La Verdad De Sus Ojos
Ya no sabíamos qué hora del día era o si era de noche, la oscuridad se apoderaba de todo centímetro de luz, de esperanza... Lo único que se podía sentir en el ambiente era la tensión que había entre morir y vivir que se podía cortar con un simple movimiento, el temor corría por nuestras venas, los pies sangrados de co...