−Mi nombre es Martina Stoessel, pero me puede decir Tini, señor− sonrío tendiéndole la mano.
−Señorita Stoessel, bienvenida− dice con desgana sin apartar su mirada de la computadora.
Confundida bajo mi mano.
−Espero que no vuelva a venir con esa rid...
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Pov Tini 🌷
–Tini no puedes hacerme esto...
Agarro sus manos y las acaricio.
–Ty, tranquilo. Podemos anticipar la celebración para mañana o pasado– sonrío –De igual manera la pasaremos bien.
–No– se aleja enojado –¡Nuestro aniversario es en dos días! No mañana o dentro de un mes.
El tono de su voz entre triste y enojado siempre hace que el pecho me duela y me den ganas de llorar.
–Perdón– susurro dando media vuelta –Pensé que entenderías que es mi trabajo...
Voy hacia mi habitación y abro el armario para buscar mi valija. La única vez que la usé fue cuando me mudé aquí.
Fue difícil despedirme de mis padres y la adaptación de vivir sola aún más, por lo que los primeros días le pedí a Annabeth que se quedara a dormir conmigo. Sonará muy ñoño, pero me ayudó mucho hasta que conocí a Tyler, hace casi dos años...
–¡Anny apúrate!– grito impaciente.
–¡En 5 estoy!
–¿5 horas? Porque creo que es la tercera vez que me dices eso.
Respirando con pesar salgo del departamento. Me ajusto el saco al sentir la suave brisa fría de la noche y miro el cielo encantada.
Pasan unos minutos que se me hacen relajantes para admirar las estrellas y despejar mente de todo pensamiento violento hacia mi mejor amiga.
–Ya. Lista y deslumbrante para arrasar con todo lo que se me atraviese– aparece la susodicha sonriendo maliciosa.
Me impresiona como su cuerpo no se congela ni inmuta con la fría noche de Julio, teniendo tan solo un ajustado y corto vestido rosa brillante, unos tacones del mismo color y una pequeña "chaqueta" de tela fina color negra.
Mientras yo, con mis medias de lana debajo de mi jean negro y una remera manga larga con botas y saco marrón, siento que con cada paso que daré mi cuerpo se endurecerá hasta quedar como un bloque de hielo.
–No entiendo como te das el lujo de llegar tarde a una fiesta en donde serás la agasajada– camino por la vereda para esperara ahí al taxi.
–Se supone que al ser la cumpleañera me van a perdonar unos minutos de tardanza. Además todos saben que...
–¿Te tardas siglos en decidir un outfit adecuado para tu cuerpo de actriz porno?– sonrío burlona.
–Por eso sos mi mejor amiga– dice enternecida –Me lees la mente.
Ruedo los ojos riendo y justo a tiempo el taxi llega.
