Money and child - Luzuplay

No me hagas enojar.

Pov Narradora;

Las horas pasaban rápido para algunos empleados de aquel edificio de miles de dólares, los empleados caminaban a pasos rápidos hoy tenían una fiesta muy importante y debían tener todo perfecto para el señor Maximiliano Rodríguez González de la Villa. Pero lo apodan como Jefe Max, al caso mientras todos limpiaban, lustraban, pulían, acomodaban y ordenaban todo para el festejo, un niño de ojos azules y cabello castaño con puntas amarillas pastel se paseaba por los salones en busca de entretenimiento mientras su padre hacia unas llamadas a los invitados.

Caminaba lento y tranquilo por la cocina esperando a que algo pasará, no era de portarse mal y menos crear algún lío o jugarreta el solo miraba todo a su alrededor se acercó a uno de los pasteleros con cabello pintado de rubio y ojos esmeraldas.

— Hola.. – saludo amablemente mientras se sentaba en una de las tantas sillas de aquella cocina grande – Me llamo Lukas pero dime superLuk!

El niño hablaba con el hombre de ojos esmeraldas quién estaba decorando unas galletas—puesto que pronto se acerca la fecha navideña— el pequeño hablaba animadamente pensado que era escuchado pero el rubio estaba bastante ocupado que apenas escucho su nombre y eso.

—...Y para navidad solo quiero una cosa! Sabes? Es– fue interumpiodo por el de bordes esmeraldas quién le dijo “Shiii” al pobre niño.

— Dios, chaval no vez que estamos algo ocupados? – estaba cansado se notaba en su voz –tengo muchas cosas que hacer antes de que llegue el jefe Maxi y- – un fuerte sonido se pudo oír más un “No, jo'er Rub me pasó otra vez!! ” – Ostia puta...

El de ojos esmeraldas salió corriendo a ayudar a su amigo de gafas quien había incendiado el trapo de cocina por tercera vez, mientras el niño miraba como trataban de apagar el fuego un muchacho de cabellos castaños claros se acercó a la gran cocina para inspeccionar este.

Al ver la escena soltó una risa que nadie vio o bueno, si la vio Lukas, el chico castaño con ojos marrón claro y una piel blanquecina muy hermosa que hacía resaltar sus hermosos cachetes medio rosas más esa sonrisa que trasmitía confianza y paz. Logrando sacar una pequeña confianza en el menor, se quedó quiero mirando como el muchacho de tez blanquecina regañaba a los Cheff de aquella cocina, se rió un poco por aquella cómica escena.

Luego de aquellas quejas el adulto estaba por irse pero noto la presencia del pequeño dejando duda y algo de miedo por aquel pequeño niño que se perdió, no sabía quién era.

— Hola amiguito! ¿Que haces por aquí? – pregunto Borja mirando a ambos lados en busca de sus padres o algo.

— Oh..Estoy esperando a mí padre, el está ocupado y me dejó explorar el edificio – Lukas sonrió mostrando sus dientes y el pequeño hueco que había en medio de uno dejando una pequeña “ventanita”.

— Ahh, ya veo...quieres acompañarme? Así de paso los dos vemos que todo salga bien en otras partes – Lukas dudo si ir con un desconocido pero la sonrisa de confianza que le brindo Luzuriaga hizo que aceptará.

Ambos estaban caminando por los pasillos Borja iba con un portapapeles donde tachaba por dónde iba y escribía como estaba llendo, si el era el supervisor de aquel lugar. Mientras tanto Lukas seguía al lado del adulto quien luego de caminar un poco llegaron a otra habitación donde se podía oler un rico aroma, mejor que el de la cocina, pasaron y vieron a un hombre de cabellos negros con sus ojos morados con algo de negro difuminado y un hermoso rostro.