La madrugada del 16 de septiembre de 1810, cuando el padre Miguel Hidalgo da el llamado "Grito de Dolores" y termina el 27 de septiembre de 1821 (11 años después) con la entrada triunfal del Ejército Trigarante...
Blah blah blah
Poner atención. Dos simples palabras que cualquiera acataría, yo no, debo decir. Poner atención en clase de historia puede ser sumamente tedioso para algunos, por ejemplo, yo.
—Oye Ana—llame la atención de mi mejor amiga
—¿Que sucede?—respondió sin dejar de escribir lo que el profesor estaba diciendo
—¿Que vamos a comer hoy?—pregunte en un susurró
—¿De verdad estas pensando en comida?—dejo su cuaderno aun lado y me miró con notable molestia—deberias de estar escribiendo lo que el profesor esta diciendo
—La independencia de México es algo que te enseñan desde preescolar, era como un cuento para antes de dormir cuando era pequeña
—Bueno, a la mayoría de niños que tuvo padres normales les contaban cosas de princesas o piratas, no dormíamos con la historia de México—infle los cachetes ante sus palabras
Bien, tenia razón en que mis padres extrañamente se habian enfocado en hablarnos de la historia del país a mis hermanas y a mi cuando eramos niñas, pero no me gustaba oír como otros niños tuvieron una infancia un tanto mejor que la mía.
—Señoritas, ¿Tienen algo que compartir con la clase?—mire al profesor frente nuestro
—Solo hablabamos de lo maravillosa que es su clase profesor—sonreí
—Ponga atención Ramírez—sentencio y volvió a su escritorio cuando escuchamos el timbre sonar por toda la escuela—recuerden que tienen tarea para la próxima clase, la calificación que saquen dependerá su promedio, tengan buen día chicos—tomo sus cosas y salió del salón antes que todos
—Casi nos metemos en un problema por tus insaciables tripas—la mire
—Tampoco es para tanto—tome mis cosas y salí del salon
—¿Que no es para tanto?—me siguió
—No hubo consecuencias graves, asi que no tiene gran importancia, son cosas que pasan—respondí—ahora vamos, muero de hambre
—Eres un caso perdido—murmuro
Al finalizar el día me despedí de mi mejor amiga y tomé caminó hacia mi casa, vivía a unas cuantas cuadras de la preparatoria asi que no me tomaría mucho tiempo llegar.
Al doblar la esquina pude notar la calle repleta de coches lujosos y demasiadas personas vestidas de traje me miraban mientras me acercaba a casa. Me encogí un poco y me apresuré a entrar a la casa.
—Mamá, ¿Por que hay tanto hombres afuera?—gire mi cabeza para poder ver a mi madre frente al televisor como era costumbre, pero esta vez no estaba sola—¿Buenas tardes?—salude al notar a cuatro hombres en traje acompañando a mi madre
—Emma—mire a mi padre saliendo de la cocina—es bueno que hayas llegado, ven, tenemos algo que decirte
—¿Que pasa?—avance hacia mis padres
—Toma asiento cariño—mi madre me tomo de la mano y me guío hacia el sofa—estos señores te lo explicaran todo
—Es un placer para mi conocerla oficialmente señorita Ramírez—mire hablar al hombre que suponía era de mayor edad entre los visitantes—aunque tal vez tengo que decir, que es un placer conocerla oficialmente alteza.
Tal vez perdí todo el aire cuando lo escuché llamarme asi, o tal vez fue por que los demás me llamaron igual mientras me hacían una reverencia...
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•Realeza en México•
Novela JuvenilQuerida Emma, sé que ahora estas desconcertada por la noticia de tú futuro mandato, y sé lo devastada que debes estar al saber que tus sueños no lograran cumplirse. Pero debes poner de lado esos sentimientos para cumplir con tu deber, tu gente neces...