, los espíritus como tal seríamos inmortales mientras la parte que cuidamos siga viva, pero hay una en especial, la que llamamos nosotros nuestro corazón. El corazón es el lugar que elegimos para concentrar nuestra magia, nuestra esencia, esta cascada es el mío, y ese lago era el de mi hija, nosotros nos debilitamos si destruyen parte de nuestro dominio pero no moriremos mientras no destruyan nuestro corazón, en cambio si lo destruyen aunque aun haya otras partes de nosotros no podemos vivir y nos desvanecemos…y eso paso con mi hija, destruyeron su corazón y ella desapareció- el espíritu suelta un sollozo, ellos sentían para sorpresa de Geralt, y sentían demasiado, a pesar de lo etéreos y lo indiferentes que parecían ser del mundo, sentían como cualquier otro.

-Y… ¿Qué pasa cuando desaparecen? -Pregunto Jaskier cauteloso; la mujer soltó un suspiro secando sus lagrimas

-Cuando desaparecemos nuestra magia se va del bosque, todo lo que lo mantiene vivo somos nosotros, no habrá nuevos árboles, ni nuevas plantas, los animales dejaran de venir, dejaran de sentir, morirán con el tiempo al igual que el lugar y todo esto estará muerto no habrá nada que lo reviva ni siquiera otro espíritu, y créanme los espíritus no se esforzaran en tratar de reanimar donde falleció otro, es como su tumba-murmura la mujer suavemente abrazándose a si misma

-Entonces los espíritus deben de seguir vivos si los humanos no quieren morir, ni siquiera tu esposo puede mantenerlos vivos de eso-

-no, no puede-

- ¿Y por qué no trato de detenerlos con lo de tu hija? -

-Trato…estoy segura de eso, el trato de hablar con ellos de hacerlos razonar, su amor por los humanos no le deja hacer nada en contra de ellos-

-Entonces, si no es indiscreción, ¿Por qué se separaron? -pregunta Jaskier sin poder contener su curiosidad sobre la historia del espíritu.

La mujer suelta un suspiro antes de hablar -yo estaba muy molesta con los humanos, quería matarlos y hacerlos arrepentirse de la muerte de mi hija, pero mi esposo, el aun los defendía yo no pude soportarlo, me sentía traicionada, así que lo deje y estoy segura que el les mando por el demonio del bosque-

- ¿Cómo sabes del demonio? -Dice Geralt viéndola fijamente

-oh brujo, esta destruyendo mi bosque en este momento, es obvio que se que hay un demonio y es obvio que mi esposo pediría misericordia por los humanos-dice Jaeyin

-Bueno, si lo sabes por que no haces nada para defenderte, creo que un espíritu puede contra un demonio-

-estoy muy débil, desde la muerte de mi hija…yo perdí mis ganas, ya no llevo el mismo ritmo para renovar el bosque y los humanos cada vez toman mas y mas y no puedo manejarlo, solo me queda mi corazón-dice con tristeza-no podría contra el demonio yo sola…pero puedo guiarlos a él, con la condición de que traigan a mi esposo, el podrá ayudarte con el demonio brujo, es un demonio fuerte, lo único que lograras si vas ahora es que te maten a ti y a tu querido bardo.

-Bien, lo buscaremos- dice Geralt poniéndose de pie viendo a Jaskier y tomándolo de la ropa jalándolo para pararse e irse de ahí, en cuanto llegaron donde estaba Roach amarrada Geralt pudo oír a lo lejos los llantos de Jaeyin.


———————————————


Cuando llegaron a la aldea fue lo típico, la mala mirada de los aldeanos, pero hubo una a lo lejos que Geralt percibió y estaba seguro ahora de quien era, así que caminó directo hacia el para hablar seriamente.

-espíritu Salang- dijo como saludo sorprendiendo al hombre que le miro con curiosidad

- ¿Cómo sabes quién soy? - pregunto viéndole fijamente

-Tu esposa me lo dijo-

-Jaeyin…- susurro el hombre mirando hacia el bosque como si pudiera ver a su esposa saliendo de el - ¿Cómo esta ella? ¿Está herida? -Dijo con preocupación

-Esta…bien en lo que se puede decir, pero solicita que vayas con nosotros para enfrentar al demonio-

El hombre suelta un suspiro y asiente -todo sea por verla de nuevo, ella me exilió del bosque cuando mataron a nuestra hija- dijo el hombre viendo al suelo triste-a veces me arrepiento de no ir con ella, los humanos cada vez son peores-dice con pesar- ya no me dan ganas de defenderlos y no puedo hacer nada para evitar que lastimen a Jaeyin-

-pues deberías hacer algo- dice Geralt serio- antes de que te arrepientas de no hacer nada- dice antes de darse la vuelta dejando al espíritu atrás en silencio.


———————————————


-Jaeyin- susurro el espíritu acercándose a su esposa cuando la visualizo en la cascada -te he extrañado tanto- dice y sin poder contenerse la abrazo con fuerza -siempre tengo miedo de que un día voltee al bosque y ya no estés-

-Oh Salang- susurra suavemente la mujer acariciando su cabeza -tu elegiste que así pasara- susurra suavemente y levanta su cabeza acariciando sus mejillas, pero también te extrañe, aunque aún sigo enojada contigo-

-Lo sé y lo siento, yo enserio he querido hacer algo, pero no sé cómo, te necesito Jaeyin, por favor…dame otra oportunidad, ahora que me dejaste verte de nuevo no te quiero perder, por favor- dice el espíritu poniéndose de rodillas besando las manos de la mujer -Por favor, déjame protegerte, cada vez estás más débil, por favor-

La mujer suelta un suspiro y se arrodilla enfrente del espíritu -esta bien, pero solo una y es tu ultima oportunidad, no lo arruines-

-Lo prometo, no lo arruinare esta vez- dice Salang con una mirada seria y viendo fijamente a Jaeyin, no le fallaría una segunda vez.


———————————————


-Bien aquí es- dice Jaeyin escondiéndose detrás de unos arboles para que el demonio no los detectara

-bien, entonces que esperamos, le mostraremos que tus bosques no son un patio de juegos y debe volver al lugar que pertenece- dice el espíritu tomando la mano de su esposa dándole una suave sonrisa

-Jaskier, ya que decidiste estúpidamente venir, quédate alejado y corre si vez que no podremos contra el- dice Geralt antes de tomar uno de sus elixires y salir a pelear.

———————————————

Geralt soltó un quejido cuando su cuerpo impacto contra un árbol por tercera vez consecutiva, aunque el elixir aun estaba activo podía sentir como su efecto estaba disminuyendo, el demonio era demasiado fuerte, incluso para los espíritus que le estaban ayudando.


Jaeyin suelta un quejido cuando el demonio entierra su brazo en el abdomen de ella y se aferra con fuerza al demonio para detenerlo y que su esposo le de un buen golpe en la cabeza tratando de tirarlo al suelo
-buen trabajo Jae, creo que mejoraste en tu estilo desde la ultima vez que nos vimos, ahora solo fuiste atravesada una vez en lugar de cinco- dice su esposo a modo de burla a lo que ella le enseña la lengua antes de golpear al demonio nuevamente

Geralt enterró su espada de plata y la de acero en el demonio, a pesar de que solo lo dañaba una, la otra al menos le sería una molestia, saca sus espadas antes de esquivar otro golpe que venía del demonio y dejando que Jaeyin lo atacara con varias ramas de los arboles y que Salang le enterrara una daga en el vientre, aunque para su desgracia, esto solo empeoro la situación, el demonio enfurecido y queriendo sobrevivir un poco más lanzo una explosión de fuego que empezó a consumir el bosque
- ¡Corran! -grito Jaeyin tomando a su esposo antes de correr, y tratar de ayudar a Geralt y Jaskier a escapar del fuego, este no era un fuego normal, era fuego infernal, no se podía apagar con la misma facilidad y les hacía daño a los espíritus si los tocaba.

———————————————

Al llegar a la cascada Jaeyin estaba agotada, demasiado bosque estaba siendo carbonizado y podía sentir como su cuerpo se debilitaba, sus rodillas flaquearon y cayó al suelo

-Jaeyin- grito su esposo preocupado acercándose a ella tomándola con cuidado -oh no…ya veras que todo va a mejorar, sé que estas consumiéndote rápido, pero lograras salir de esta, protegeremos tu corazón y podrás vivir- dijo Salang acariciando la mejilla de su mujer -lo lograremos, ¿está bien Jae? -

-Lo lograremos-

-Juntos-

———————————————

No lo estaban logrando, el demonio había llegado a la cascada para acabar con la amenaza, los perros se habían lanzado contra el demonio para defender a su amo y Geralt y Salang se habían lanzado a pelear nuevamente, Jaeyin se había quedado con Jaskier ya que estaba muy débil para pelear

-No lo van a lograr- susurro Jaeyin al ver como sus perros estaban siendo masacrados, como los movimientos de Geralt se hacían cada vez más lentos y el color rojo se filtraba rápidamente en su ropa y finalmente, como su pareja estaba mostrando ya signos de cansancio y ahora solo estaba recibiendo más golpes de los que daba, el demonio tampoco las estaba teniendo fácil, se veía que era más lento, que ya estaba escurriendo su sangre negra viscosa, que ya se estaba muriendo…y eso lo hacía más desesperado y más peligroso.

-Claro que lo van a lograr, no pienses negativo-dijo Jaskier, aunque no estaba muy seguro de sus palabras

-tengo que hacer algo- susurro Jaeyin y se puso de pie

- ¿Qu-qué estás haciendo? -dijo Jaskier asustado de lo que pensaba hacer el espíritu

-Salvar el trasero de esos dos- murmuro antes de salir corriendo rápidamente soltando un grito de guerra abalanzándose sobre el demonio

- ¡Jaeyin no! -grito Salang al saber las intenciones de su esposa antes de que un brillo blanco lo cegara y lo mandara volando estrellándose contra un árbol

———————————————


Cuando Geralt abrió sus ojos había un humo blanco espeso en el claro donde estaban, se puso de pie y uso su oído para guiarse a donde estaba Jaskier, se acerco adolorido conteniendo los quejidos y tomo a Jaskier con cuidado que estaba enterrado debajo de unas ramitas

- ¿Estas bien? -pregunto Jaskier haciendo una mueca cuando se puso de pie- ¿Dónde está Jaeyin y Salang? Pregunto Jaskier cuando el ruido de unos sollozos los hizo voltear, enfrente ellos estaba Salang sosteniendo el cuerpo de su esposa mientras esta le sonreía con tristeza

-Prometiste darme una segunda oportunidad, no puedes irte ahora- dijo Salang con tristeza tomando la mano de su esposa soltando lagrimas que caían sobre las mejillas de Jaeyin
-Tenía que salvarte- susurro Jaeyin suavemente-estarás bien sin mi Salang…siempre estaré contigo y siempre te amare, ahora estaré con nuestra hija y te estaremos esperando-

-Esperare el momento…para estar con ustedes-susurro Salang antes de que el cuerpo de su esposa se desapareciera en el aire, el espíritu sin poder contener su dolor soltó un grito desesperado acompañado de varios sollozos

-Cumpliste tu trato brujo- dijo Salang cuando termino de gritar-puedes irte ahora, tu paga la deje en la posada-

Geralt asintió en silencio y se llevo al bardo de ahí recogiendo su paga y caminando alejándose de la aldea y de ese bosque, en la siguiente parte de su camino Geralt y Jaskier se separaron, en los años siguientes Geralt paso una vez buscando la aldea donde estaban los espíritus cuando vio que tanto el bosque como la aldea eran lugares destruidos, siguió su camino sin querer saber más, aunque no pudo evitar escuchar, en cada lado que pasaba una nueva aventura cantada de Geralt de Rivia, acerca de dos espíritus que se amaban profundamente y que el mundo separó eternamente, una canción que se llamaba…la balada de los espíritus.