Ángel Guardián

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Le tomo una semana entera llegar a ''Ciudad Razz''  leyó en el aviso que le daba la bienvenida; los altos edificios que alcanzaba a ver le hicieron saber que esta ciudad tenía el mismo calibre que ciudad Nuss. Ruka se detuvo justo en la entrada mientras hacía memoria de todo lo que le había dado la señora María; le quedaba alimento hasta el almuerzo de ese mismo día, por otra parte, solo tenía ropa limpia para dos días. Ruka se encontró pensando en empezar a conseguir ropa en buenas condiciones; los viajes eran fuertes, desgastando fácilmente la ropa y como prueba, el jeans negro con el que había llegado se había descocido en los muslos, mientras que, unas aves lograron rasgar un poco las mangas de su camisa e incluso, sus zapatillas deportivas empezaban a extrañar días mejores por lo que emitiendo un suspiro, Ruka ingreso a la ciudad observando detalladamente todo el lugar. La primera cosa que hizo fue acercarse a una tienda de electrodomésticos aprovechando para ver en las vidrieras los televisores encendidos que transmitían las noticias y otros programas, luego procuro leer los nombres de las calles y los avisos a su alrededor, logrando saber dónde se encontraba la biblioteca; sitio útil para ir a conseguir información general de la especie humana y del mundo terrenal, pero sobre todo, un sitio útil que existía tanto en ciudades grandes como en pueblos rurales. Pensando en ello, Ruka alzo la mirada al cielo buscando la posición del sol, dato que le era útil para poder llevar los horarios del mundo terrenal; la luna por las noches la había empezado a utilizar con esta misma finalidad, pero había descubierto que el astro dominante de la noche en su fase de luna nueva era imposible de localizar en el cielo... hizo una nota mental de aprender al respecto en la biblioteca, ya que si resultaba ser un evento frecuente, terminaría desorientada durante las noches. A pesar de que, gracias a la señora María logro tener grandes conocimientos del mundo humano... seguía sin encontrar forma de regresar al inframundo aunque, al mismo tiempo se preguntaba si debía hacerlo en primer lugar. La realidad era que había terminado en una situación tensa con Sara, Seira y Rina, hasta el punto de que estaba segura de que la odiaban, por otra parte, la admiración de Gaito le resultaba enfermiza, ya que era incapaz de no asociarla con la arcángel de la exhibición, asi como con el asesinato de Scar, de igual manera, a pesar de que aún no resolvía el misterio entorno a las acciones y su forma de percibir a Mikel, ya no estaba segura de que fuera motivo suficiente para tenerlo cerca. Pero, si pensaba seriamente al respecto... el mundo terrenal aun no le había dado resultados concretos, aunque si era capaz de afirmar que le gustaba la calma que percibía en los días que no se encontraba con cazadores, pensando que, más días tranquilos podrían ayudarle a aclarar su futuro rango de acciones. Sin embargo, cuando los cazadores la encontraban, la forma en que le amenazaban, la forma en que la retaban o insinuaban que podían tomar la delantera, era una situación que le generaba un choque entre una sensación de diversión vaga, un fuerte desagrado y una incontrolable molestia... todas estas sensaciones la hacían perder de vista la sensación de conflicto interno al que debía aferrase, siendo era lo único que le quedaba para mantener certeza de la consciencia de sus actos... una consciencia que si perdía todo se saldría de su control como había ocurrido con la arcángel de la exhibición.Y Riku... seguramente estaba mejor sin ella causándole problemas.


Riku se dejó caer al suelo sentándose a la derecha del trono que se supone Ruka debía de estar ocupando, por mientras, escuchaba los nulos progresos de Rina y Seira en la búsqueda por el inframundo. Justo cuando se encontraba emitiendo un gruñido de frustración, Sara entro a la sala del trono limitándose a cerrar las puertas de acceso y a guardar silencio mientras que, se permitía observar en dirección a Riku. Seira expreso con desanimo y resignacion en su voz

Seira-ella realmente... no está aquí-

Rina-todo parece indicar eso, Seira-

Respondería Rina, por otra parte, Riku recorrió con su mirada a las tres jóvenes generales, personas en quienes Ruka había decidido confiar independientemente de las habilidades que poseían o sus intereses personales; le costaba creer que ni siquiera ellas supieran nada de lo que estaba pasando... por mucho que esa fuera la verdad de su situación. En ese instante, Sara comentaría

Verdadera Naturaleza IDonde viven las historias. Descúbrelo ahora