¿ Todo tiene fin ?

"Por la plata baila el mono"

Omnisciente

Erik Erikson un día dijo: “La vida no tiene sentido sin la interdependencia. Nos necesitamos unos a otros, y cuanto antes nos enteremos, mejor para todos nosotros.”

Ludmila

— Por último, le damos una cordial bienvenida a Mila Pérez y Juan Rodríguez. Les deseo un buen año escolar sin contratiempos y lleno de aprendizaje. Suelten chicos.

Estaba atrás junto a mi hermana, ignorando todo lo que decía la maestra, hasta que de reojo veo al chico que momentos antes chocó con mi Melli. Noté que la profe se marchó, así que aproveché.

— Melli, mira —la llamo en un susurro.

— Mmm —emite haciendo garabatos en su cuaderno.

— Que mires —insisto, quitándole el cuaderno.

Ella me miró sorprendida por lo que acabo de hacer—pero que… —le señalo al chico— ese no es…

— Sí, es él y está en nuestro curso —digo emocionada.

— ¿Es un becado?

— Sí, bueno, pero eso no es lo importante, ¿no?

— Voy a ignorar la estupidez que dijiste —se levanta y se acerca a Kila— kilis, kilis.

— Déjame tranquila Leys, ¿no ves que estoy preocupada por Lucas? —contesto concentrada en su celular.

Leysi

— Todavía no aparece —noté que me iba a contar—bueno, ese no es el punto, mira que hay por allá —señalé.

— ¿Becado? —contesta desanimada.

— Bueno sí, un becado, pero… ¿Qué le hacemos a los becados? —no responde—¡lo molestamos kila! ¡¿Podés volver a la tierra?! —todos se nos quedan mirando.

— Me avergüenzas —susurra—pero si querés molestar, vamos a molestar, quiero olvidarme de mis problemas por un momento así que …

— Esa es mi kilis —ella se levanta y le hace señas a Ludmila, al mismo tiempo ella nos sigue.

Omnisciente

A veces herimos a otros simplemente para obtener una sensación momentánea de satisfacción. ¿Puede ser tan patético? Sí, en ocasiones lastimamos porque la felicidad ajena nos provoca sentimientos como bronca, impotencia y celos al no tener lo que ellos disfrutan. Anhelamos lo que no poseemos, generando frustración. En algunos casos, desconocemos la razón detrás de nuestras acciones, pero nos volvemos adictos a esa conducta sin encontrar una salida. ¿O quizás sí la hay? En realidad, puede que nos aterre el cambio.

Kila

Centrada en mi teléfono, esperaba la llamada o mensaje de Lucas, pero solo llegaban disculpas de mis padres, algo que me resultaba indiferente. No era raro que Lucas no respondiera, y sus excusas siempre parecían poco convincentes, aunque al menos se tomaba su tiempo para hacerlo.

A pesar de que Leysi intentaba hablar conmigo, la ignoraba, ya que consideraba que tenía problemas más interesantes que los de unos becados. De repente, crucé miradas con el chico nuevo y me pareció familiar.

— ¡Lo molestamos kila! ¡¿Podés volver a la tierra?! —todos se nos quedan mirando.

Olvidé mencionarles otra diferencia notoria en su comportamiento que hacen distintas a las Mellis, es algo que se hace evidente cuando las conoces durante un tiempo: Cuál es la peor de las dos

— Me avergüenzas —susurro—pero si querés molestar, vamos a molestar, quiero olvidarme de mis problemas por un momento así que …

Comprendo que algunos puedan juzgarme, pero si tengo que elegir entre pasar todo el día sufriendo por no saber dónde está mi novio o hacer que el otro sienta mi dolor hasta el punto de comprenderlo, te aseguro que optaría por la segunda opción.