Bueno, ya todos se la saben, celulares y carte- NO!, NO!, así no era, perdonen, ehm...Si bueno, como decía, ya todos se la han de saber. Mi nombre es Peter Benjamín Parker y durante varios años he sido Spiderman, más específicamente desde que era un adolescente, si, Spiderman el amigable amigo del vecindario fue una de esas máquinas precoces de odio y hormonas, bueno al menos yo por mi parte tenía donde liberar todo el estrés y si que acababa cansado (un sin fin de veces a punto de morir). La verdad ser Spiderman fue algo que nunca habría soñado ni en mis sueños más salvajes, pelear lado a lado de héroes increíbles, aunque la mayoría si no es que todos me odiaban, pero está bien, eso no me detiene a ayudar a la gente, también llegué a enamorarme y tener varias relaciones hermosas y duraderas (Arruinadas, acabadas). Pero hey, Nueva York me adora (no lo hace), su gente me ama (no lo aman) y hay gente que de verdad cree en mi....¿no?, así que por más pequeño o diminuto que sea el número de personas, si al menos solo alguien cree en mi, entonces vale la pena seguir con esto, no solo porque un gran poder conlleva una gran responsabilidad sino también porque cuando ayudas a alguien, ayudas a todos, por más pequeña que sea la ayuda, pero cuenta.

Traicionado y roto por una pérdida, Percy Jackson se pone en marcha por su cuenta sin ningún camino frente a él. Pero fuerzas extrañas y poderosas están en juego y encuentra un propósito al servir a cierta diosa de ojos plateados. A medida que surgen amenazas incomparables, Percy una vez más se encuentra con el destino del mundo sobre sus hombros. Una traducción al escritor MementoVivere11.

A Percy se le ofrece la divinidad y acepta después de que Annabeth rompe con él por su medio hermano Nathan, que se jacta de ser mejor que Percy. Siga leyendo para descubrir qué les sucede a nuestros héroes en este viaje.