Único Capítulo

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Las compras navideñas se vuelven una completa aventura por cada centro comercial. Desde padres llevando carritos llenos de juguetes que pagarán a doce meses sin intereses, hasta familias llenando carritos con los ingredientes necesarios para confeccionar los platillos que habrá durante la cena donde seguramente terminan discutiendo o riendo gracias a la ebriedad de algún familiar.

Mientras una madre en compañia de su marido intententaban quitarle del carrito a un padre que iba con su hija una de las últimas muñecas que había en el anaquel, un par de chicos recorrían los pasillos en busca de una serie de luces para comenzar la decoración del árbol que se supone debieron de haber colocado una semana atrás. Uno de ellos iba recargado en el carrito empujándolo con su peso y observando con tranquilidad cada pasillo mientras movía ligeramente la cabeza al ritmo de la canción navideña que amenizaba el ambiente con su letra y ritmo.

—Entonces, ¿Le dirás a Hoseok? —preguntó el chico que caminaba frente a él a cargo de las compras dirigiéndose al pasillo de carnes.

—¿Decirle qué? —preguntó el contrario tomando una postura más correcta y manejando el carrito adecuadamente.

—Vamos Yoongi, no es necesario que te lo repita. —respondió mientras revisaba el precio de los pavos.

—No sé si sea buena idea, Taehyung. —respondió el pálido acercándose a su amigo. —No quiero arruinar nuestra amistad.

—La excusa de siempre. —murmuró aburrido luego de escuchar la típica frase que usan las personas cuando no quieren confesar sus sentimientos.

El pálido caminó un poco por los refrigeradores mientras iba observando cado uno de los empaquetados para despejar su mente de la pregunta que le había hecho Taehyung. Llevaba conociendo a Hoseok desde hace casi diez años y habían forjado una muy buena amistad, sin embargo, y con el pasar del tiempo, Yoongi lo comenzó a ver de otra manera. Su corazón brincaba de alegría dentro de su pecho cuando estaban juntos, sus mejillas enrojecían cuando lo abrazaba o cuando sus manos rosaban accidentalmente, Hoseok se había convertido en el protagonista de sus más hermosos sueños y no había forma alguna de que negara lo enamorado que se encontraba de su sonrisa, sus ojos, su voz y absolutamente todo su ser.

—¿Qué me vez? —susurró antes de picar el ojo de uno de los pescados que estaban sobre una cama de hielo. —¿Qué debo de hacer?, no quiero perderlo de ninguna forma, pero quiero que me ame como yo lo hago. —dijo mientras tomaba al animal de la cola.

—Yoongi, está muerto. —dijo Taehyung colocando su mano sobre el hombro del chico. —Lo siento, pero no creo que responda.

Yoongi suspiró y dejó al pescado nuevamente entre el hielo para posteriormente mirar a Taehyung quien ya había comenzado a "discutir" con un pequeño niño por una barrita de queso que tenía un pequeño regalo pegado a la envoltura.

—Toma. —dijo quitándole el queso a Taehyung y entregándoselo al menor. —Vuelve con tú mamá, pequeño.

—¡Oye!, casi lo ganaba. —reprochó Taehyung formando un puchero en sus labios. —Ahora me vas a comprar cinco.

—Olvida eso, ¿Ya llevas las cosas? —preguntó Yoongi concentrándose nuevamente en las compras. —Hay que apresurarnos o Namjoon nos va a regañar durante el resto del día.

—Solo faltan las luces, y la verdad yo no las he visto en ningún solo lado del supermercado. —respondió mientras subía al carrito un pavo pequeño. —Y que beses a Hoseok. —dijo en un susurro inaudible para el mayor.

—Yo me encargó de eso. —respondió tomando el carrito nuevamente cuando Taehyung comenzó a caminar hacía otro pasillo con una ligera sonrisa.

❝𝐹𝑖𝑟𝑠𝑡 𝐾𝑖𝑠𝑠❞ ➻ 𝐻𝑜𝑝𝑒𝐺𝑎 [𝑂.𝑆]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora