𝐒𝐀𝐍𝐈𝐓𝐘 𝐈𝐍 𝐋𝐎𝐕𝐄 [Yᴀᴋᴋᴏ Wᴀʀɴᴇʀ×Lᴇᴄᴛᴏʀᴀ]

𝐒𝐞𝐠𝐦𝐞𝐧𝐭𝐨 3.

[P. O. V Narrador omnisciente]:

Abrió lentamente los ojos, se encontraba acostada en una camilla con una manta que la cubría.

Le dolía la cabeza, era un dolor horrible, incluso llegó a tener la sensación de vomitar, fácilmente podría decir que en cualquier momento sus extremidades fallarían y caería de nuevo de espaldas, pero logró mantenerse.

A su lado habían bocetos tachados, con círculos enormes, tinta regada y modelos de sonrisas y posturas.

Bajó la mirada para observar sus manos, enguantadas con los clásicos guantes. Se levantó de la camilla mientras captaba con la mirada un par de papeles regados en una mesa pequeña.

Efectivamente, el escrito tenía un boceto viejo y medio roto, algo empolvado. Al lado de este se hallaba otro boceto, este era nuevo, se le notaba varios borrones.

Ambos eran de ella.

En el primero su imagen era más infantil y sonriente, en el segundo su apariencia se asemejaba más a la de una adolescente, ya no tenía una sonrisa.

Dejó los papeles en su lugar y caminó lentamente hacia la puerta de la habitación.

Por algún motivo, se enfureció al ver la puerta cerrada, una combinación agria en su boca. Tenía tantas ganas de arrancar a golpes ese pedazo de madera y escapar de ahí.

Se sentía controlada por la irá, y ni siquiera sabía porque, solo quería salir.

Perdía poco a poco las fuerzas, su respiración se acababa, como si tuviera una soga en el cuello asfixiandole.

Sostuvo su pecho, conteniendo se de gritar de tanta irritación. Tragó saliva calmando un poco sus nervios, frunció el ceño para después volver su vista hacía una mesa en la esquina de la habitación.

Detuvo su mirada en un pequeño cuchillo sobre está. Bingo.

Sin dudarlo lo tomó y comenzó a apuñalar la puerta, acto seguido logró formar un pequeño agujero donde deslizó su mano para intentar alcanzar el picaporte del otro lado.

Hasta que finalmente logró dar con este, lo giro y sacó su mano en el acto. Empujó la puerta observando el pasillo frente a ella.

Caminó lentamente, luego esos pasos se volvieron más rápidos a tal punto de terminar corriendo.

Se sentía perseguida, solamente se dejaba llevar por el impulso de huir.

Frenó al escuchar voces que venían hacia su dirección, con temor volvió a prender carrera lejos. Esas voces...eran conocidas.

¿Por qué? ¿Por qué huía?

¿Por qué teme?

.....¿A qué le teme?....

Sintió eterno lograr salir de ahí pero lo consiguió, estaba a las afueras de ese pequeño set. El sol brillaba intensamente por lo que se descolocó al recibir el potente brillo del astro.

Con cansancio prosiguió a seguir intentando caminar.

- Uff... qué calor. - se quejó posando una mano en su frente, subió la mirada para encontrarse con...¿Qué? ¿Una ola?...Una ola... que viene ¡Hacia ella!