Esa noche, Emma despierta luego de estar horas inconsciente en la ducha. Le cuesta comprender cómo ha llegado a esa situación. Está bastante golpeada y aturdida. Las preguntas sin respuesta se acumulan en su mente. Ella quiere saber qué sucedió y quiénes son los hombres que se llevaron a su madre; pero que a ella la atacaron y dejaron tirada. Sin embargo, hay cosas que pueden resultar más perturbadoras para Emma. Una verdad que se niega a asimilar: La ciudad de Nueva Francia ha sido evacuada para controlar una posible catástrofe y está completamente vacía. Todos se han ido. No queda nadie. Excepto ella. Y Emma tiene que lidiar con las consecuencias de ello e intentar comprender por qué la han dejado... Si es que eso acaso es posible. .................................. OBRA PROTEGIDA POR LAS LEYES DE DERECHOS DE AUTOR DE ARGENTINA. REGISTRADA EN SAFECREATIVE. PROHIBIDA LA REPRODUCCIÓN TOTAL O PARCIAL DE LA MISMA.

Las cosas en el mundo de las sombras no van nada bien. El Rey de las Tinieblas perdió la autoridad que tenía sobre las sombras, y ahora éstas están acechando a su hija. Crow, el oscuro más egocéntrico de todos, tendrá que acercarse a la vida de Keira para cuidarla de las sombras y para ayudarla a entender quién es y cuál es su propósito. Pero nada sale como se suponía en un principio. El mundo de las sombras está más dividido que nunca y es un descontrol. Y ser la Princesa de las Tinieblas no es nada fácil. Mucho menos cuando tu único plan a futuro cercano era terminar la secundaria y colarte en todas las fiestas de verano posibles. Adentrate en el mundo de las sombras junto a Keira y Crow en una aventura llena de giros drásticos.

"Jefe, quiero un hijo suyo" Sí, sé que no es lo mejor para decir cuando conoces a tu jefe por primera vez, pero ¿Qué culpa tengo yo de que él tenga unos genes tan buenos? Si él no fuese tan imponente, sexy y atractivo mi fiebre no me habría hecho actuar así, pero no, tiene que ser el hombre más impresionante que he visto en la vida. Y claro, va mi fiebre y se alía con mi libido gritándome a medio pulmón que me estoy haciendo vieja, que ahora que acabo de cortar con mi prometido, por haberme puesto los cuernos en mi propia cama, me llenaré de arrugas y viviré sola con 40 gatos y dos periquitos con complejo de Romeo y Julieta: Se muere uno, se mata el otro. Y eso no puede pasar. No, No. Me niego. Mi sueño siempre ha sido ser madre joven, mi primer hijo tiene que nacer antes de que yo cumpla 27, es decir, que tiene que ser fecundado en 3 meses. ¡Imposible! Me grita la Grecia inteligente. ¡Genes increíbles a estribor! Contesta la Grecia febril. Y decidme ¿Qué otra cosa podía hacer yo al ver esos genes hechos para mis hijos a menos de 3 metros? ¿No me odiarían mis hijos si no tienen consigo esos genes para ellos y se enteran de que fue por culpa mía, porque no me atreví a luchar por los genes que se merecían? ¿Qué pasa si mi hija tiene una nariz enorme o tiene facilidad para engordar al comer helado por mi culpa? No podía ser, asique cuando me habló y mi yo febril tomó el control, solo pude ser sincera. Jefe, quiero un hijo suyo. Vaya sorpresa me llevé cuando, en vez de mirarme por encima del hombro, ignorarme y congelarme con la su fría mirada como supuestamente el CEO "No estás a mi altura, así que ni te hablo, ni te miro" haría, aceptó. Aunque no me desmayé hasta que, sonriéndome de manera arrogante, dijo que una de las condiciones sería engendrar a nuestro hijo por el medio tradicional: Teniendo sexo. ¿Quien dijo que yo era gafe? El futuro lo dirá, nena