No Imaginaba 2. PERMANECER

My Child. Parte 2

Aquel gruñido fue suficiente para regresar a todos a la realidad.

Zhan tomó por los hombros a Qin Su separándola de su cuerpo y mirándola a los ojos preguntó lo que tenía en su cabeza.

-Qin Su, el pequeño, ¿es tu hijo?

Qin Su miró a su hijo y después a Zhan pero bajó la mirada al comprobar que esté la veía directo a los ojos. -S... sí.

-¿Cuántos años tiene?- preguntó Xiao tragando fuerte esperando con ansias la respuesta.

-Cuatro años- respondió Qin Su con duda en los ojos por la mirada intensa que le dirigía el mayor.

Entonces Zhan tenía que hacer la pregunta más importante -El niño, tu hijo... es... ¿Quién es el...? Quiero decir, el pequeño, ¿quién es su padre?, ¿estás casada?

Qin Su bajó la mirada avergonzada sin responder.

Zhan se enderezó y miró al niño con un nudo en la garganta.

- ¿Zhan? - llamó Yibo no entendiendo o no queriendo entender por completo la situación. Comenzaba a sentirse realmente molesto de que Zhan no lo mirara siquiera y es que éste se encontraba sufriendo de un ataque de pánico al mirar al pequeño y luego a Qin Su.

La chica, por su parte, miraba a Zhan ver a su Zizhen, entonces comprendió la pregunta de Zhan. Miles de ideas pasaron por su cabeza lo que no le permitió contestar a su amado.

El celular de Yibo sonó estrepitosamente y sin mirar la pantalla tomó la llamada.

-¡Hermano!- habló Xichen con prisa- tienen que ir a Luanzang de inmediato.

-¿Por qué?- preguntó molesto Yibo con los ojos pegados a Zhan mirando al pequeño. Algo desagradable se sentaba en su estómago.

-El incendio en Luanzang fue por el pequeño.

-¿El pequeño?- preguntó Yibo totalmente confundido, el único pequeño que veía en ese momento era ese niño que miraba a su Baobao con una gran sonrisa.

-El niño que salvó Xiao. Están buscando al niño en este momento. Cheng me acaba de avisar que el incendió en el pueblo comenzó en la casa de ese niño y ahora mismo nos informan que hay una docena de hombres buscándolo. No sé cuánto tiempo puedan seguir protegiéndolo. Tienen que ir de inmediato.

Debido a que la casa de Zixuan se encontraba a orillas de la ciudad era más fácil que la joven pareja llegará al Luanzang en menos tiempo. Yibo cortó la llamada y tomó el brazo de Zhan.

-Tenemos que irnos- Zhan lo miró sin comprender lo que le decía- ¡Zhan! Tenemos que irnos ahora. Van por A-Yuan- urgió el joven.

Eso bastó para que Xiao regresara a sus sentidos.

-A-Yuan- murmuró Xiao con una enorme urgencia de irse.

-¡Espera! Xiao Zhan- llamó Qin Su sosteniendo su mano parando sus pasos.

-Tengo que irme, Qin, lo siento- se disculpó Xiao y soltó su agarre.

-Pero mi mami te ama- dijo el pequeño abrazando la pierna de Zhan- ¡no la dejes! - rogó el pequeño.

Xiao lo miró sin saber qué decir o qué hacer. -Yo... lo siento. Tenemos que irnos.

-Tu quieres a mi mami- No fue pregunta, fue una afirmación. Yibo se quedó congelado en su lugar y sin aire en sus pulmones al mirar al pequeño y luego a Zhan quien comenzó a negar lentamente con su cabeza.

-Yo no... yo...- entonces observó a Yibo y lo que vio lo asustó. Era una mirada que nunca había visto en esos ojos.

-Tu quieres a mi mami, pero no la amas- sentenció el pequeño como si estuviera leyendo el corazón de Xiao.