HERMANA ¡TU ERES MI PROPÓSITO! (EN PAUSA POR CORRECCIONES)

Gracias

-¡Amigo! ¡Estoy arto de todo, por todos estos exámenes!

>Si, yo igual

-¡En matemáticas fue la peor experiencia que he tenido!

>Si, creo igual, bueno, que se le puede hacer, lo hecho... Ah... bueno tu sabes

-Oye... Te haz comportado aún más extraño de lo que ya estabas hace unas semanas...

>Pues... creo que, Gah! creo que es todo el estrés, los exámenes, recién me entero que acabamos de tener el de matemáticas... No lo sé, es que... (suspiro)

-No te preocupes... Ya no falta mucho para que lleguen las vacaciones de Navidad y año nuevo, para que podamos ser más perezosos de lo que ya somos.

>Aahh...! que sentido tiene, además tu sabes que odio navidad. Todo ese consumismo y alegría y falsa felicidad, me dan ganas de.... En resumen, no tiene sentido, menos ahora, lo que menos quiero es pasarla todo un mes encarcelado en una casa con cinco personas y... ella

-¿Mmmm? No quiero sonar como un chismoso pero... ¿Acaso Daniela y tú discutieron o algo por el estilo?

*Era Viernes, el día en el que suponía Derek y Daniela se reunirían a manera de respuesta de Daniela al mensaje de ayuda de su hermano, para ¨algo importante¨

Si bien Daniela había pasado toda la noche entera preparándose para ese día, su hermano Derek, muy aparte, no estaba para nada preparado pues de no haber sido por su amigo, quien dio inicio a la ya típica conversación rutinaria del receso que desde hace unos días no tenían, muy seguramente Derek habría hecho lo que venía haciendo desde que su hermana entró a su habitación creyéndole dormido y dejó aquella nota entrelazada en el rústico collar que tenia en sus manos: "Ignorar por completo ese asunto y fingir que no le interesaba en lo absoluto muy a pesar de que la realidad era otra muy distinta". Derek estaba confundido y quería respuestas, no recordaba si aquella vaga visión de alguien que se parecía, sentía y olía justo como su hermana recostándose justo a espaldas de él, a mitad de la noche sin aparente motivo alguno, invadiendo su privacidad y desechando todo sentido común, tomándolo con delicadeza de las manos solo para dejarle un pedazo de papel con una nota que sería la que lo traería en aquel estado durante dos días completos, era real.

Si no comentó nada antes con su amigo, o con la responsable de aquella nota o con alguna otra persona de su confianza que pudiera aconsejarle era por que no había nadie más en todo el mundo en quienes tuviera confianza verdadera mas que en su hermana y en su amigo, y por razones obvias, ya no se podía contar con aquella bella chica que había sido su cómplice desde que tenía memoria, mientras que el contarle algo tan personal y problemático a su amigo no era una opción que pareciera muy factible pero, desgraciadamente, el ignorar su realidad no traía nada bueno ya que el tiempo se le terminaba y pronto debería toma runa decisión*

>¿Tan predecible soy?... Pero tienes razón, o algo así. La a verdad no lo sé ni yo y no me importa

-¿Cómo que no te importa? Daniela es técnicamente tú única familia... Deben arreglarlo como lo que son... Una familia. Sé que eres "medio religioso y medio ateo", pero aunque suene algo cursi y cliché, en épocas decembrinas es una oportunidad perfecta para la reconciliación independientemente de las creencias de cada persona.

>¡NO!, Ella me odia, me odia y no sé ni siquiera por qué, o desde cuando llevamos así, de hecho apenas estoy enterándome de que hoy es el último día de exámenes, ni si quiera se si desayuné esta mañana o no, y Daniela no me hablado en todo este tiempo como usualmente lo solía hacer para pedir ayuda en los temas difíciles, o... cosas así. No me habla, me evita a toda costa, ¡hasta en el desayuno!, en el almuerzo también, en la cena.... bueno ni siquiera sé si por lo menos aún tome el desayuno, desde que regresa a casa se la pasa todo el día con ¨su hermano mayor¨ estudiando para el estúpido examen de la Universidad, ya ni si quiera he podido escribir nada, absolutamente nada, ni una sola frase, ni siquiera puedo dibujar, ni bocetos, ¡Nada! Pero, ayer... creo que fue ayer, no lo sé que... ella hizo algo, Ah!... no sé ni siquiera que fue lo que hizo o por qué lo hizo, pero estoy seguro de que fue ella, de eso no hay duda. (comenzando a desesperarse y enfadarse con sigo mismo por no poder solucionar un problema tan caótico como aquel)