La Otra Cara

Capitulo 9. Kellan

Esta mañana me levanté un poco impaciente, debo decir. 

Me bañe y me vestí lo más rápido que pude, quería hablar con May antes de que las clases se iniciaran. Mi error, para empezar, fue que el mundo justo hoy estaba en mi contra.

Estuve esperando largo tiempo en el auto a que Sofia saliera pero cual fue mi sorpresa cuando el chofer Matt me dijo que ella no iría hoy a la escuela. Casi nunca faltábamos, no tenemos ese privilegio, por lo que el hecho de que Sofía se quedara debía de ser por algo importante.

Ahora con ese atraso sobra decir que llegué bastante justo de tiempo al salon, asi que no, no he podido hablar con May.

—Hey tu nunca llegas tarde ¿Se puede saber qué sucedió?— ese fue Brent el hablador de la clase y a quién habían sentado junto a mí en esta clase.

Solía sentarme con Bart, él es lo más parecido que tengo a un mejor amigo pero ahora se sienta dos lugares atrás de mi y eso significa que cada vez que quiero voltear a hablarle se cruza siempre la cara de Kenzi.

—Nada, mi hermana al parecer se quedó dormida —no creía en realidad que eso hubiera pasado pero ya lo averiguaria más tarde.

—Genial, yo quisiera no tener que venir nunca más, pero no puedo, incluso la vez que fingí estar enfermo mi papá me obligó a venir...supongo que en algún momento se dio cuenta que en realidad lo estaba engañando. En cambio mi hermano pequeño Sam se ve qué se divierte en sus clases ya lo conoces ¿no? creo que en la feria del año pasado se los había presentado.

Creo que no lo conozco pero no quería que me explicara — Claro.

—Pues yo creo que es un suertudo, lo único que hace en su escuela es aprenderse los colores, y aun asi luego cuando se sienta con mi padre a hacer la tarea llora y llora— movió la cabeza de un lado a otro. Sacó sus cuadernos de  su mochila —Me sentaron junto a ti por que me va mal en mates y tú eres muy listo ¿Verdad?

—Hmm...supongo —necesito un poco de tranquilidad para pensar en algún plan.

—Cómo que supones, pues ya te lo digo, sino porque estaría sentado aquí— esa era una gran pregunta.—Pero no te preocupes no hago trampa en los exámenes así que un mirón no soy.

—Vaya me alegra saberlo—aunque no lo creía cierto, pero eso explicaría sus notas.

Después de un minuto cuando ya no recibo respuesta y creo que se ha callado saco mis libros con tranquilidad. Cuando

—Oye sabes que —¡Ay¡ no por favor. Resoplo algo harto—mis apuntes son muy malos así que...

—Perdón por la tardanza me entretuve en el estacionamiento. Abran sus libros en el tema cinco.—suspiro aliviado al ver a la maestra. Menos mal, creo que en esta clase estar centrado va a ser todo un reto.

                              🔹🔹🔹

Me paro en el acto cuando se oye el timbre. Normalmente no me molesta esperar a que los demás salgan pero tenía prisa.

Crucé la puerta adentrandome al pasillo para caminar hacia su salón, en el camino encontré a mis amigos y les dije que me guardaran lugar en la mesa.

Llego al salon y me sorprendo al ver que no hay nadie solo esta un niño dentro salgo de ahí y me giro pensando donde buscarla , no creí que estaría tan molesta conmigo para esconderse pero al parecer lo está, lo que entiendo porque mi madre es… difícil.

Continuo buscándola en la cafetería, en el auditorio, en los salones de talleres y no la encuentro.

Me estoy dando por vencido, sino arreglo esto hoy mañana no podré porque es fin de semana y de alguna manera siento que no puedo dejar pasar tiempo aparte que nos iríamos con los amigos de mis padres.

La última alternativa que encuentro es en la parte de atrás de unos salones, esa área era extraña parecía un error de infraestructura. Un cuadrado donde cabía una mesita con un árbol en medio bastante grande y que lo rodeaban paredes de otros salones era espacio desperdiciado pero por alguna razón estaba, y era hasta cierto punto tranquilo.

Entrando por el de estrecho pasillo encuentro una figura sentada debajo del árbol. Suspiro —May por fin te encuentro— ella al oír mi voz se sobresalta y voltea a verme. Frunce el ceño —Te he estado buscando toda la mañana y me sorprende que conozcas este lugar no muchos lo hacen.

—No lo conocía de hecho creo que estoy medio perdida, pero que bueno que estas aqui, así ya...—dice y su ceño se frunce más — no ya me acorde que estaba molesta— se gira cruzando los brazos.

—Por favor vengo a pedir una enorme disculpa no lo hice a propósito de verdad. —le digo arrepentido.

Ella suspira —Ya se que no fue intencional, pero si no me hubieras hecho correr atrás de ti …

—Lo se, lo sé y no lo haré nunca mas, pero no te enfades, no me dejes de hablar por favor. — esto último lo digo algo asustado, no quería perderla.

Se gira a verme y una sonrisa empieza a aparecer en su rostro cuando de repente piensa en otra cosa— Pero tu madre me dijo que ya no me acercara y que era mejor que me alejara y no quiero hacerla enfadar le puede costar el trabajo a mí madre.

Genial. Mi madre lo ha hecho otra vez — Si, a mi tambien me lo dijo pero con el tiempo se le pasara ya veras, no eres la primera a quien se lo dice pero se le olvidará, aparte ya me puso un castigo.

—¿Encerio? ¿qué te hizo?— se acerca a mi preocupada.

—No me golpeó si te preocupa. Nunca lo hacen, pero si nos castigan.— Mis padres vaya que tenían castigos, nunca nos levantaban la mano pero tampoco nos malcrian, por un momento recuerdo dormir en la oscuridad en el sótano, ese era el peor. Pero no era momento para hablar de castigos. —Se que no te parecerá castigo, pero me puso un instructor de piano.

—¿Y no quieres?

—Se que se oirá muy de niño rico pero simplemente los instrumentos no son lo mío, me gustan más los deportes natación específicamente. Pero mis padres lo saben así que no me queda de otra.

Ella me ve con sus ojos verdosos hay un brillo en ellos ahora. —Lo siento Kellan—baja la mirada.

—Hey está bien, mi madre se dará cuenta de que soy un asco en eso y me dejara libre otra vez, pero mientras este fin de semana no voy a estar pero el lunes nos vemos aqui en el receso ¿Está bien?

—Esta bien. Igual mi madre me dijo que estaba castigada. Así que supongo que ahora nos veremos en la escuela nada más.

—Por el momento si, hasta que veamos que estamos libres otra vez.—ella asiente.—Ahora si me disculpas me muero de hambre

—Ah, claro, si quieres puedes irte. —dice con algo en su voz que noto como decepción.

—¿Irme? No, claro que no, pensaba en ir a la cafetería y regresar. Pero si te molesta que está aquí entiendo que prefieras que me vaya y...

—¡No! —se aclara la garganta— Quédate no  quiero almorzar sola, y si quieres te...te puedo compartir de mi desayuno.
—Me ofrece algo apenada.

Me le quedó viendo nunca me habían compartido de su almuerzo normalmente todos compramos lo que nos apetecía.

—Aunque... aunque entiendo si no te gusta lo que traigo, solo... Solo es un sándwich y fruta.

—Claro que me gustará yo como de todo. — Sonrío viendo color en sus mejillas.— Gracias por compartirlo,  también no me apetece nada de la cafetería.

Me acerco y nos sentamos alrededor de la mesa a almorzar, fue interesante y el sándwich, no sé muy bien de que era, pero hasta el momento creo que era el mejor que había probado nunca.

——————————

I'm here

Espero que les guste.

La verdad es que a mí también jaja salu2 .

(~‾▿‾)