Con que te vas a interponer en mi camino- comentó el peli rosa haciendo tronar sus dedos al mismo tiempo que una gran sonrisa se dibujaba en sus labios. Al contrario de lo que su ceño fruncido y su mirada con expresión de furia reflejaba.
Claramente...
(Los sucesos que sean iguales que en el anime nobsera narrados de nuevo a menos que haya cambios)
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Totomaru se encuentra en una batalla en contra del mago de fuego el cual se encontraba en el cañón del Jupiter. Con que aguantara 10 minutos el cañón podría ser disparado de nuevo y acabar con el gremio de las hadas.
Por otro lado Mesie Sol y Elfman luchaban el uno contra el otro.
— Recuerdame por que estoy aquí y no voy a ayudar a Totomaro — cuestionó la maga celestial con su ceño fruncido y su mirada levemente ensombrecida por la molestia.
Esta estaba apoyada en contra de la pared de una de las salas centrales de el gremio. Junto a ella un poco oculto se encontraba Aria. El element four del viento.
— Esto es...
— Se perfectamente por que es ésto — dijo fríamente la chica ni siquiera girando a ver al mago del viento — Era una pregunta retorica
— ¡Que triste! ¡La señorita Lucy me odia! — exclamó sollozando con fuerza el mago del viento causando un suspiro de agotamiento de parte de Lucy.
— Y aquí vamos de nuevo — suspiró con agotamiento la maga celestial apoyando su mano sobre su rostro — escuchame pedazo de mierda, no estoy de humor. Así que te callas o te ca
La blonda paro en seco al sentir una descompresión en la cantidad de magia acumulada. Eso solo significa una cosa, que había perdido una de sus fuentes de poder.
La blonda chasqueo la lengua con irritación mientras arrugada levemente la nariz, demostrando algo de fastidio y ciertamente pena hacia Totomaru.
En ese gremio no eran amigos, pero la rubia no pudo evitar sentir aunque sea un poco de aprecio por sus compañeros. Y eso la irritada aún más.
— Los inutiles de Totomaru y Mesier Sol han perdió — indicó molesta la blonda.
Ella mordió con irritación la uña de su dedo gordo por la frustración. Un mal habitó heredado de su madre. Siempre que se ponía de los nervios se ponía así y hacía eso para no golpear a nadie.
