Nuestro Omega

Capítulo 14: Exámenes de fin de semestre.

Después de la derrota contra Aoba Johsai, Karasuno comenzó a entrenar más duro, mientras se preparaban para los exámenes. Y estaban cerca de ellos, cuando una invitación les llegó.

Todo el equipo no podía creer que hubiesen sido invitados a un campamento de entrenamiento en Tokio, donde volverían a ver a Nekoma. Se emocionaron de inmediato, aunque eso duro poco.

Takeda-sensei cortó su euforia, al decir que debían aprobar los exámenes para ir. Cuatro personas específicamente, quisieron enterrarse bajo tierra.

Tanaka, Nishinoya, Hinata y Kageyama, eran terribles en cuanto a la mayoría de las materias. Cada uno de ellos, era solo bueno en una asignatura, por lo tanto, solo tenían una materia asegurada a aprobar.

Tanaka y Hinata, eran muy buenos en Educación Física, pero eso era todo. Eran desastrosos en cuanto a las demás materias de la escuela.

Nishinoya, además de tener Educación Física aprobada, también era bueno en química. Lo que, sus compañeros de manada, aun no logran entender.

"-Me gusta mezclar líquidos para provocar erupciones y otras cosas, por eso presto atención. -" Es lo que decía el pequeño alfa, cada vez que le preguntaban, como lograba sacar más de 70 en los exámenes de química.

Kageyama, por otra parte, además de ser bueno en Educación Física, era bueno en literatura, pues, aunque nadie lo pudiera creer, le encantaba leer. Aunque, mayormente, lo hacia solo en su cuarto, de noche, porque no podía concentrarse si había ruido.

-Muy bien, será mejor que nos pongamos manos a la obra. -Suga proclamo.

Desde ese día, en la casa, todos se pusieron a estudiar en todo momento, mientras comían se hacían preguntas unos a otros de cualquier materia, y hasta en los descansos, leían libros de las asignaturas, en las que les iba mal.

Los exámenes llegaron, y todos rogaron aprobar para poder ir a Tokio. Se juntaron en el gimnasio con los resultados dentro de un sobre, en sus manos.

-Muy bien, veamos. -Daichi dijo. -A la cuenta de tres, todos abrimos nuestros sobres. –

-Uno. -Asahi contó.

-Dos. -Suga lo siguió.

-Tres. -Daichi termino, y todos sacaron sus exámenes para verlos.

Como era esperado, Daichi, Suga, Asahi, Enoshita, Kinoshita, Narita, Tsukishima y Yamaguchi, aprobaron.

- ¡APROBE HISTORIA CON 67! ¡CHIKARA TE ADORO! -Nishinoya grito, y saltó sobre su compañero alfa, con las notas de sus exámenes en mano.

Enoshita le quito las hojas y las miro. Luego se volvió hacia sus sempais.

-No lo puedo creer, aprobó todo. -Dijo, sorprendido.

- ¡Tomen eso! -Nishinoya siguió saltando de felicidad, antes de notar que su mejor amigo estaba pálido. - ¿Ryu? ¿Todo bien? –

-Desaprobé matemáticas...-Murmuro el nombrado. - ¡NO! –

Tanaka se tiro al suelo, desesperado. Los demás se palmearon la frente... se quedaban sin uno de sus rematadores.

- ¿Y nuestros primeros años? -Asahi cuestiono, mirando a Hinata y Kageyama.

-No lo creo... -Kageyama murmuro. - ¡Aprobé Ingles y Matemáticas! ¡Aprobé con 46! –

Tsukishima le arrebato las hojas de exámenes a su omega y las reviso.

-Maldita sea, aprobó todo... -Mascullo molesto.

-Je, alguien me debe dinero... -Yamaguchi comento, con una sonrisa. -Gracias Kags. –

-Alto. ¿Apostaron a que no aprobaría? -Kageyama pregunto, mirando a sus amigos.

-No. Tsukki aposto a que no aprobarías, y yo a que sí. Y gané. -Yamaguchi explicó.

- ¿Gracias por creer en mí? -El omega miro confundido a su amigo beta. - ¿A ti que tal te fue, Hinata? –

Todos se voltearon hacia su beta de primer año. Estaba igual de pálido que Tanaka. También había desaprobado matemáticas.

Takeda propuso la solución de que llegaran tarde al campamento y ambos asintieron. Tanaka agradeció completamente que su hermana mayor pudiera llevarlos a Tokio.

El lunes en la mañana, el resto de Karasuno partió en un autobús, hacia Tokio, despidiéndose del alfa y beta reprobados.

-No causen problemas, y nos vemos en Tokio. -Daichi dijo. -Tanaka, cuida bien de Hinata. –

-No te preocupes, Daichi-san. Estará a salvo conmigo. -Tanaka le respondió.

-Bien, vámonos. -Takeda hablo, y sacó el autobús del estacionamiento. -Tokio, aquí vamos. –