Finalmente, después de cinco días seguidos jugando sin dormir y gastando mis ahorros pude terminar ese maldito Otome. Se supone sería el día más feliz, podría mostrarle a todos esos idiotas que me dijeron nunca completaría el juego que estaban equivocados. Sin embargo, ¿Porqué demonios tuvo que pasar esto? Antes de poder dar tres pasos cai muerto en mi habitación. Hasta el final de mi vida nunca pude hacer nada. Mi sola existencia fue tan lamentable. ¿Tal vez fue por eso? Dios me castigo por mi miserable vida mandándome a este juego Otome que estaba jugando, ¡Ahora yo, Adeuz Fou Rasford, juro hacer de ésta una vida inolvidable! ¡Superaré este castigo y nada me detendrá! Excepto... Una sociedad jodidamente matriarcal.

En el día de los cierres de Yggdrasil Jikan, maestro del gremio "༒︎SKY RULERS༒︎" decidió quedarse hasta el mismísimo final de todo. Víendo a lo lejos los fuegos artificiales mientras juraba nunca olvidar los buenos momentos que vivió junto a sus amigos. Entonces llegó la media noche y con ello la vida de Yggdrasil llegó a cero... Sin embargo... 0:01 ¿Eh? 0:02 ¿¡EHHHH?! Jikan nunca esperó que en cuando los servidores se apagaron él sería enviado a un nuevo mundo junto a su base de gremio. Sin embargo no estaba solo en éste mundo ya que en algún lugar una tumba, una lata de serpientes que nunca debió ser abierta, dió su cara al mundo. Era una cara esquelética llena de gloria, como... Como la de un ser supremo.

En un mundo donde un renacido lucha por convertirse en una eminencia en las sombras una nueva existencia se une para convertirse en el héroe de ésta historia.

Yo, un ser humano común y corriente un día simplemente morí, para mí sorpresa volví a abrir mis ojos, solo que ésta vez lo hice en un mundo de magia y espadas, un mundo que conocía muy bien. El mundo de las novelas y el anime llamado "Redo of Healer". Aunque esperaba solo ser un humano normal a mis 15 años desperté la clase de【Héroe Caballero】. El protagonista de éste mundo ya está decidido, no puedo ni quiero ese lugar. No aceptaré meses o años de tortura solo para al final poder violar a una princesa y reunir un harem. Así que me he decidido, ¡Seré un Co-Protagonista!

Incluso en el final de su vida, después de ser cortado por Kojiro, los pensamientos del tirano de los mares fueron los mismos, desprecio a su rival. Si de algo se lamentaba era de no mostrar un poco más de su poder para aplastar a ese anciano. Pronto sintió su cuerpo fragmentarse y volverse polvo cósmico, pronto su conciencia desaparecería. Un último pensamiento recorrió su mente. "Los dioses no se unen, los dioses no conspiran, los dioses no confían, así es como un dios debe ser, una existencia perfecta desde su nacimiento." -Te equivocas, Poseidón. -¿Quién dijo eso?