→ Enamorado de mi Jefe『 Chenmin/Xiuchen 』

Capitulo 1

Ahg, 6:30 a.m. y la alarma del despertador no dejaba de sonar, tal vez pude hacer algo más inteligente que cubrir mis oidos con la almohada, pero con el sueño que me traía obviamente no pensaba, sólo actuaba. Luego de que la alarma de dejara prácticamente sordo, decidí alargar mi mano hasta el aparato, pero en un torpe movimiento este calló al suelo, rompiéndose en mil pedazos, al menos ya no jodería más, decidí levantarme de una jodida vez y sentarme en mi cama, observando mi habitación mientras terminaba de despertar.

-Dios, esta habitación esta hecha una mierda, ¿Para qué esta esa vieja en esta casa si no trabaja? Ah, espera, yo le dije que no entre a mi habitación, ¿Por qué hice eso?- Solté un suspiro resignado y caminé hasta el cuarto de baño, dandome una breve pero placentera ducha.

Al salir me puse -literarmente- la primera mierda que encontré en mi closet, sabía que debía vestir "elegante para no mezclarme con la clase media" Como decía mi padre, pero no me importaba en absoluto, sólo me importaba que tenía dinero que resfregarles en la cara a todos.

Entré en la cocina con mi cabello disparado hacia todas direcciones, notando que mis padres no estaban, genial, debía cocinarme algo yo sólo. Caminé hasta la nevera, en donde encontré una nota de mi madre, la cual ponía:

«Cariño, nosotros salimos temprano al Aeropuerto para ir a China, dejé tu comida lista en la mesa, recuerda ir como un joven pulcro y decente a la Universidad, te llamo cuando llegue a China»

¡Ah! Ahora lo recordaba, ellos iban a un viaje de negocios a China y no me llevaban, que lindo. Solté un suspiro, sería una larga semana.

~~~

-¡Hey! Buenos días.- Saludó Kim JongIn, acercándose a mi para rodear mi cuello con uno de sus brazos y comenzar a caminar a mi lado.

-¿Pasó algo? ¿Por qué tan feliz?- Pregunté al de tez morena, quien me sonrió ladino.

-Hoy despidieron al profesor y en su lugar llega una hermosa y joven profesora.- Dijo JongIn con una sonrisa más amplia aún.

-¿Qué profesor? ¿MinSeok?- Dije sin tomar mucha importancia, viendo a JongIn asentir, ordenando su cabello con una mano.

Llegamos al salón de clase y saludé a otros dos chicos, Park ChanYeol y Kim JoonMyeon, este primero capitán del club de basketball y el segundo el presidente del concejo estudiantil.

-¿¡Te enteraste de la nueva!?- Dijo ChanYeol mirándome emocionado.

-¿Lo de MinSeok?- Pregunté algo desorientado.

-Si, el chino ese, Luhan, está devastado, se nota que le gustaba ese profesor jajaja.- Se burló ChanYeol, miré hacia donde estaba este, quien le dedicaba una mirada de odio profundo a ChanYeol.

Sonó la campana y todos mis compañeros entraron, pero en eso entra el Director, presentando a nuestro nuevo profesor, Wu YiFan. ¿No había dicho JongIn que sería una hermosa chica? Já.

Las clases terminaron al fin, el profesor daba algo de miedo, cada ves que alguien hablaba él prácticamente lo asesinaba con la mirada.

Camino a casa pude apreciar una hermosa cafetería abrir, cuando me acerqué a ver quien abría me dí cuenta de que era MinSeok, al menos ahora trabajará en algo mejor, aunque sinceramente no me importa, pero aquella cafetería se veía bastante atractiva, pasé adentro y me encontré con los ojos de MinSeok, quien en seguida me reconoció y me saludó con su mano. Ese hombre tenía 24 años y parecía de mucho menos, sin contar que se veía algo infantil.

-Buen día... ¿JongDae?- Dijo mi nombre con algo de duda, riendo un poco.

-Buen día, MinSeok hyung.- Dije con respeto hacia mi mayor, el cuál me invitó a sentar en una mesa a su lado.

-¿Cómo estan tus padres?- Dijo MinSeok con una amable sonrisa, olvidé mencionar de que MinSeok es un gran amigo de mi padre.

-Ah, bueno, ellos viajaron hoy a China.- Dije mirando hacia todos lados, analizando un poco más ese lugar.

-¿A China? ¿Hoy? Pensé que suspendieron todos los vuelos a China por el mal tiempo.- Dijo con una gran cara de preocupación, ladeando la cabeza mientras buscaba mi mirada.

Me encongí de hombros mirando aún a otro lado, totalmente perdido, levantandome de la silla y arreglando mis ropas.

-No lo sé, tal vez se escaparon de mi o que sé yo, como sea, suerte con el trabajo.- Dije retirándome de ahí rápidamente, me molestaba la gente que hacía tantas preguntas, ¿O era que me molestaba su simple presencia?

~~~

No sé cómo pasó esto, estaba en el entierro de mis padres, tratando de mantenerme fuerte, ¿Cómo pasó esto? Empecé a llorar sintiendo una gran impotencia, la impotencia de no poder haber hecho nada, de tener que quedar sólo, tal vez parezca que sólo me importaba su dinero, pero por muy descuidados que hayan sido, eran mis padres y los amaba.

-JongDae...- Me llamó MinSeok, posando una mano en mi hombo, tratando de darme su apoyo, yo solamente bajé mi cabeza con tristeza, me sentía tan mal que no tenía ánimos ni de saludar a MinSeok, o al menos agradecer. -Tranquilo, yo te ayudaré a seguir adelante.- Me dijo MinSeok con una gran sonrisa en el rostro, tan perfecta y deslumbrante que podría dejar ciego a cualquiera.

-Gracias, MinSeok...-